¡Pomni no te enamores! - [ Jax x Pomni ] Circus digital

Capitulo 15

Jax.

Caminaba sin rumbo, sin un destino aparente, esperando que milagrosamente apareciera un regalo para mi amigo invisible aunque por lo visto eso jamás sucedería.

Sin mucha prisa, pensé en lo que le gustaría a Gangle, además del anime y aquellos libros en blanco y negro que supuestamente se llaman mangas, o algo así, pensé... ¡Es broma! ¿Por qué debería pensar en algo cómo eso? Tampoco pienso en regalarle un perfume barato como le regalas a tu tía en su cumpleaños, sino más bien, una pequeña y linda sorpresa.

Nuevamente me sentía extraño mientras caminaba por los pasillos del circo, hasta que de un momento a otro, supe que, alguien estaba detrás de mi.

— ¿Qué estás haciendo acá, Zobble? — Pregunté al darme un giro imprevisto.

— Estoy observado que no hagas una de tus bromas pesadas. — Respondió.

— Adivinaste, pero... — Sonreí — ¿Qué harás al respecto? ¿Decirle a tu mami?

— Una propuesta. — Contestó Zobble mientras me enseñaba el papel de tamaño pequeño.

Con curiosidad decido escuchar su propuesta.

— Intercambiemos de amigos invisibles, yo te doy el mío y tú me das el tuyo. — Dijo un tanto sospechoso.

— ¿Era eso? — Pregunté en un tono animado — ¿Y por qué te intercambiaria?

— Porqué te gusta Pomni ¡Ya no lo niegues! — Dijo finalmente, Zobble, quién sacudía el papelito con el nombre de Pomni escrito.

— No me gusta la bufóna. — Contesté con los brazos cruzados, negandolo rotundamente.

— Que pena... Con este papelito podrías, no lo sé... Dejarle un regalo a Pomni... — Decía Zobble fingiendo lastima.

— ¡Qué más da! — Dije en un tono enojado — Hagámoslo, pero que esto quede entre nosotros ¿Entendido? — Pregunté decidido.

— Te prometo que nadie lo sabrá. Ahora, ve a por tu chica, Romeo. — Guiño el ojo Zobble mientras que intercambiamos los papelitos.

Se fue sonriente de haber logrado su cometido al mismo tiempo que yo suspiré preguntándome ¿Por qué hice esto?

Sin más que decir, ahora mi nueva amiga invisible sería Pomni.

Comienzo a caminar otra vez pero ahora todo cambia al observar que mi nuevo amigo imaginario sería ella. Guardo el papelito y continuó con mis pasos, miro a mi alrededor para averiguar que podría entregarle a Pomni.

Sin darme cuenta, había llegado al final de la carpa, frente a mí se encontraba la salida hacia los terrenos digitales.

Suspiré y volví a pensar ¿Qué podría regalarle?

El tiempo pasa y cuánto más pasaba el tiempo, más pensaba en Pomni.

Salgo de la carpa para buscar allí afuera. Llegando al Lago Digital sólo me encontré con plantas, plantas, y más plantas.

Hasta que en un momento me había encontrado con algunas flores, las cuales me parecían un regalo perfecto para ella.

Sacudo mi cabeza y niego la idea. ¿Por qué no simplemente no le hago una broma cómo lo haría normalmente? ¿Qué me detiene?

Por primera vez, deje de lado mis intenciones de hacer una broma y arranqué aquella rosa roja que estaba al frente mío.

Con mi mano la sostenía y con la otra miraba aquel papel con su nombre escrito.