Tarde productiva.

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POV Izuku.

Era una mañana soleada y yo estaba en mi moto, listo para hacer mi primer trabajo como repartidor. 

Llegué a la tienda donde se había hecho el pedido y me bajé del casco para poder hablar mejor con el vendedor.

Buenos días, vengo a retirar un pedido para el señor Hawks. -  Le dije al hombre que estaba detrás del mostrador.

Buenos días, joven. ¿Cuál es su nombre? - Me preguntó el hombre acercándose a su computadora para buscar el pedido.

Me llamo Izuku Midoriya. - Le respondí.

De acuerdo, déjeme ver... - El hombre tecleó rápidamente en su teclado y luego asintió. 

Aquí está, su pedido está listo. Le traeré su comida enseguida. - Asentí y espere a que el señor volviera.

Aproveché para mirar mi celular y ver el chat con All Might, que me había enviado la ubicación del aeropuerto, ya le había informado a su amigo que yo iba a tomar el trabajo, por lo que suponía que no tendría problemas para entrar.

Apague mi teléfono y lo guarde en el bolsillo de mi pantalón al ver que el hombre volvía. Regreso a su puesto y me entrego la bolsa.

Aquí tiene, joven, el recibo está adentro. Que tenga un buen día. - Me dijo el hombre con una sonrisa.

Igualmente, gracias por todo. - Le dije y me despedí volviéndome a poner el casco.

Salí de la tienda y me dirigí a mi moto, guardé la comida en el maletero, esperando que no se enfriara demasiado y arranqué el motor, listo para ir al aeropuerto.

Encendí el GPS que ya tenía introducidas las coordenadas y seguí las indicaciones. Mientras conducía por las ajetreadas calles, me preguntaba cómo sería Hawks en persona, si sería tan amable y divertido como aparecía en la televisión o si sería más serio y exigente como jefe.

Después de unos largos minutos en el tráfico, logré llegar a la entrada del aeropuerto. Dejé mi moto estacionada en uno de los lugares vacíos y saqué la bolsa con la comida. Entré en el establecimiento y me acerqué al guardia que se encontraba de turno. Le mostré mi identificación y le expliqué que venía a entregar un paquete al señor Hawks.

Claro, joven, puede pasar. La oficina del señor Hawks está al fondo, a la izquierda, verá una puerta con su nombre en ella. - Me explico el guardia amablemente.

Muchas gracias, señor, que tenga un buen día. - Le dije y seguí sus indicaciones hasta llegar a la puerta señalada. En ella había una placa que decía:

Jefe de las aerolíneas HawksSky. 

Con un poco de nerviosismo toqué la puerta esperando una respuesta que no tardó mucho en llegar.

¿Quién es? - Una voz masculina se escuchó detrás de la puerta.

Soy el repartidor, señor Hawks. Vengo de parte de All Might a traerle su comida. - Me acerqué a la puerta y elevé un poco mi tono de voz para que me escuchara bien.

Unos pasos se acercaron junto al sonido de la perilla de metal. La puerta se abrió dejando ver a una mujer morena de pelo blanco.

Hola, pasa, pasa, no te quedes ahí parado. - Me dijo la mujer con una sonrisa 

Gracias. - Le respondí y entré en la oficina. Ella salió y cerró la puerta dejándome solo.

Era una oficina minimalista, llena de estantes con libros y diplomas, junto con una gran ventana dando visión al aeropuerto entero. Era a una vista hermosa. También había un gran escritorio.

El cartero.(HIATUS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora