¡No eres mi mamá! [KookGi]

[07]

—¡Dioses, es tan tarde!—Chilló el bonito omega mientras abandonaba la calidez de sus mantas y corría por toda su habitación, alistándose para irse al trabajo, esa mañana tenía una reunión muy importante y si se atrevía a llegar tarde su jefe lo haría pedazos.

Se detuvo por un momento frente a uno de los espejos y sonrió satisfecho ante su apariencia, sin pensarlo demasiado tomó su maletín y abandonó su departamento con pasos rápidos, esa mañana ni siquiera uso el ascensor, en su lugar bajo corriendo las escaleras y sonrió feliz al recibir el mensaje que indicaba que el taxi que había pedido acababa de llegar, sin embargo, todo atisbo de felicidad desapareció de su rostro al observar a su madre atravesarse en la puerta de entrada del edificio en el que residía, siendo acompañada de un hombre que vestía formalmente, dioses, justamente ese día su madre había tenido la grandiosa idea de hostigarlo, ¡genial! 

—Yoonie, cariño, mira quiero presentarte a...

—Madre, ahora no.—Le cortó Yoongi con seriedad e intentó rodearla para salir, sin embargo, ella fue más rápida y sostuvo su brazo sin medir sus fuerzas, clavando sus uñas en el mismo y provocándole un chillido al omega.

—No seas mal educado, Yoongi, solo será un minuto.—Sentenció la mujer con una sonrisa algo molesta.—Cariño él es Byun Baekhyun, es médico en el hospital de Kangbuk—Presentó la mujer con emoción al joven, quien sonrió avergonzado al notar que el omega tenía prisa, suponiendo que se trataba de un asunto de trabajo.

—Ah, si, mucho gusto.—Respondió el omega extendiendo su mano en dirección del alfa, quien la estrechó unos segundos y lo soltó.—Me disculpo pero debo irme.—Dicho esto se soltó del agarre de su madre y se dispuso a avanzar, siendo detenido de nueva cuenta.

—Deja de ser tan grosero, Yoongi, yo no te eduque así.—Reprendió la mujer.—Joven Byun, disculpe a mi hijo, no entiendo porque se comporta así pero no tenga duda de que yo permaneceré aquí con usted hasta que este malcriado y usted hayan llegado a un acuerdo para una cita.—Aseguró con una gran sonrisa y Yoongi gruñó.

—¡Ya basta, no tengo tiempo para esto!—Sentenció el omega soltándose nuevamente del agarre de la omega y avanzó a zancadas en dispuesto a marcharse.

—¡Insolente, estás avergonzándome, vuelve aquí, Min Yoongi!—Gritaba su madre mientras lo seguía, hasta que lo alcanzó antes de tomar su taxi.—No puedes hacerme esto, volverás ahora mismo y pactarás una cita con ese alfa, será un perfecto esposo para ti y sin duda tendrán lindos cachorros.—Sentenció la mujer con seriedad y el omega suspiró frustrado.

—Madre, no es el momento, debo irme, tengo una reunión y pueden despedirme si llego tarde.—Explicó el omega intentando no perder la paciencia.

—Eso ya no importa, si te casas ya no necesitarás ese trabajo.—Respondió su madre con desinterés y el castaño la miró como si tuviera dos cabezas.

—¡Estás loca, me esforcé mucho por conseguir este empleo y no lo perderé por una tontería!—Sentenció dispuesto a subir al taxi, siendo nuevamente jalado por su madre.

—Entiende, Yoongi, ya eres demasiado mayor, si no te casas ahora no lo harás jamás, es momento de que abras los ojos y aceptes tu destino—Comentó con severidad.—Todos en la familia se burlan de ti y de tu hermano porque no son capaces de sentar cabeza y...

—No me importa lo que ellos piensen, yo elegí esta vida y me gusta.—La cortó.—Y no pienso cambiarlo solo porque tu familia lo ve como un fracaso, yo no pienso conformarme con tan poco como todos ellos lo hicieron, yo no quiero ser como tú...—Sus palabras se vieron interrumpidas por la bofetada que su madre le dio mientras lo observaba con molestia, mordiendo su labio inferior para retener su rabia por las palabras dichas.