El caballero blanco [EN EDICIÓN]

Cap. 16. ¿Red? Parte 2.

Capítulo 16 {¿Red?} {Parte 2}

Las personas, son capaces de elegir las cosas que hacen, que ven, que escuchan... Las personas son capaces de pensar por sí mismas, tener una familia estable con la cual compartir tú día a día, tus secretos...

Pero no es nuestro caso.

Luego del extraño ataque de Red, caminamos por la calle principal, hasta que pasamos el condominio, y pasamos más calles, yo sólo seguía a Red, que tenía la mirada pérdida en el frente de la calle. Las casas se hacían más escasas, los árboles más continuos, y el asfalto más antiguo, con manchas y marcas, sus líneas menos marcadas, caminábamos en silencio, y ahora la calle estaba desierta, sólo hojas secas en el piso, la acera se hizo de tierra, y los árboles estaban uno junto a otro, uno atrás de otro, como un bosque anaranjado.

Comenzaba a asustarme, preguntarme si realmente debía seguir caminando, dudando de si Red estaba realmente caminando con una dirección, su mirada se veía realmente perdida. Después de un rato llegamos a la línea del tren, y caminamos por ella, sólo unos dos minutos, y frente a esta apareció una ancha calle de adoquines blancos, flores hermosas se hacían ver por todas partes, caminamos por la calle hasta llegar a un enorme portón rojo, creo que sí había una dirección en la cual caminábamos. Esta, supongo

Red suspiró.

Busqué sus ojos, pero no podía encontrarlos, miraban alguna parte en el piso. Me acerqué a él y dio un enorme brinco hacia atrás. Me miró desesperado, hasta encontrar mis ojos y se calmó.

- Lo siento- dijo finalmente- no debí dejar que me siguieras hasta aquí...- se quedó callado y movió ligeramente su cabeza al lado derecho, como si alguien le estuviera diciendo algo en su oído, luego susurro, muy despacio, casi inaudible- Cállate.

- ¿Red?

Pregunté asombrada, en realidad no lo había escuchado pero modulaba tan bien al hablar, que se pudo notar claramente en sus labios un "cállate", y en sus ojos con odio.

Red se limitó a mirarme y no decir nada, más que levantar su ceja derecha, luego abrió sus ojos como platos y me agarró de los hombros,

Lentamente se acercó hasta estar centímetros de mí, y guiñó un ojo.

- No digas nada no apropiado- susurró.

¿Cómo iba a saber qué era apropiado y no?, la actitud de Red comenzaba a asustarme, tocó el timbre, por un momento llegué a pensar que Red quería secuestrarme. Estaba preparada para salir a la fuga cuando se escucha la dulce voz de una mujer, y la puerta de peatones del portón abriéndose.

- ¡Red!, cariño, ¡Cuanto tardaste!- decía la mujer abrazando y besándolo.

- Mamá... No es necesario, no frente a las visitas...- Red trababa de separarse de la que parecía ser su madre.

- Oh- ella lo soltó y me quedó viendo- ¿Quién es esta linda y preciosa jovencita?

- Ella, es Andy, la conocí en el colegio mamá.

- Oh valla. Es normal.

¿A qué va con eso de "normal"?, el tono que la madre de Red había ultimado para decir esas dos palabras me había causado escalofríos, ella se acercó a mí y me besó en ambas mejillas. Luego sonrió alegremente.

- Soy Tannia, la madre de Red. Es un gusto que Red... Conozca gente nueva.

De nuevo con eso del tono extraño.

- Soy Andy- traté de sonreír- Me mudé recién ayer a Norian, y hoy conocí a su hijo en el colegio, ha sido muy amable.

- Cuando es Red, sí, es adorable. ¿Gustas pasar?- ¿Qué acababa de decir?- Mandaré a Wanza a preparar el té- miró su reloj- ya estamos en la hora.