Heroes Assamble!

Capítulo 86 : ¿Es ella digna?

Uno, dos, tres, cuatro cinco seis, siete, ocho... y ella misma hizo nueve.

Molly Weasley asintió al número antes de comenzar a empujar al grupo hacia un lado, lejos del Traslador. Puede que solo hubiera un niño en el grupo, y él ni siquiera uno de su prole, pero eso no le impidió ser madre de todos ellos.

Incluso Arthur necesitaba que lo cuidaran y George, a pesar de la presencia de Angelina, sabía exactamente cómo podría ser él en una nueva situación: como un escarbato en una joyería. Andrómeda era la única a la que no necesitaba vigilar y eso se debía a que la otra mujer era mayor que Molly.  

"Estoy pensando que debería llamar a mamá", dijo Hannah. "Sólo una llamada rápida para asegurarnos de que los niños estén bien".

"Se han quedado en casa de tus padres muchas veces", dijo su esposo, Neville, rodeándole la cintura con un brazo. "Además, sólo los hemos visto hace media hora. Están bien."

"¡Por ​​aquí, tropas!" Arturo llamó. "Necesitamos declararnos".

Molly se puso deliberadamente al final de la fila, justo detrás de Ron. Estirando la cabeza entre los demás, observó cómo Arthur le entregaba el trozo de cuerda al funcionario y comenzaba a pasarlos por la aduana.

"¿Nombre?"

"Arturo Weasley."

"¿Propósito de la visita a Estados Unidos?"

"Visitar a un amigo y ver los lugares de interés."

"Turista, entonces. ¿Duración de la estancia?"

"Una semana, desafortunadamente no puedo tomar más tiempo libre que eso".

"Muy bien. Si coloca la punta de su varita en esta caja por solo un segundo y lanza un lumos ... muy bien, señor, ahora tenemos su firma mágica registrada. Este folleto detalla dónde puede encontrar enclaves mágicos dentro de Estados Unidos y las leyes mágicas de la tierra. Disfruta tu estancia. ¡Próximo!"

Arthur se hizo a un lado y la fila avanzó arrastrando los pies. En un tiempo sorprendentemente corto, los nueve habían pasado por la aduana y estaban reunidos cerca de la salida.

"¿Hacia dónde ahora? ¿Cómo saldremos de este lugar? —Preguntó Molly. "Es una pena que la casa de Harry no tenga un FLOO como el Caldero ".

"Vamos, te lo mostraré", anunció el joven Teddy. "He estado en Nueva York un par de veces".

Molly abrió la boca para protestar, en realidad, ante la idea de que un grupo de adultos siguiera las instrucciones de un niño, pero sintió una mano tocar su brazo.

"Sé cómo te sientes, pero es mejor seguir su ejemplo", dijo Andrómeda en voz baja. "Él conoce esta ciudad mejor que cualquiera de nosotros".

Observó cómo Teddy caminaba con confianza a través del arco mágico y desaparecía ante sus ojos. Después de que ella también pasó, Molly descubrió que estaban en un lugar de avión muggle, al menos, eso es lo que ella pensaba, considerando las gigantescas construcciones de metal que podía ver a través de la gran pared de vidrio. Arthur, como era de esperar, estaba presionado contra dicho cristal, sin parpadear ante la vista.