12. 🖤

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Su mente era un caos, después de que Miwa dejara su habitación salió a tomar un poco de aire, bajó hasta la sala y desde ahí vio a Nanami cerca de la orilla del lago, él salió y caminó hasta estar cerca del rubio quien solo suspiró.

—¿Cómo te sientes? — inquirió.

— Bien, creo — murmuró.

— Sabes que no me gusta andar con rodeos así que iré directo al grano — suspiró — Esta mañana vi a Miwa salir de tu habitación, tú, ¿Tienes una relación con ella? —inquirió con seriedad.

La pregunta lo descolocó por unos segundos, pero recobró la compostura —No — respondió con seriedad — Pero siendo honesto, no recuerdo nada de lo que paso anoche, mi rut llegó de manera repentina y temo que la ataqué — confesó avergonzado.

Nuevamente suspiró antes de responder — OK, entiendo tu posición, sería hipócrita de mi parte no entenderlo al final ambos somos alfas y en algún momento eso nos juega en contra, y si tu estas tienes la sospecha de que actuaste de manera agresiva con Miwa durante tu rut creo que deberían llegar a un acuerdo de como quieren arreglar la situación — sugirió serio.

Las palabras de Kento lo dejaron pensativo durante unos segundos, luego resopló frustrado — ¿Tú crees que deba iniciar una relación con ella? —inquirió y vio a su amigo sonreir levemente.

— No se que fue lo que te llevo hasta eso, pero creo que si tu o ella no tienen ese tipo de sentimientos es algo inútil el empezar una relación — contesto con simpleza — Basta con aclarar lo sucedido, Miwa lo entenderá, pero es algo que los dos deben hablar tranquilamente, así que esta noche podrán hacerlo ya que yo saldré con Toji a tomar una copa — informó; al escuchar el nombre de Toji no pudo evitar que su rostro reflejara la molestia qué le producía el saber de él.
— ¿Ocurre algo? — preguntó ante su actitud.

— No, no ocurre nada y gracias por el consejo, quiero dejar todo claro antes de regresar a Los Angeles, no quiero que Miwa quede con una mala imagen de mi — suspiró — aunque creo que eso será inevitable — murmuró.

— Tranquilo, solo debes ser honesto con ella y así no habrán malos entendidos, puede que Miwa aun sea muy joven, pero es muy madura así que solo es cuestión que aclaren todo — sonrió.

— Gracias por el consejo Nanami — murmuró cruzandoce de brazos.

Ambos siguieron hablando durante un buen rato, luego el almuerzo se sirvió y los tres se sentaron a la mesa y a él le pareció extraño que el rubio no mencionara a Suguru en durante la conversación, pero tampoco quería ser él quien lo trajera a la platica, así que decidió pasarlo por alto; la tarde fue bastante aburrida, se la pasó en su habitación, quería evitar lo más que pudiera el toparse con Miwa, aún no sabía cómo iniciar la conversación; la noche había llegado y él recostado en la cama no lograba conciliar el sueño así que después de pensarlo mucho decidió salir y de una vez ponerle fin a todo, salió de la habitación y justo cuando bajó a la sala vio a Nanami salir y a Miwa despidiendolo, él fue directamente a hacia uno de los sillones y tomó asiento, Miwa se acercó con una sonrisa iluminando su rostro.

— Miwa creo que es necesario que hablemos de lo sucedido anoche — dijó con seriedad.

— Si claro, yo también lo había pensado y me gustaría saber ¿Qué es lo que somos ahora? — inquirió nerviosa.

Su cuerpo se tensó ante la pregunta y no pudo responder.

— Satoru, creí que después de todo lo que pasó anoche tu y yo... — murmuró y sus lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas — Satoru no tienes idea de como me sentí — lloró y él solo atinó a abrazarla.

— Tranquila, no te dejaré sola, por favor perdoname de verdad no recuerdo absolutamente nada de lo ocurrido, pero estoy seguro de que la pasaste muy mal — lamentó y la abrazó más fuerte, no tenía más opción que responder como debía.

— Gracias Satoru, prometo que daré lo mejor de mí para que esto funcione y no te arrepientas de estar conmigo — habló y se separó un poco para limpiar sus lágrimas luego le dio un beso.

— No tienes que presionarte tanto, te prometí estar contigo y lo cumpliré — habló con seriedad, y sintió como si un nudo se formara en su garganta.

— Gracias Satoru — murmuró, luego se puso de pie — Iré a empacar para regresar contigo a Los Angeles — dijo antes de subir las escaleras con rapidez.

Él se inclino hacia adelante apoyando sus codos sobre sus rodillas y cubriendo su rostro con sus manos, no entendía como de un momento a otro su vida había dado un giro tan inesperado, pero no tenía otra opción que responder como era debido, no supo cuanto tiempo se quedó en la sala perdido en sus pensamientos, pero el sonido de la puerta llamo su atención al girar vio a Nanami entrar a la casa, el rubio se acercó.

— ¿Todo bien? — inquirió serio.

— Sí, todo está como debe estar, mañana viajaré con Miwa a Los Angeles — informó poniéndose de pie y se encaminó a las escaleras desapareciendo así de la vista del rubio.

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Despues de haber descansando durante todo un día su cuerpo se encontraba completame recuperado solo tenia unas leves marcas de besos, pero ya no eran tan notorias, aún no sabía cómo reaccionaria al ver a Satoru al siguiente día, había decidido hablar con él para que deshiciera la marca, aunque eso le costará el puesto como su asistente y la oportunidad de estar cerca de él, sabía perfectamente que no podía forzar sentimientos así que tampoco llegaría hasta eso; el día paso bastante rápido y Riko había dicho que saldría con Yu así que él estaba completame solo, decidió cenar un sándwich y luego se fue directo a su cama, sabía que el siguiente día sería complicado.

La mañana llegó, se levantó en cuanto su alarma sonó, tomo un baño y buscó en su closet ropa que le cubriera lasarcas qué aun eran visibles para otras personas, encontró un suéter negro cuello alto el cuál era perfecto, también porque el clima había cambiado y el frío era demasiado y así encontró más ropa que le serviría, se vistió con rapidez, arreglo su cabello en una media coleta dejando una parte de su cabello suelto sobre sus hombros, salió de su habitación y vio a Riko quien estaba hablando por teléfono, no quiso interrumpirla así que solo se despidió dándole un beso en la frente; llegó a la empresa y subió con rapidez y empezó a acomodar su escritorio, vio a Utahime salir de la oficina de Satoru, ella le sonrió y justo cuando se puso de pie para saludarla las puertas del ascensor se abrieron y la sorpresa fue grande cuando vieron a Satoru salir con una muy pegajosa Miwa colgada de su brazo.

Holi...
Perdón por la tardanza, pero volví a caer enferma, esta vez no es nada grave solo una simple gripe, pero soy chillona jsjsjjs.

Espero les guste.

Besitos ❤️

Lier  (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora