𝐴𝑙𝑤𝑎𝑦𝑠 | 𝑆𝑒𝑣𝑒𝑟𝑢𝑠 𝑆𝑛𝑎𝑝𝑒

Capítulo 15

Roma

—Si Sev, sigue.—digo con voz melosa.

—Eso es suficiente para mí.—dice Sev con autoridad, la cual se acaba en cuanto largo una pequeña risa.

—Oh si, suficiente para ti pero no para mí, yo nunca, nunca pierdo una apuesta y está no será la primera, ¿Okey? Me tengo que ir.

Él me mira con confusión para luego negar con la cabeza.

—¿Vas a dejarme así?

Me río para luego palmear su hombro.—A menos que me ruegues y yo gane la apuesta te quedarás así, ve tu cómo lo resuelves.

—Bien Roma, pero más tarde cuando estés en tu cama a oscuras, con tus dedos dentro de ti, tocandote desesperada pensando en mi, grita mi nombre, así sabré que si gane la apuesta.

—Eso quisieras cariñito.

Sin más se da media vuelta y camina por el pasillo sin siquiera girar a verme.

Pensando en todo lo que paso hoy con él me dirijo a la biblioteca para buscar a Remus y los chicos. Lo que resulta extraño es que Avery no haya aparecido para reclamar alguna mierda sobre que soy una traidora por juntarme con "traidores y sangres sucias".

Al llegar a la biblioteca la encuentro casi vacía, exceptuando a dos chicos que están en las mesas cerca de las puertas. Creí que eran los únicos que se encontraban allí hasta que se escucha el estruendoso ruido de un libro cayendo el suelo y el típico tono de reproche de Remus.

—Hola princesitas.—me asomo por la estantería llena de libros para luego pasar a sentarme cerca de Remus.

—¿Ya terminaste de dar espectáculo en el pasillo?

—¿Acaso huelo a celos Black?

—Si de hecho si, estoy celoso porque no entiendo que es lo que tiene ese idiota que yo no.

Él se cruza de brazos como un niño que hace berrinche.

—Bien te voy a dar dos puntos que deberían de contestar tu gran duda existencial sabueso. Primero, tu y yo no somos amigos no existe ningún tipo de lazo que a mí me diga que te debo explicaciones, segundo y último punto, eres un leonsito asustado que niega a los suyos y los traidores a su verdadera sangre no me agradan, y tu sabes que no me refiero a la sangre pura.

—No hables de lo que no sabes Roma.— dice con tono serio mientras me da la peor mirada del mundo.

—De hecho te sorprendería todo lo que sé.

El gira los ojos y sigue hablando de lo que sea que hayan estado hablando con James antes de que llegue yo.

—Bien, nadie hablara de la relación de nadie con nadie y mucho menos de la sangre de nadie, todos amigos, ¿Está bien?

Paso mi brazo por los hombros de Remus mientras le dejo un beso en la mejilla.

—Bien tesoro.

***

Pasa un largo rato cuando debemos volver a clase, por suerte para mí todavía solo me quedan tres horas de clases y ya se acaba mi día escolar.

El día se tornaba agotador al pasar el tiempo y Snape no me miro ni una vez en todo el tiempo de clase que tuvimos. Al entrar al aula tomo asiento al lado de Barty y desde entonces no tuvimos contacto, según la larga y extensa experiencia de mi amiga Cissy, él está haciendo parecer que no le importo para que lo busque yo primero.

Bien, no es algo a lo que a mí me hubiese costado llegar en conclusión pero siempre es bueno escuchar la opinión de Cissy, por muy básica que parezca.