- ESP
La luna brillaba cual farol de media noche. Hace mucho tiempo que Joe se había prometido a si mismo a no asistir a grandes reuniones nunca más.
Sin embargo, esta ocasión no pudo oponerse.
Resulta que, Moe había sido extrañamente convocado por Cortex, junto a otro grupo de mutantes. Y debido a la curiosidad, este no pudo abstenerse de aceptar la invitación. Incluso si ambos hermanos eran los que menos seguían las ordenes del cabezón amarillo.
Joe no se hallaba tan feliz por el hecho de que Moe aceptara, pues al haber sido convocado solo el contrario, no le permitieron la entrada. Y la situación empeoró cuando no lo dejaron esperar a su hermano fuera de la oficina de Cortex, lo que hizo que optara por irse a algún lugar que se encontrase cerca al Castillo (Ya que quería esperarlo y no quería quedarse hablando con los mutantes restantes dentro del lugar.)
Debido a la hora a la que habían venido, varios establecimientos ya se encontraban cerrados, a excepción de uno..
El casino de Pinstripe.
Es en ese momento, que el rostro del reptil se transforma en una mueca de disgusto con tan solo pensar en el potoroo.
No solo su personalidad lo volvía totalmente una molestia para el dragón de komodo, Joe se sentía capaz de soportarlo por al menos una hora. Lo que dañaba fuertemente su orgullo era tener que meterse en la cabeza el hecho de que había caido tan bajo, que entraría a su maldito casino.
Suspiró, no había otra opción, estaba demasiado lejos de casa.
...
Y ahí se encontraba ahora, sentado en uno de los muebles de terciopelo, mientras el bullicio de la gente incrementaba y el ruido de las máquinas opacaba con ello el local entero.
Joe se sentía incomodo. Hace unos minutos, se había acercado al bar en busca de algo para beber. Quería que si quiera el alcohól lo ayudase a tranquilizarse un poco, o incluso dormir hasta que Moe regresase y pudieran irse a casa.
La mayoría de bebidas eran fuertes, para la suerte del reptil. Pero pasado un rato se arrepintió un poco pensando en lo peor si es que llegaba a quedar demasiado torpe a causa de beber...
Una inexistente noticia vergonzosa invadió su mente:
''Encuentran a dragón de komodo cantando en karaoke sin supervisión''.
Que desastre.
Suspiró y volvio a mirar la cartelera que traía los nombres de las bebidas, luego pidio cualquiera que no tuviese wumpa como ingrediente de por medio.
Se quedo un largo tiempo en el bar, viendo como recientemente se había inaugurado una enorme pista de baile al lado del Casino, pero que tenía una puerta conectada directamente a este. Parecía un salon de recepciones, no le sorprendió pensar que Pinstripe la habría mandado a contruir solo por darse gusto.
Vió atra vez de la alta puerta de cristal como es que la gente parecía llegar de a montones mientras bailaban. Una que otra pareja discutia, había gente que estaba ebria hasta morir, entre otros.
Joe no lo encontro tan interesante, haciendo que se concentrase otra vez en sí mismo y en sus pensamientos. Eso hizo que nisiquiera tocase su bebida.
...
Habían pasado por lo menos hora y media. El reptil había dejado la barra hace mucho, y la cantidad de gente había disminuido. Joe no se sentía cansado, al contrario, tenía imsomnio. Quizas era por el estrés, o quizas era porque sentía que le faltaba el aire dentro del local. Eso lo hizo pensar en que cuando llegase a casa, probablemente ya no dormiría y tendría que quedarse haciendo alguna otra cosa.
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𝓥𝓪𝓵𝓼
Hayran Kurgu'' A veces me pregunto si volvería a caer por tí. Si de verdad, fuera lo suficientemente estupido como para volverme a enredar en tus venenosas redes y que no me importase en el proceso. Estaría dispuesto. Pero sé que eres tan cambiante como todo...