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Severus abrió los ojos con pesadez. Miró por la ventana en un inútil intento de distinguir si aún era de noche o ya amaneció, pero lo único que vió fue el Fondo del lago negro. Se había olvidado que su habitación quedaba en las mazmorras.
Esperaba no haberse quedado dormido mucho tiempo y haber perdido clases, no le gustaba no ser conciente del tiempo, así que decidió levantarse para empezar su día.

Cuando hizo el amague de quitarse la sabanas no pudo mover sus brazos, y recién ahí se dió cuenta que se sentía más pesado de lo normal. Abrió sus ojos del todo y miro sobre si mismo, solo para encontrar a un Barty muy cómodo durmiendo sobre él y utilizándolo como almohada.
Severus se sacudió, haciendo que Barty se removiera un poco, y en el mismo impulso lo botó de la cama.

— ¡Ouch!

Fué lo único que dijo el pequeño castaño antes de darse la vuelta sobre el suelo y seguir durmiendo en la posición más incómoda a gusto de Severus, aunque Barty parecería muy cómodo imitando al exorcista mientras dormía.

Severus negó y comenzó a hacerse preguntas en lo que seguía mirando a su amigos tendido en el suelo en lugar de levantarlo.

¿En qué momento se quedó dormido?
¿En qué momento Barty se quedó dormido sobre él?
¿Por qué no se habían ido?
¿Por qué Regulus no los despertó?
¿Por qué solo Barty estaba durmiendo con él?
¿Donde está Regulus?
¡¿DONDE ESTÁ REGULUS?!

Severus inmediatamente comenzó a buscar al joven Black, vió un bulto considerablemente grande en uno los sofás cerca del baño, se bajo de la cama y fué hasta el mueble. Efectivamente Regulus estaba durmiendo ahí arropado con una manta de sabrá Merlin de donde la sacó.

El pequeño parecía un angelito, arropado hasta el cuello, la piel blanca contrarrestaba tan bien con sus rizos negro como plumas de cuervo, los cuales le caían en perfectas cataratas sobre el rostro, como toque final sus labios de un Rosa intenso, pero que a la vez se veían finos y delicados. Sin duda la genética Black podía presumir de muchas cualidades.

"¿Quien diría que se la pasa maldiciendo más que los ebrios de mi barrio?"

Pensó Severus mientras miraba a sus dos amigos, era extraño, nunca había compartido habitación con nadie, menos de una manera tan extraña. Ni siquiera fué planeado.

¿Eso contaba cómo una pijamada?

Decidió dejar de darle importancia, ya que se sentía cansado. Miró el reloj que colgaba de su pared y noto que apenas eran pasadas las 4:00 A.M el desayuno no era hasta las 7:00 A.M y sus clases no empezaban hasta las 9:00 de la mañana. Decidió volver a dormir, pero antes tenía que despertar a Barty para que durmiera en un lugar más cómodo, pues dudaba que se fueran a ir a sus habitaciones a esa hora, además si los atrapaban fuera de sus camas podrían quitarles puntos.

Severus se acercó a Crouch y lo movió con el pie, lo cual no resultó en absoluto, se agachó a su altura y lo sacudió con un poco de brusquedad. Tampoco dió mucho resultados, solo hizó que se removiera un poco y volviera dormir.

"Si no fuera porque ronca y babea mientras duerme pensaría que está muerto"

Severus tomó una almohada y comenzó a golpear a su amigo hasta que este despertó.

— ¡Por Merlin! ¿Qué demonios?

Barty se despertó exaltado y comenzó a frotar sus ojos, para luego tratar de enfocar su vista, la cuál cayó sobre el mayor de los Slytherin.

— Levántate y ve a dormir en un lugar que no sea el suelo u otra superficie dura. — Severus no le dió tiempo a responder. Barty miró a la nada por unos minutos, mientras procesaba las palabras de Severus. Pasado unos largos minutos Barty se levantó del suelo y se dirigió a la cama. — Oh no, no en mi cama.

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⏰ Última actualización: Jan 01 ⏰

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