ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 19 - ɪɴꜱɪꜱᴛᴇɴᴄɪᴀ

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Decidí Romper el silencio, notaba a Kyungsoo sorprendido, ellos habían perdido la comunicación, así que, el que apareciera y en su casa era algo bastante extraño, considerando las palabras de Minseok con respecto a ella.

–Sé que esta es una sorpresa para ambos, pero necesitaba hablar con Kyungsoo – dijo con una expresión de satisfacción en su rostro, trate de mantener la calma, pero mis emociones estaban en un torbellino.

–Hyori, este no es el mejor momento. Estamos en medio de algo importante, además, vamos de salida – dijo Kyungsoo intentando ocultar su incomodidad, pero su mirada revelaba que no esperaba verla en ese momento.

–No nos interesa lo que nos tengas que decir, te pedimos que por favor te retires – dije de manera firme y muy convincente, me acerque y le cerré la puerta en la cara.

– ¿Por qué hiciste eso? – pregunto algo extrañado.

–Esa pregunta no debes hacerla, es obvio que desea molestar, después de todo, ¿para qué presentarse aquí? Además, según Minseok ella ahora es feliz y sabe darse su puesto –

–Sí, pero de igual manera no hay que ser groseros –

–No fui grosera y si tanto te molesto ve y búscala – dije algo molesta.

–No es lo que pretendo mi amor, solo deseo que terminemos con todo eso y al igual que Minseok, Hyori es un capítulo que debemos cerrar – dijo dándome un sutil beso.

–Lo sé, pero no hoy o ¿prefieres que nuestro día especial se centre en ella? –

–Por supuesto que no, ya después si vuelve a presentarse vemos como se dan las cosas, hoy es nuestro día – dijo muy relajado, pero la presencia de Hyori había dejado una sombra sobre nuestra tranquilidad, y sabíamos que tendríamos que abordar la situación más adelante porque conociéndola no dejaría de molestar.

Ya que decidimos dedicar un día entero a disfrutar juntos, lejos del estrés de la rutina diaria, nuestro objetivo era llenarnos de momentos especiales. Dejando a un lado lo sucedido con Hyori nos dirigimos a un parque de aventuras extremas, algo que nunca ninguno de los dos había experimentado, me gusta mucho la idea y de verdad deseaba disfrutarla mucho y más junto a mi novio, nos aventuráramos en un curso de cuerdas altas, intentamos superar obstáculos, balanceándonos de una plataforma a otra, y animándonos mutuamente cuando sentíamos miedo de las alturas. Después de completar el desafiante circuito, nos relajamos en un área de picnic cercana y compartimos un delicioso almuerzo.

–Nunca había hecho algo igual, muchas gracias por permitirme vivir nuevas experiencias – dije regalándole una dulce caricia.

–Gracias a ti, por siempre estar dispuesta a todo entre nosotros, quiero que nuestra relación se afiance cada vez más – dijo y seguimos nuestro almuerzo.

Después de recargar energías, nos dirigimos a un parque de atracciones cercano. Montamos en montañas rusas, nos lanzamos en la rueda de la fortuna y disfrutamos de algodón de azúcar y palomitas de maíz. Cada grito y risa hacía que nos sintiéramos como dos niños otra vez.

Ya adentrada la tarde, exploramos un zoológico local, el sonido de los animales era completamente relajante, un ambiente muy natural y hermoso, nos tomamos de la mano mientras observábamos a todo y nos maravillábamos con la belleza de la naturaleza, incluso en el recinto de los pingüinos, nos atrevimos a imitar a los pingüinos, deslizándonos torpemente por el suelo y haciéndonos reír mutuamente, parecíamos dos locos ante la mirada de todos pero lo disfrutábamos.

Para la cena, Kyungsoo eligió un restaurante temático con un espectáculo en vivo. Disfrutamos de la música, la comida deliciosa y la compañía el uno del otro, bailamos incluso cuando la música nos gustaba mucho.

Finalmente, nuestro día especial terminó con una caminata bajo las estrellas en un parque cercano. Nos tumbamos en el césped, observando las estrellas y compartimos nuestros sentimientos. Me acurruqué en su hombro, y él me rodeó con su brazo, sintiendo la felicidad y el amor de ambos. Este día sin duda alguna afianzo lo que sentimos, nuestro amor está más fuerte que nunca. Todo lo que hicimos nos unió mucho más...

***

Al día siguiente estábamos de regreso en el trabajo, muy temprano llegué e inmediatamente fui llamada la oficina de Kyungsoo, eso me pareció bastante extraño, sabía que era un día normal sin nada extraordinario, sentí curiosidad y me dirigí rápidamente.

–Buenos días – dije sonrientemente abriendo la puerta, pero para mi sorpresa Hyori se encontraba allí con Kyungsoo.

–Mi amor pasa... – dijo tranquilamente para luego darme un beso, todo eso ante la mirada y la sonrisa irónica de Hyori.

–¿Qué es eso que tanto has querido hablar con nosotros? Como para que no pares de perseguirnos, nisiquiera te has presentado a trabajar, pero si vas hasta mi casa – dijo mi novio con mucha seriedad, sé que él mucho más que yo deseaba que Hyori nos dejara en paz.

–Adelante, ¿qué es lo que necesitas decir? – dije mirándola fijamente.

– ¿Sabes? No puedo evitar pensar en todo lo que compartimos – dijo mirándolo fijamente y haciendo caso omiso a mi presencia, algo que me molestaba bastante – A pesar del descaro de ambos y que después de todo ese problema con Minseok te olvidaste de mí y nisiquiera te molestaste en ofrecerme respeto –

–Kyungsoo y yo estamos juntos ahora, y hemos construido algo significativo en nuestra relación, tú no tienes importancia aquí –

–Ahora sacas tu verdadera personalidad, ya no eres esa chica "dulce y comprensible", quiero que les quede algo claro, aquí la mala no he sido yo, vengo a presentar mi carta de renuncia, no me interesa seguir trabajando en este lugar – dijo para luego lanzar la carta de renuncia en el escritorio.

–Por fin haces algo que valga la pena – dije alzando un poco la voz, mi molestia ya se notaba.

– No estoy aquí para tratar de separarlos. Más bien, quiero que ambos sepan que sinceramente, esto me trae más problemas que beneficios y hombres mejores que Kyungsoo hay por montones. A veces, uno necesita cerrar ciertos capítulos para avanzar – decía todo esto de una manera descarada.

–Si no tienes más nada que decir, retírate, nunca pretendí ser el hombre para ti, porque nunca te vi como una mujer para mi vida, estás muy lejos de serlo, acepto tu renuncia, ahora retírate –

–Vete que ya es hora de seguir adelante y si es sin ti en el camino mucho mejor – le dije sin guardarme nada, no la soporto y eso no cambiará nunca – dije y se retiró con una sonrisa descarada en su rostro, sabía como molestar.

– ¿Sabías que te ves hermosa hoy? Al verte entrar por esa puerta me ilumino el día – dijo para luego darme un beso –

–Venía bastante feliz y emocionada por verte pero... esa visita fue inesperada, la verdad no me imagine que se presentaría de nuevo, aunque sabiendo cómo es debí sospecharlo –

–Sí, lo fue. Aprecio que hayas manejado la situación con tanta madurez, me gusta tu actitud hoy, eres una mujer muy decidida – dijo acercándose más a mí – Ambos sabíamos que esto debíamos hacerlo, ya lo habíamos hablado –

–Lo sé, pero en el fondo no quería que sucediera solo por no verle el rostro de nuevo, es una presumida y no la soporto –

–Te ves hermosa, celosa – dijo sonriendo y dándome un beso.

–Mi hermosura es gracias a la felicidad que me haces sentir – dije y nos besamos por un buen rato.

–Bueno, sé que nuestras vidas pasadas son parte de lo que nos ha llevado a este punto. Pero, sinceramente, me alegra que ella haya venido porque necesitábamos de todo esto para continuar con nuestra vida juntos –

–Estoy feliz de estar contigo. Y quiero que sepas que siempre serás mi prioridad – dije para darle muchos pequeños besos.

–Eso significa mucho para mí, y estoy aquí para apoyarte en todo momento mi hermosa novia –


SABOR A TI (D.O y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora