NUEVE

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LUCÍA

Estamos desayunando y Aida está muy relajada, mientras que la saludaba se quedó más de diez minutos mirando mis ojos hasta que le rocé la mano y despertó como del trance en que estaba. Íbamos hablando de nuestra vida y me iba contando acerca de que su padre la quería comprometer con un príncipe, pero de todos los que se le presentaron ninguno le llamó la atención. Una vez terminamos le digo si le apetece dar una vuelta por la aldea ya que al ser de día es seguro, espero que su respuesta sea la que espero ya que eso significará que el hechizo esta funcionando, con mayor lentitud de la que esperaba pero bueno, hasta que me deshaga del dichoso collar no puedo hacer otra cosa. Su respuesta me alegra ya que todo va según lo planeado por lo que le digo que vayamos a la piscina y así puede dormir un poco si le apetece, ella me dice que le parece mejor eso. Le digo que nos pongamos el bikini y nos vemos abajo. Ella acepta y va a ponérselo.
Cuando bajamos le digo si le doy un masaje a lo que ella acepta así que se acuesta y empiezo a darle un masaje haciendo que se quede dormida. Quiero quitarle el collar pero se me ocurre otra idea...

AIDA

Cuando nos sentamos a desayunar me pregunta si quiero ir hasta la aldea a dar un paseo, no quiero decirle que no pero no digo que estoy cansada por lo que me propone ir a la piscina a lo que acepto más contenta ya que así puedo relajarme. Me voy a poner un bikini que no traje pero que está en el vestidor y bajo a la piscina, me miro en el espejo y veo como el collar brilla pero no se el porqué así que no le doy importancia ya que con la calma que siento no puedo hacer otra cosa. Al llegar veo a Lucía y me fijo en su cuerpo y me quedo observándolo hasta que se acerca y me dice que si quiero un masaje así me relajo. Acepto y en cuanto empieza me quedo dormida.
No se que le pasa a esta casa que no puedo hacer otra cosa que quedarme dormida. Una hora después me despierto y veo como Lucia se está bañándose y del calor que tengo me voy yo también al agua, estamos como una media hora jugando hasta que decidimos cenar ya así porque me muero de hambre. En mi sitio hay una cajita que tiene un collar dentro y Lucía me dice que es un regalo, que si me lo quiero poner. El collar que tengo puesto con el que me regala Lucía es del mismo tamaño y no se que hacer ya que los dos no los quiero llevar, estoy pensándolo y me da por mirar a Lu y veo esos ojos que para mí dan espirales y por mis labios suena la palabra...

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Holaaaa, nuevo capítulo!!! Aida está peligro... Hoy habrá más capítulos tanto de esta como de tradición.
Decidme que os parece que os leooooo!!
Nos vemos🩵

MENTALIDAD DEL AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora