CAPITULO 36

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Baji había cumplido con su promesa.

Dejo Tokyo Gang y se unió al grupo de Takemichi.

Aquel grupo poco a poco iba creciendo, entre ellos miembros antiguos de la Toman.

Pero faltaba alguien más.

Alguien que no se unió.

Después de tocar el timbre una pequeña niña abrió la puerta, su mirada se ilumino al reconocer a Yumi.

--Luna, ¿Que tal han estado? ¿Está Mitsuya en casa?

La sonrisa de la chica lentamente decayó.

--solo ha salido cuando ese chico rubio vino, se animó un poco, pero sigue encerrado desde entonces.

--el rubio que vino es mi hermano-- indico ella para tranquilizarla-- ¿Puedo pasar? Quiero hablar con el.

La pequeña se hizo a un lado permitiéndole entrar.

No era la primera vez que iba a esa casa, para ella en los últimos años se había convertido como en su santuario de paz, era su lugar de calma.

Y aún así se sentía tan nerviosa de ver a Mitsuya, después de todo lo que había pasado.

--hermano, Yumi vino a verte-- expreso Luna una vez que abrió la puerta de su habitación.

Mitsuya se veía demacrado, la barba que normalmente siempre mantenía a ras estaba a medio crecer, toda la habitación estaba desordenada y un montón de papeles apilados en la papelera decoraban el cuarto.

--ah, eres tu Yumi-- apenas y levanto la mirada antes de volver al boceto.

Luna salió de allí para dejarlos solos, Yumi camino hacia el.

--no estás comiendo bien, ¿Verdad?

El siguió en su trabajo, estaba concentrado en ello.

--debo terminar para el concurso...

--Michi-kun me lo dijo, la promesa que le hiciste a Draken y el porque no te había unido a ellos...

El lápiz se detuvo, el chico se quedó contemplando el boceto a medio hacer.

--deberias estar con ellos.

--lo se, pero no puedo dejar que hagas esto solo-- indico ella con determinacion.

Recordaba estar así de deprimida cuando terminó con Mikey, cuando Toman se disolvió, se sintió tan vacía... Y Mitsuya estuvo allí para ella, le ayudo a continuar dibujando, a aceptar que era el arte aquello que quería de profesión...

No podía darle la espalda ahora.

--no creo que...

La chica tomo el boceto y con clara determinación borro la parte delantera.

--no puedes creer que vas a ser el mejor en el concurso sin tu artista general? -- ella le sonrio-- eres pésimo dibujando y lo sabes.

Una ligera sonrisa se asomo en los labios del chico.

--que haría sin ti?

((...))

Fue una semana complicada, no había dormido casi nada, había ayudado a Mitsuya en todos los bocetos base que había tenido, la mayoría se corrigieron desde cero, a Mitsuya no se le daba muy bien el dibujo.

--¡Presidente! ¡Traje los materiales que necesitabas!-- grito una de las chicas que vinieron a apoyar a Mitsuya.

-- re dije que dejaras de decirme así, Yasuda-san-- expreso el chico concentrado en uno de los vestidos.

AMANECER-- MANJIRO SANODonde viven las historias. Descúbrelo ahora