Dulce Tentación || Madelaine Petsch

Capítulo 19

10 de diciembre

Pov Jude
Salgo de la cárcel justo hoy. Un taxi me espera fuera de prisión y le pido amablemente al conductor de que me lleve al hospital. Me dieron todas mis pertenencias y enciendo mi móvil, no tenía nada interesante, así que decidí apagarlo para no malgastar batería innecesaria.

El taxi me deja frente al hospital y le pago al taxista todo el trayecto. Solo llevo un bolso de mano y entro en el hospital. A lo lejos vi al doctor que llevaba el seguimiento, no dudo ni un segundo en ir casi corriendo hacia él.

Jude.- doctor Steve— se gira—.

Dr. Steve.- Jude, ¿qué haces aquí?

Jude.- tuve que viajar a Colombia— mentí— ¿sabes sí mi padre...?— carraspea—.

Dr. Steve.- lo siento, pensé que su novia lo llamaría para avisarle que ella vino.

Jude.- no he podido hablar con nadie.

Dr. Steve.- siento la pérdida, Jude, quisimos hacer todo lo posible, pero no sobrevivió.

Jude.- entiendo, no se preocupe... yo sabía que él no podía resistir al cáncer. ¿Cuándo fue?

Dr. Steve.- el ocho de abril.

Jude.- vale...

Dr. Steve.- lo siento mucho, Jude, le acompaño en el sentimiento— aprieto su brazo— discúlpame, pero debo seguir con el trabajo.

Jude.- claro, no se preocupe.

Se va y suspiro hondo. Tendría que ir a casa de Madelaine a por las cenizas de mi padre. No pude despedirme de él. Soy un imbécil.

Quise ir andando hasta la casa de Mads, no me importaba la distancia, necesitaba que el viento golpease mi rostro. Solo iría a por las cenizas y ya me iría a casa de mi padre para comenzar a guardar todo y limpiarla.

Estoy frente a la casa de Mads, toco el timbre e intento desaparecer el nudo que se forma en mi garganta y carraspeo. Espero unos segundos, hasta que ella abre y se queda paralizada.

Jude.- hola.

Madelaine.- Jude... hola, ¿quieres pasar?

Jude.- solo vine a por las cenizas de mi padre.

Madelaine.- oh, entiendo.

Un olor a sopa inunda mis orificios y mi estómago ruge, eso no pasa desapercibido por Mads y me mira con una sonrisa ladina.

Madelaine.- quédate a almorzar, creo que debemos hablar y, te prometo, que después puedes irte a tu casa a descansar.

Jude.- está bien... gracias, Madelaine.

Olive salta para llamar mi atención y me agacho un poco para acariciarla.

Madelaine.- ¿quieres ver las cenizas?

Jude.- por favor, te lo agradecería.

Camina delante de mí y yo voy tras ella. En un mueble del salón tiene el jarrón. Suelto mi equipaje en el suelo y tengo la urna entre mis manos. Mi padre está ahí dentro.

Jude.- hola, papá, cuánto tiempo— sorbo mi nariz— siento... siento no haberme podido despedir de ti. Estaba involucrado en carreras ilegales para poder pagar tu tratamiento, lo siento, sé que no querías que me metiese en cosas ilegales, pero no encontraba trabajo. He estado un año en la cárcel y tenía esperanza de que aún siguieras vivo cuando saliese, pero el destino no lo ha querido así y ahora le tengo que hablar a una maldita urna que lleva tus cenizas dentro. Sé que arriba tú y Nate me estaréis cuidando y, sobre todo, protegiendo. Pronto volveremos a estar los tres reunidos, por favor, dile a Nate que lo quiero muchísimo y que siempre lo recuerdo cada noche. Os deseo lo mejor allí arriba, un beso, mi capitán. Te quiere tu canijo, nunca os olvidaré.