Dos corazones pero un latido

20. Gabriel

Esto no puede estar pasando, esto es solo una pesadilla, pero que digo ojalá fuera una pesadilla.

El amor de mi vida se estaba marchando y me había dejado bien claro que lo nuestro se había terminado. Había sido un cabrón un autentico cabrón, la tenía destrozada es más después de eso no creo que vuelva a mi o eso ella se pensaba.

A la mañana siguiente me desperté fatal, me dolía todo el cuerpo y tenía muchas ganas de morirme. Cogí el móvil y miré que Cris había subido una historia en el parque de atracciones y por lo que veía estaba mejor que nunca.

Bajé a desayunar y me encontré a mi amigo que me estaba haciendo el desayuno.

-Bro no tenías porque hacerme el desayuno.

-Ya pero me apetecía asique te aguantas y te lo comes.

Estuvimos hablando mientras veíamos las noticias y hablábamos de nuestras cosas.

-¿Qué tal estas hoy?- me preguntó.

-Con ganas de morirme.

-Por eso hoy nos vamos de fiesta- dijo mi amigo con una sonrisa.

-Gracias pero no, yo lo único que quiero ahora es pensar algo para que Cris me perdone.

Marcos me entendió, la verdad es que era un gran amigo nos conocíamos desde pequeños y siempre nos hemos estado apoyando en todo y para mi era como un hermano.

-Bro ahora tienes que dejarla un tiempo, ella lo está pasando mal y te lo digo yo que ahora mismo estás viviendo en mi casa y se presentó allí llorando.

-¡Cris esta en tu casa!

-Sí, nos dijo a Andrea y a mi si se podía quedar unos días y obvio que aceptamos.

-Tengo que ir mañana a hablar con ella- le dije.

-Hermano, tú no me has escuchado o que, déjale su espacio, dale tiempo le acabas de poner los cuernos.

-Ya lo se, pero y si de la nada me encuentro que está con otro chico, me voy a volver loco.

-Eso no va a pasar, y tranquilo que de eso me aseguro yo.

Estuvimos toda la mañana jugando al la play, hasta que llegó la hora de la comida y nos preparamos unos espaguetis.

La verdad es que lo único que me apetecía era ahogar mis penas bebiendo, pero en casa, no tenía ganas de fiesta, solo quería quedarme en casa.

El resto del día estuve prácticamente haciendo nada.

5 días después

Ya estaba un poco mejor, en estos días hemos estado ayudando a Marcos a elegir su traje de novio, porque se nos casa mañana, lo que significaba que volvería a ver a Cristina después de una semana sin vernos. Me imaginaba los guapa que iba a ir mañana.