You are SO NOT invited to my Bat Mitzva! | Andy Goldfarb

8

Evangeline Friedman

Estaba hablando con los chicos por WhatsApp. Planeaban otra salida, pero esta vez sería un picnic, o al menos eso decían. Caminaba hacia el partido de Andy, me habia invitado la otra vez y claramente no podía decirle que no.

Al llegar me quede bajo las gradas terminando de escribir un mensaje a Ronnie cuando sentí unos brazos abrazarme.

—Viniste —dijo Andy.

—Claro. —sonrei. —No podía perderme tu partido

—Te reserve el mejor lugar.

—¿Si? ¿Cuál es? ¿Uno donde también me darás un balonazo como a Stacy?

Él río.

—No, bueno, si no hubieran rejas si podría darte un balonazo —me respondió mientras tomaba mi mano para obligarme a caminar. —Es de los más cercanos a la cancha, te dará el sol pero es el mejor lugar.

—¿Primera fila?

—Exacto.

—Que bueno que me puse bloqueador.

No sé como le hizo, pero tras caminar unos minutos llegamos a unas gradas que estaban pegadas al campo y la entrada principal de ellos hacia el campo.

—Buen lugar. —le sonrei. —Me voy a asolear.

El soltó una pequeña risa.

—Tengo que ir a jugar, te veo después, ¿si?

—Sí, suerte. —le sonrei mientras me sentaba.

—Gracias

Él regreso por donde vinimos. Mientras el partido iniciaba estaba hablando con Kym por mensaje.

Escuche un silbato y alce mi vista, el partido estaba por iniciar. Sonare como la típica chica pick me, o que se yo como le digan ahora, pero me gusta el fútbol y sé jugar, así que no me costo mucho emocionarme o enojarme con el árbitro, al igual que otras personas que estaban a mi alrededor y que no sé en qué momento llegaron.

En resumen, iban empate, 2-2, pero sobraban tan solo como dos minutos, también hice un amigo, Thiago, era un nene de como 5 años que se sentaba a lado mío.

El bullicio inicio al último minuto, el equipo de Andy tenía la pelota, pero la portería del equipo contrario estaba hasta el otro lado del campo. Los gritos de Thiago y los míos eran posiblemente los que más se escuchaban.

Y como en buena película de Disney, o algo así, Andy tenía el balón y a pesar de lo lejos que estaba, se alejo lo posible de los demás jugadores y lanzó la pelota desde la mitad del campo. El portero no alcanzó la pelota, y luego de un segundo el silbato sonó. El bullicio se volvió a armar en manera de celebración. Mantuve mi vista en el campo viendo como el equipo de Andy celebraban como un equipo normal de fútbol, cargaban al que metió el gol, o sea que crgaban a Andy. Rei al ver eso, creo que solo pasaba en transmisiones en vivo con equipos de la liga mayor.

Andy noto mi mirada sobre él y me señalo susurando algo.

creo que Thiago noto que veía al equipo, exactamente al que estaban cargando.

—¿Te gusta? —preguntó. Lo mire.

—¿Qué? No... es solo mi amigo.

—Ajá. —el sorbo de un refresco que no se de donde saco. Bueno, la gente ahora saca lo que se le de la gana de donde sea.

El equipo comenzó a acercarse, supongo que irían a los cambiadores o algo así. Me quede viendo hacia ellos y vi como Andy se quedó hasta atrás, cuando su equipo entró, él paso a las gradas y me abrazo. Yo seguí el abrazo.

—Felicidades. —dije mientras él dejaba de abrazarme.

—Gracias. —él me sonrio.

He pasado mucho tiempo con él y seguía poniéndome nerviosa cada que estaba cerca mío, wow.

—¿Alguna vez has besado? —me pregunto. Yo negué con la cabeza levemente.

—No...

—¿Me permitirían ser tu último primer beso?

Alto, ¿Andy acaba de decir eso de verdad o esto es un sueño?

No sé en qué momento Andy estaba muy cerca mío, me va a dar algo. Asentí levemente a su pregunta. Mi vista se mantenía en sus labios, pues la diferencia de altura hacia que levantara la cabeza para ver sus ojos, así que veía sus labios.

Él terminó acortando el poco espacio que había entre nosotros y ne beso. Me voy a desmayar. Andy Goldfarb me está besando.

Juro que me voy a desmayar. Cuando nos separamos me di cuenta que no era un sueño, ni siquiera llegaría a la parte del beso, solo despertar antes.

—Eva...  realmente me gustas desde hace mucho.

—A mi también me gustas Andy, desde que era pequeña. —dije. La sonrisa que había en la cara de Andy se extendió más y me abrazo.

—Evangeline Friedman, ¿me permitirías el honor de ser tu novio?

Solte una pequeña risa.

—Claro que sí, Andy.

Stacy Friedman

Sonare como uno acosadora, pero estaba viendo el partido de Andy, iba a ir a felicitarlo cuando el partido acabó pero solo logré ver como se quedaba en las gradas hablando con alguien. Cuando la abrazo pude notar que era Eva.

¿Qué hace ella aquí?

Comencé a caminar hacia ellos pero la gente de las gradas comenzó a salir provocando que me taparan el paso. Comencé a subir algunas bancas para lograr verlos. Entre toda la gente solo logré verlos en el peor momento. Andy beso a Evangeline.

Sentí una lagrima resbalar por mi mejilla, pero la limpie rápidamente y comencé a bajar para ir con Eva. Empuje a toda la gente que vi y al llegar solo estaba Eva, dando pequeños brincos y hablando por mensaje.

—¡Eva! —la chica dejo de escribir, de brincar y alzó su vista.

—¡Stace! Hola. —me sonrio mientras apagaba su celular.  —No sabía que estabas aquí.

—Tampoco sabía que tú estabas aquí. —dije.

—Ah, Andy me invito hace unos días. —me respondió simple.

—¡Eres una maldita! —le grite. Aproveche que no había nadie en las gradas, solo ella y yo.

—¿Qué? —ella frunció el ceño. —¿Y ahora que hice?

—¿Qué que hiciste? ¡Te besaste con Andy!

—¿Y eso que-? —no deje que terminará la frase.

—¿Por qué lo hiciste?

—Él ya no te gusta, tú lo dijiste.

—¡Eso no te da derecho a be-!

Esta vez ella no me dejó terminar.

—¿Por qué no?

—Porque no te gusta.

Ella no dijo nada, eso me dijo todo.

—¿Solo piensas usarlo porque según tú prefiero a Lydia?

—Claro que no Stacy, nunca haría algo así.

—¡No lo parece! —la mire mal. —Apartir de hoy, no eres más mi hermana Evangeline.

—¿Qué dices? —ella frunció el ceño.

—¡Que no eres más mi hermana! Eres una maldita. —limpie las lágrimas de mis ojos y me di la vuelta para comenzar a irme, pero a los segundos me detuve. —Ah... una última cosa ¡Evangeline Friedman, no estas invitada a mi Bat Mitzvah!