Apuesta ; Jungkook ✔️

Epilogo

5 años después.

Gotas de sudor caían de mi frente. ¡Llevaba toda la mañana haciéndolo! Simplemente no podía más. Bajé de las escaleras y tomé la tina con el líquido color rosa pastel para volver a subir las escaleras.

Introduje en el balde la punta de la brocha haciendo que absorbiera el color para después pintar la pared.

—¡Jungkook! ¡Jungkook! ¡Jungkook! —los gritos de Hana, Baek y Hae. Me asustaron haciéndome soltar la cubeta, esta golpeó en la escalera haciendo que toda la pintura cayera sobre mí. De un salto bajé de la escalera y sin importarme dejar todo un rastro de pintura salí corriendo hasta mi habitación que era de donde provenían los gritos.

—¿Qué? ¿Qué pasa? ¿Te sientes mal? ¡Háblenme! —grité ahora yo desesperado ya que solo me miraban, los tres comenzaron a reír.

—¡Jungkook! Se supone que la pintura va en la pared, no en tus pantalones —los tres carcajearon aun más— ¡Ven! —habló Hana entre risas. Rápido me acerqué y tomó mi mano colocándola en su ahora abultado abdomen.

Un sentimiento inexplicable se desarrolló en mí al sentir los suaves golpecitos. Volteé a verla a los ojos y lo único que pude ver era felicidad.

—Se mueve —dije emocionado. Hana se estremeció.

—Háblale —dijo riendo—. Parece gustarle tu voz — la miré sorprendido.

—¿De verdad? —se sintió otro pequeño golpe, Hana rio.

—¡¿Lo ves?! —dijo con una enorme sonrisa. Jennifer y Jared rieron. Seguro mi cara era de un estúpido de primera.

—H-Hola bebe... —dije con algo de nervios hincándome a un lado de la cama.

—Rose —me corrigió Hana.

—Tu madre asegura que serás niña —seguí—. Cosa que si no es cierta, ella tendrá que repintar tu habitación.

—Creo que de todas formas tendré que repintarlo ya que tu padre prefirió ponerlo en sus pantalones— "Tu padre". Desde que Hermione me había dicho la noticia, simplemente no lo creía.

—Él dice que odia el rosa pero nosotros creemos que es mentira —susurró Hae.

—¡Hey! —le reclamé riendo—. Realmente no me gusta. Yo creo que deberíamos pintarlo mejor de azul o verde.

—Morado o Verde —dijo Baek eligiendo colores más neutros.

—Hey basta —dijo Hana frunciendo el ceño—. Rose amará el rosa tanto como su madre y su tía ¿Cierto?

—¡Cierto! —contestó alegremente Hae.

—Además ya habrá tiempo de pintar uno morado, uno azul, uno verde y otros cuantos rosas —realmente esta mujer me mataría haciéndome pintar habitaciones—. Pero ahora... ¿Por qué no mejor cambiamos de tema y vamos por un helado de vainilla con chocolate?

—¡Sí! —se le unieron Hae y Baek.

—Ahora no podemos —con la simple mirada me dijo ¿Por qué?—. Tengo que terminar de pintar la habitación y mira como estoy.

—¿De verdad nos dejarás a los cuatro con las ganas?

—Tratas de manipularme a costa de... Rose.

—¿Jungkook nos dejarás con las ganas? —preguntó levantando la ceja. No me convenía en lo absoluto no cumplirle sus caprichos.

—Vamos ya —me puse de pie y Baen y Hae salieron corriendo hacia sus habitaciones para cambiarse.

Me di la media vuelta y me saqué la playera para cambiarme. Estaba frente al armario cuando sentí las manos de Hana en mi abdomen. Me giré para poder verla de frente y más que nada para poder tener mejor acceso a sus labios.

—No tienes idea de cuan feliz me haces —uní nuestras frentes.

—¿Aunque te haga pintar paredes? —preguntó riendo.

—Aunque me hagas pintar paredes — afirmé—. Pero una cosa si te digo —me separé un poco de ella—. Ningún chico se le acerca a mi Rose hasta que ella cumpla los 26 —los ojos de Hana se abrieron como platos.

—¡Estás loco! —dijo riendo.

—No —le sonreí—. Tendrá las mismas reglas que Hae... acerca de los novios.

—Bueno ya... una apenas tiene nieve años y la otra solo tiene casi cuatro meses... ya habrá tiempo para discutir sobre eso... ahora queremos helado.

Hana

Sí. Esta es la historia...nuestra historia. El chico "rudo" que se enamora de la chica más superficial y menos compatible con él.

Hace algunos años, no me hubiera imaginado que yo, Jung Hana, me enamorara de Jeon Jungkook. Eso me hubiera sonado imposible, pero dicen que los opuestos se atraen y creo que nosotros somos el claro ejemplo.

Ahora todo es diferente cuando estoy con él. Tal vez no sea el hombre perfecto, pero para mí lo es. El Jungkook "rudo" y "amargado" como yo solía decirle, ya no está más. Ahora todo ha cambiado y descubrí que dentro de él hay una persona con los más puros y hermosos sentimientos. Que sabe amar y que con un solo abrazo puedes sentirte tan protegida, y con un beso sentir que el mundo se detiene a contemplar.

Se podría decir que el destino me jugó la peor jugada - que después se convirtió en una bendición - al terminar enamorándome del chico de mi "apuesta". Pero yo no creo en el destino, tampoco en las coincidencias... creo que hay algo aun más fuerte que nos unió.

Este no es el final de nuestra historia...es solo el comienzo.