10. Cristina

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3 años después

Ya han pasado 3 años todo nuestro grupo se graduó al terminar el bachillerato y justo este año también cuando terminamos la universidad, yo me fui de casa de mis padres y Gabi igual y ahora estamos los dos viviendo juntos en una casa al lado de la playa.

Mis amigas están también viviendo con sus novios incluso Raquel que se pensaba que iba a acabar sola con su gato pero en estos año conoció a Luis un chico super majo.

Hoy justo tenía una entrevista de trabajo y llegué a casa super feliz.

-Amor ya llegué- dije mientras entraba por la puerta.

-Hola mi vida.

-Te tengo una sorpresa- le dije con una sonrisa.

Él me miro con cara de curioso.

-Me han contratado- le dije.

-Sabía que lo ibas a lograr.

-Pero eso no es todo, voy a trabajar contigo en tu oficina.

-La cosa es que me ha contratado un empleado de la empresa no el jefe- le dije.

-Eso es porque yo soy el jefe- me dijo agarrándome de la cintura y atrayéndome a él.

-Y porque no me lo había dicho- le dije mientras le daba un golpe en el pecho.

-Porque era una sorpresa.

-Cambiando de tema, hoy hemos quedado con los chicos para quedarnos a dormir en casa de Marcos y Andrea. ¿Qué te parece?- me preguntó

-Me parece genial- le di un hermoso beso que él obviamente no rechazó.

Me subió a la isla de la cocina y me empezó a besar pero yo le paré.

-Gabi no, que te conozco y luego siempre pasa lo que pasa.

-Eres mala.

-Muy mala- le dije bajándome.

-Anda vamos a preparar las cosas que sino somos los últimos en llegar- le dije.

Estuvimos toda la tarde preparando cosas ya que no solo nos íbamos a ir una noche sino toda una semana.

Una hora después llegamos a casa de Andrea y Marcos y justo nos abrieron la puerta.

-Por fin llegáis- dijo Andrea

-No me digas que somos los últimos- dijo Gabi.

-Si bro- le respondió Marcos.

-Esto es culpa tuya- le susurré a Gabi.

-Veremos luego si cambias de opinión o no- ese comentario hizo que me pusiera nerviosa.

Llegamos al salón donde estaban Bea y Raquel.

-Luego soy yo la que siempre llega tarde- dijo Bea.

-Solo digo que no es mi culpa, es culpa de Gabi.

-Yo siempre culpable de todo- dijo Gabriel.

Gabi se fue a la cocina con los chicos y yo me quede con las chicas mientras ellos hacían el trabajo.

-¡VENGA ESOS CAMAREROS QUE TENEMOS HAMBRE!- gritó Andrea

-¡ESOO, O SI QUEREIS CONTRATAMOS A OTROS QUE SEGURO SON MAS RÁPIDOS QUE VOSOTROS!- les grité mientras nos reíamos.

-Ya estamos- dijo Luis.

-Vaya camareros, seguro la cena ya está fría- dije mientras venían los cuatro directos al salón.

Dos corazones pero un latidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora