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Jeon Jihyo mantenía una bonita sonrisa mientras caminaba por la ciudad de la mano de su padre omega, quien charlaba con ella animadamente, contándole de lo mucho que había hecho durante uno de sus viajes de trabajo. Había transcurrido una semana desde el accidente de la abuela Jung, en esos momentos la mujer se encontraba en buenas condiciones de salud, por lo que todas las personas a su alrededor habían retomado de manera rápida sus rutinas.

—¿A dónde vamos, papi?—Cuestionó la menor con una expresión curiosa y el omega la observó.

—Iremos a una cafetería, hay alguien a quien quiero presentarte.—Respondió con simpleza, recibiendo un rápido asentimiento por parte de la menor. 

Minutos después sus pasos se detuvieron frente a una llamativa cafetería que la cachorra conocía muy bien, ya que fue justo en ese lugar donde su padre alfa la llevó después de presentar al omega Min como su pareja, ugh, el solo recuerdo lograba irritarla, pero poco podía hacer, lo único que le quedaba era rezar porque ninguna de escena de ese tipo volviera a repetirse. 

Ambos se adentraron al sitio con pasos lentos y la menor miró atentamente el lugar, solo había tres mesas ocupadas, en la primera había una pareja de adolescentes, por lo que entendió que no se trataba de ellos, desvió su atención a la mesa de la esquina, logrando observar a una mujer bastante bonita, de cabellos rubios y piel muy blanca, pero no fue eso lo que llamó la atención de la cachorra, sino los gemelos que charlaban animadamente con ella.

Ambos niños eran idénticos a la mujer y aparentaban tener la misma edad que Jihyo, por lo que la menor no evitó emocionarse un poco al darse cuenta de que estaban avanzando en esa dirección, genial, ahora tendría nuevos amigos.

—Hobi, por aquí...—El llamado de una voz masculina devolvió a la menor a la realidad y desvió la mirada a la mesa de a lado, encontrándose con un apuesto hombre.

Jihyo miró aturdida al hombre, y se dejó arrastrar por Hoseok, hasta llegar a la mesa, de manera rápida el omega soltó la mano de su cachorra y se acercó al desconocido para ofrecerle un cálido abrazo, acompañado de un agradable saludo. 

La menor no quiso hacer un escandalo, al menos hasta antes de observar al desconocido apartarse de su padre para ofrecerle un beso en la comisura de los labios, para después mirarlo con adoración, dios, no, ella conocía esa mirada y era consiente de que se trataba de una mala señal.

—Papá...—Llamó ganándose la atención de los dos adultos, quienes la observaron atentamente.

—Ven cariño...—Pidió el omega extendiendo una de sus manos y la menor se acercó para después tomarla.—Jackson, ella es mi hija, Jeon Jihyo.—Presentó con una sonrisa relajada y el alfa asintió para después acercarse y ponerse en cuclillas frente a la menor.

—Hola Jihyo, es un gusto conocerte.—Expresó el hombre con amabilidad.—Tu papá me ha hablado mucho de ti y estaba ansioso por conocerte.—Contó, extendiendo su mano para ofrecerle un saludo, sin embargo, la menor lo rechazó.

—Es gracioso, a ti nunca te ha mencionado.—Respondió con altanería, ignorando la expresión sorprendida del omega.—¿Quién eres y que relación tienes con él?—Cuestionó de mala manera y la sonrisa del alfa flaqueó. 

—Uh, quizá no soy tan interesante como pensé...—Expresó el hombre mientras rascaba su nuca con incomodidad.—Bueno, supongo que no importa, mi nombre es Jackson Wang, mucho gusto.—Se presentó, volviendo a sonreír con amabilidad, recibiendo en respuesta un bufido. 

—¿Qué relación tienes con mi papá?—Insistió la menor con el ceño fruncido y el alfa suspiró. 

—Yo puedo responder eso, cariño.—intervino el omega, ganándose ambas miradas.—Jackson y yo nos conocimos en uno de mis viajes a Busan, uh, hemos estado saliendo y decidimos formalizar nuestra relación, somos una pareja ahora, por eso quería que lo conocieras...   

¡No eres mi mamá! [KookGi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora