12; movie.

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Nicole

No pude dormir en toda la noche pensando en lo que ocurrió ayer y en cuanto tiempo tardaré acá.

Esta vez no habia salida, si me tiraba por la ventana que tenía cerca lo más probable es que me muera.

Me levante y fuí al baño que estaba allí, había un cepillo de dientes; dentrifico o simplemente pasta de dientes; un jabón.

Fruncí mi ceño al ver eso, luego vi en la ducha y estaban todas las cosas de higiene personal.

Al menos no voy a andar descuidada.

Lave mis dientes y me metí a ducharme. Sentí un gran alivio al sentir el agua caliente recorrer mi cuerpo, dibujé una carita feliz en el vidrio de la ducha que estaba empañado debido al vapor que había.

Salí de la ducha y dude mucho en si usar la misma ropa que llevaba desde que llegué hasta aca, esta toda transpirada y sucia así que la deje ahí.

Me acosté boca arriba en la cama pensando un rato hasta que recordé que estoy en bolas.

Saqué mi toalla de la cabeza y gire el picaporte de la puerta logrando salir, había una grande mansión.

Parece no haber nadie debido al silencio o bueno eso creía, caminé un poco y había una habitación con la puerta entreabierta, escuché la cama rechinar al igual que gemidos por lo que fruncí la nariz con asco y di unos pasos atrás tropezandome con una mesita ratonera.

Puta madre.

Fingi demencia y corrí hasta donde me encontraba anteriormente.

(...)

Luego de estar unos 5 minutos con frío Mateo entró a la habitación de golpe.

—— Te estaba buscando... La estabas pasando bastante bien me parece. — bromeé seguido a una risita que intenté ocultar.

—— Vos también la pasaste bien mirando. — abrí mis ojos de par en par y juro que estoy más blanca de lo normal.

—— No vi, solo escuché y me fui a la mierda. — hable obvia. — Dame ropa, me estoy cagando de frío.

—— Voy. — salió de la habitación y llegó con ropa interior, una remera oversize, unos calcetines y una bermuda.

—— Decime por favor que esa tanga no es usada porque te juro que no la toco. — digo respirando en alto esperando que no lo sea.

—— Es nueva, boluda. — tiró unos chocolates y pochoclos a la cama y saco de su bolsillo el control de la televisión que todo este tiempo estuvo apagada.

—— ¿Y eso?

—— Vamos a ver películas. — dijo sacandose las zapatillas y acostándose en la cama.

Fruncí el ceño pensando que me esta jodiendo y fui a cambiarme.

—-— ¿Por qué haces esto? — pregunté ya cambiada sentandome como indiecito a su lado.

—— Pintó.

—— ¿Por qué lo mataste? — digo refiriéndome a Lucas.

—— Pareces una nena diciendo tanto "por que" — rodé los ojos. — No quiero violadores en mi gente.

—— ¿Vos no...?

—— Ni lo penses, soy incapaz de tocar a una mina sin su consentimiento, y el no era la primera vez que lo hacía.

—— Me hizo pasarla mal, pero supongo que se debe estar pudriendo en el infierno. — dije sonriendo alegre y él tomó el control remoto. — ¿Qué vas a poner?

Se encogió de hombros.—— Lo que sea.

—— ¿Por qué haces esto? — pregunté nuevamente.

—— ¿Sincero? — respondí afirmando con un sonido en mi boca. — Las personas merecen ser felices antes de morir. — dice y mi cara quedó como si hubiese visto a un fantasma. — Es jodiendo, estaba aburrido y pensé ¿Por qué no?

𝙈𝘼𝙇𝘼 𝙑𝙄𝘿𝘼; truenoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora