Epílogo

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11 de octubre.

Probablemente no había estado en una fiesta en mucho tiempo; al menos no desde la fiesta de Halloween del año pasado y aquí estaba hoy, vestido de blue gold sin mangas. Tenía un hermoso par de botas brillantes que combinaban y mi cabello estaba con simples ondas.

Debía admitirlo, me veía malditamente caliente.

Hoy era mi cumpleaños. Vicc estaba actuando como si se le hubiera olvidado por completo. Me llamó desde el trabajo y cuando pensé que me iba a felicitar, dijo que estaba llamando para preguntarme si estaba preparando su cena favorita esta noche.

Le había colgado a mitad de la frase. ¿Se había olvidado de todos los pasteles de tres pisos que horneé para ella? ¿Se había olvidado de lo lejos que siempre iba a llamar a sus amigos y organizar su fiesta de cumpleaños? ¿Qué tal los volúmenes de edición especial de los estúpidos cómics que le regalé todo el tiempo?

Y cuando se trataba de desearle a su hermano el día de su cumpleaños, se había olvidado.

Traté de decirme que todo era un pequeño acto para que pudiera sorprenderme más tarde esa noche, pero a medida que avanzaban las horas, comencé a preguntarme si la fiesta solo iba a ocurrir en mi cabeza.

Me senté solo en el bar, vistiendo mi mejor ropa y luciendo como un hombre que había sido plantado por su novio.

¿Qué tan patética era mi vida en este momento?

Roy me había llamado esa tarde, pensé que sabía lo de mi cumpleaños y que quería felicitarme, pero en cambio había dicho que quería verme esta noche y hablar sobre algo.

Entonces, en lugar de venir vestido de casual, terminé usando mi ropa de cumpleaños. Tal vez estaba buscando cumplidos, tal vez quería que dijera "Oh, te ves encantador, ¿cuál es la ocasión especial?" y luego decía: "¿Perdón?, hoy es mi cumpleaños" Y luego respondería: "Oh, feliz cumpleaños, Iván. Ya que está todo arreglado, celebremos"

Ugh.

Sí lo sé.

Patético, incluso no era la palabra adecuada para mí en este momento, más como desesperado. Incluso estaba listo para celebrar mi cumpleaños con el hermano de mi ex novio.

Lo llamo ex novio porque no he sabido nada de Rodrigo desde hace unos seis meses. No había tratado de ponerse en contacto conmigo, nunca escribió una carta y nunca le pasó ninguna otra carta a Roy que me dijera que había terminado las cosas.

Rodrigo era inteligente.

Había optado por no enfrentar las cosas.

Ese cobarde.

Es cierto que me pidió que esperara, pero ¿puede una persona esperar seis meses sin saber dónde se encontraba?

Había sido duro.

Esas noches frías, acostado allí solo en la cama, pensando en lo que podría haber sido la vida si Rodrigo todavía estuviera cerca y luego llorando en la chaqueta que le pertenecía y todavía olía a él.

Incluso Vicc me daba miradas lamentables de vez en cuando.

Y estaban estos pensamientos que seguían corriendo por mi mente.

¿Y si Rodrigo hubiera cambiado de opinión sobre mí? Tal vez pensó que no era lo suficientemente bueno, tal vez conoció a alguien (ese pensamiento en particular siempre me hizo llorar), la mera idea de que otra persona tuviera sus manos sobre él me hacía querer apuñalar a alguien.

Rodrigo había salido de mi liga, así que debería admitir que había tenido una aventura con el chico malo, el más peligroso y humeante y que de alguna manera no funcionó. En el fondo, sabía que no encontraría a alguien como él, porque siempre compararía a cada persona con Rodrigo.

𝗠𝗘𝗡𝗧𝗔𝗟 𝗔𝗦𝗬𝗟𝗨𝗠 (𝗿𝗼𝗱𝗿𝗶𝘃𝗮𝗻)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora