Luz Moribunda

Capítulo 6: Una visita mágica

El mes de agosto pasó sin incidentes para Harry, leyó sus libros escolares una y otra vez, practicó algunos de los hechizos mencionados en los libros y realizó sus propios experimentos mágicos. Se dio cuenta de que parecía haber dos tipos diferentes de hechizos, algunos necesitaban un gran control a lo largo de tales como encantos, mientras que otros sólo necesitaban una "ráfaga" y se hicieron, como la transfiguración, aunque extrañamente sus libros no mencionaron esto, asumió que sería algo que los maestros les dirían o posible más tarde, incluso en años posteriores, ya que recordaba que personas como Hermione no tendrían ninguna experiencia con la magia como él y la magia criada los niños lo hicieron.

Por cierto, Harry se enteró de los dos tipos de hechizos cuando intentó transfigurar una de sus tías viejas tazas de porcelana astilladas en una tetera de porcelana, lo manejó, sin embargo, la tetera no era lo suficientemente gruesa y el chip de la taza estaba presente en la olla, lo que la hizo inútil. Cuando probó Diffindo con su varita, dividió no solo la taza sino también el escritorio debajo, había arreglado el escritorio antes de que Petunia se acercara para despedirlo por hacer una raqueta en su casa, después de eso decidió no practicar magia destructiva hasta que llegó a Hogwarts.

Se aseguró de saber de qué se trataba cada tema y algunos hechos útiles para cada uno en caso de que lo interrogaran una vez que llegara allí, se centró principalmente en la teoría mágica, ya que él mismo había sabido poco al respecto, ya que se había centrado más en lo que podía hacer y en cómo hacerlo mejor que tratar de entender el razón exacta por la que hizo trabajo. Rápidamente descubrió que parte de la teoría mágica dentro de los libros estaba equivocada o al menos no del todo correcta, ya que Harry había hecho magia clasificada como "imposible" en el pasado, como tal, decidió considerar el leyes de la magia vacilante, uno de esos ejemplos de que las leyes eran incorrectas era el orbe de metal que había convocado y formado hace solo unas noches, era este mismo orbe el que estaba tomando los pensamientos de Harry en este momento...

Sus libros decían que para hacer algo permanentemente con magia se requiere una muestra de antemano, la vieja "energía no puede ser hecha o destruida sólo cambiada" el libro decía que hacer algo con solo magia haría que se desvaneciera a menos que fuera sostenido regularmente por una bruja o mago, el libro decía claramente que los objetos hechos mágicamente mostrarían signos de descomposición o reversión después de unas pocas horas de haberse formado, casi tres días después y su orbe permaneció exactamente como lo dejó después de haberlo logrado por primera vez. Lo miró ahora y se enfocó para cambiar a su vista mágica, vio su magia agrupándose dentro de la esfera como si estuviera atrapada en una corriente, incluso parecía estar alimentando su varita que todavía estaba en su surco en la parte superior.

'Supongo que el orbe podría estar haciendo su propia energía como una especie de reactor que explicaría el efecto de remolino, pero que viola las reglas de la energía...' Harry puso un pequeño signo de interrogación junto a esa ley en particular dentro de su libro, ya que no podía confirmar ni negar la ley, ya que su orbe parecía existir dentro de un área gris, fue hecho sin una muestra física, así que por derechos la ley como el libro lo describió estaba mal, pero Harry había usado su propia magia como muestra, fue sacado de sus pensamientos por su tía llamándolo.

Mientras Harry diseccionaba las leyes que habían gobernado a brujas y magos desde que fueron descubiertos por primera vez y escritos, otro niño al otro lado de Londres estaba tratando de hacer flotar sus monedas, sin embargo, no importa cuán duro Hermione deseara que la moneda se negara a moverse, esto le molestó sin fin ya que Harry Potter había podido hacerlo inconscientemente sin siquiera pensarlo, no le ayudó a pensar que sabía que si solo sostenía su varita mientras enfocaba la moneda, le obedecería todos los deseos.