Addie y Bella regresan juntas en el autobús desde el hotel a la academia. El interior del autobús está cálido gracias a la calefacción, y ambas chicas se sientan con las piernas sobre el asiento. Bella suavemente acaricia el dorso de la mano de Addie con su pulgar, creando un vínculo cercano entre ellas.
Addie levanta su rostro hacia Bella, y sus ojos se encuentran en un momento de conexión especial. Bella le regala una sonrisa cariñosa y deposita un dulce beso en la frente de Addie.
—¿Cómo te sientes? ¿Te divertiste? —pregunta Bella, asegurándose de que Addie esté cómoda y bien después de su tiempo juntas.
Addie asiente con una sonrisa sincera en los labios.—Gracias, y de nuevo, perdón por... —comienza a disculparse, pero Bella interrumpe gentilmente poniendo su mano sobre los labios de Addie.
—Ya te dije que no tienes que pedir perdón —le reitera Bella, queriendo que Addie se sienta cómoda y sin cargas emocionales innecesarias—. ¿Quieres quedarte en mi cuarto esta noche?
Addie considera la oferta por un momento antes de responder.—Tal vez, pero primero quiero ir al dormitorio de Alice. Debo hablar con ella sobre... una tarea —le responde, disfrazando su verdadera intención de hablar con Alice sobre otro asunto importante que está en su mente.
El autobús se detiene en su parada designada, y tanto Addie como Bella descienden del vehículo, expresando su agradecimiento al conductor. Bella le dice a Addie antes de separarse:
