It wasn't me

El vecino

¿Que se supone que estoy haciendo?
Las mudanzas son para buscar oportunidades, nueva vida, trabajo...amor.
No, no me mudo por amor, claro que no, es porque en la ciudad es más fácil conseguir un trabajo aunque casualmente sea la misma ciudad donde vive.

Me desconozco cuando tomo decisiones por impulso, solo estaba mirando una película cuando simplemente decidí empacar mis cosas, rentar un cuarto en una zona decente en la ciudad y nada de esto estaba influenciado porque necesitaba saber si lo que había vivido con él era amor, si íbamos a...estar juntos.
Maldita sea, me enculo más rápido que las princesas Disney.

Colgué las ultimas prendas de ropa de una caja para darme cuenta que todo mi cuarto era un desorden, menos mal estaba en el último cuarto del último piso, tenía acceso directo a una pequeña terraza, prefiero llamarle así a azotea donde todo el mundo cuelga su ropa. Era lo mejor que podía pagar en lo que encontraba trabajo.
Me recosté en la cama y me cuestioné si realmente estaba haciendo lo correcto, vine aquí sin promesas ni ataduras, solo sabía una cosa y era que me amaba. Creo que no sabe que lo escuche la última vez que estuvimos juntos cuando fingí dormir, no entiendo aún porque se fue sin despedirse cuando me confesó su amor aunque fuera en privado.
Sonreí al recordarlo, vale la pena luchar por lo que comenzó entre nosotros.

1 mes, 1 MALDITO MES Y NO CONSIGO TRABAJO.
Sabía que iba a ser difícil pero esto de verdad que me está matando, logro pasar el primer filtro para pasar a la entrevista y por alguna razón nunca terminan llamándome. Mi cuerpo estaba sucumbiendo a las 3 C's cochino, cansado y caliente, caminar tanto por gran parte del día en verdad me tenía acabado y no ayudaba cuando comencé a stalkear sus redes sociales por las noches.
Sabía por donde se movía, memorice los lugares, las calles, incluso sus amigos, me sorprende bastante que sea el mas reservado pero a la vez era el más fácil de encontrar.

Antes de darme cuenta comencé a pasar casualmente por su trabajo para ver si me veía por casualidad, sin resultados.
Comencé a visitar una cafetería que estaba justo entre mi casa y la empresa, al parecer iba ahí bastante seguido, sin resultados.
Incluso caminaba por algunas calles que visitaba según sus fotos, sin resultados.

Me estaba cansando, era difícil seguirle el rastro, parecía una sombra, ni siquiera parece que le dé la luz del día. Decidí despejarme en el café de siempre, aún tenía algo de dinero pero temía que se me acabara, antes de que pudiera terminar mi capuchino escuché su nombre.

- No Jake, anoche no fue lo que esperaba -

Me congele, ¿estaría hablando de Jake?
¿Mi Jake? ¿Al que le entregue todo el amor que tenia?
Decidí prestar más atención de lo usual.

- Igual no debería, se acerca mi aniversario, tú en cambio ¿Que tal te fue? - hizo una pausa, no hay nada que me indique sea el mío. Escuché como reía. - Estoy sorprendido, jamás hubiera pensado que tu, Shim, tendrías más sexo que yo en una semana, ¿Jay te tiene estresado con su agenda?.

¿Que?
Shim...Jake, ¿Shim Jake?
Pero, no debía, no podía ser, no tenia que ser él.

- Si Jay pregunta estoy en la oficina, solo vine por un café y no esa clase de café. El reporte está listo de todas formas. - dijo antes de levantarse de su asiento. Voltee para asegurarme, ver quien era el que hablaba sobre Jake.

Ay no, pensé, es Heeseung.

No se que era peor, toparme con Heeseung o escucharlo decir que Jake estaba bien...demasiado bien, sin mi.
Tal parece que era demasiado bueno para ser cierto, demasiado bueno para mi. Deje mi café así como estaba junto con la cuenta exacta del capuchino con propina y me levanté, necesitaba pensar, aclarar todo esto.
¡Que estupido soy!
Venir aquí, sin decirle a nadie porque creía en el amor, puedo imaginar a mi mejor amiga diciéndome que no me encule tan rapido, que debía tomármelo lento y con calmar. Tenía razón.