La duquesa y el destripador [SIN CORREGIR]

<LAGRIMAS>

DUQUE STARK
ELIAS STARK BLACK

La manera en cómo  actúa Rose me hace entender que algo no está bien, sus ojos temblorosos mirando hacia abajo con una suma preocupación, el ceño fruncido con angustia y su piel pálida, desde aquí escucho el sonido de su corazón palpitar de una extraña manera, tan solo verla así siento que algo me está irritando o enojando, no sé cómo explicarlo pero es como si quisiera matar al bastardo picaflor, fenómeno desgraciado, perro infiel de mierda en este momento y enterrarlo en un lugar donde su cadaver se pudra y que los gusanos se lo devoren.

Tenso la mandíbula y miro a Rose a los ojos y intento controlar el pensamiento anterior, me acerco y con mis labios beso su frente sintiendo paz, amo besar su frente y sentir su temperatura corporal que siempre es la misma, cálida y tibia, es como si estuviera tomando sus signos vitales tan solo poner mis labios en su frente pero no solo es por eso que amo besarle la frente si no, es por que ella siempre me acepta de esta manera.

Acaricio su cabello y es allí cuando por fin levanta la cabeza y veo sus hermosos y adorables ojos que me hacen sentir tentado de nuevo.

—Mi duque—menciona frunciendo el ceño—tomó  su cabello y lo llevó detrás de sus hombros haciendo más visible su mirada y su rostro, la miro con suma atención mientras ella solo tiene la mirada en mis ojos.

Quiero besarla, tocarla, amarla aunque ella no lo haga, estoy tan obsesionado en su mirada almendrada que me derrite el corazón y me pone duro el miembro, la amo y la deseo tanto.

«Dios..Me volveré mas loco que mi padre por ella »

—Rose..Mi—
«Mi duquesa...» Una mujer que a estado en mi mente durante años, e esperado como un perro pacientemente, e esperado que naciera, creciera y se desarrollará, el día que me informaron que ella había tenido su menarquia sentí que cada vez estaba  mas cerca de mi, no pude contenerme mas, tenía que estar conmigo antes que otro le pusiera las manos en encima, mi plan era que ella se casara conmigo alrededor de los diecinueve años, no a los dieciséis años.

«Pero aun así logre mi cometido, casarme con ella siendo  pura y Virgen.»

Fui el primer hombre que le enseñó la siguiente etapa de ser una mujer, fui el primero en verla nacer, el primero en saber , fui el primero en proclamarla mía, ¡¡mierda ella es Mía!! Joder ella es tuya Elias!

Sostengo el rostro de Rose con ambas manos, tensó la mandíbula mientras tengo la mirada en ella, sus ojos se ponen temblorosos y se muerde el labio mientras escucho los latidos de su corazón que proviene de ella. Me enferma al saber lo que le dijo el hijo de perra de Diker, quiero saber que tanto le lavo el cerebro a mi niña, a mi mujer! Que tonterías le dijo.

—Responde Rose—le ordeno con un tono hostil y enojado— Rose permanece callada y solo me observa frunciendo el ceño como antes, ella se  a quedado muda por completo y eso no es buena señal, el maldito le dijo algo..

—¡Que te dijo!—exclamó furioso sosteniendo su rostro— —¡Que te dijo el hijo de perra ese!—agrego—

Rose da un quejido de dolor y intenta quitar mis manos de su rostro pero sus fuerzas son pequeños empujones para mi. Ahora ella intenta alejarse de mi.

—¡Duque me está lastimando!—grita desesperadamente— no la obedezco y solo la llevo contra mi inclinado su cabeza hacia arriba para verla a los ojos, estoy enojado no por que Rose haya estado a solas con Diker si no, por lo que Diker le haya contado, que le haya contado lo que no quiero  que ella sepa de mi y de los Stark's.

Tensó la mandíbula y frunzo el ceño al mirarle sus ojos llenos de miedo que de repente se vuelven lloroso y lagrimas bajan desde sus ojos hasta su rostro, sus labios tiemblan y también su cuerpo...