༄❀365 𝘿𝙄𝘼𝙎 𝙋𝘼𝙍𝘼 𝙀𝙇 𝘿𝙄𝘼 𝘿𝙀 𝙈𝙄 𝙈𝙐𝙀𝙍𝙏𝙀❀༄ ᶜᵒᵘⁿᵗʳʸʰᵘᵐᵃⁿˢ

~junio~

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Día uno.

Vamos, era un nuevo día, un nuevo mes y... ¿Nuevas oportunidades?

Repitió en su mente el estadounidense, estando confundido con la vida, sin embargo estando satisfecho con lo que tenía. Creía que debía de mejorar su salud mental, física y hacer lazos con los demás.

Se había propuesto algo, y era quitarle un peso de encima a nada más ni nada menos que a...

México.

¿Que difícil estando en su lugar, no?

Y un contra de Estados Unidos, que era una persona suuuper orgullosa, sí, con triple "u". Y si se proponía algo, debía cumplirlo le cueste o no la vida entera.

Lo que sabía, era que tenía un perro llamado "Paco", muy querido para el mexicano y que si se pudiera le compraría licencia, identidad y muchas cosas más.

Y un día en el que le tocaba consentir a Paco, en su agenda marcaba un día muy importante para el latino; una junta de toda Latinoamérica, donde tomarían hasta más no poder. Pero el punto era que México traería las bebidas, y como siempre, "él es el alma de la fiesta" y no podría faltar.

Paco, un pequeño chihuahua con un nivel de peligro bastante alto, mordida venenosa y rapidez inimaginable, ¿podrá con el pobre americano asustadizo y tonto?

Quien sabe, quizá y Estados Unidos podría domar al perrito, o viceversa.

Y ahí estaba el pobre USA... haciéndole un favor a México, poniéndose la soga en el cuello el mismo.

—Por favor México, juro que no te voy a decepcionar para nada. Confía en mi.- puso sus dos manos en los hombros ajenos, afuera de la casa del mexica.

De reojo vio al tierno chihuahua de ojos grandes, parecía amenazarlo a muerte... Que miedo.

— Ay, ajá gringo. Todas las veces que confíe en ti terminaste decepcionándome, no es no.- lo apartó bruscamente de su camino, con grandes bolsas cargando dirigiéndose a su camioneta.

— ¡POR FAVOR!- y... empezó a hacer un berrinche en el piso.

El mexicano que estaba apunto de subirse a su coche, lo miró incrédulo y con un poco de burla; "¿Que le pasaba?".

"¿Acaso quiere matar a mi perro y por eso está tan insistente? ¡Ni loca lo voy a dejar con mi preciado Paco!"

Pero al ver el gran espectáculo que estaba haciendo frente a sus ojos, se puso bastante rojo y bajo rápidamente del auto.

—¿Qué vergas haces en el piso? ¡Levántate!- dijo con pena, ¿Que dirían sus vecinos?

— ¡Pues déjame cuidar de Paco!-

— ¡Ok, esta bien! Pero deja de actuar como un puto niño y levántate. ¿¡Qué van a pensar los vecinos!? ¿Que tengo a alguien recién salido del manicomio?- lo tomó de la camisa arrastrándolo hasta la puerta principal, aventándole las llaves de la casa en la cara.

— ¡Auch!-

— ¡Ni te quejes pendejo, tu quisiste asumir esta responsabilidad! Y si te muerde tú solito irás al médico.- finalmente le cerró la puerta fuertemente, seguido un grito diciendo; "¡Al carajo!".

Estados Unidos se quedó ido, asimilando todo lo que acaba de pasar en tan poco tiempo. Pestañeó un par de veces y miró a su lado izquierdo... Ahí estaba esa gran bestia, con la correa en su boca.