DOCE

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Ese día fue relativamente tranquilo, bueno, los llantos seguían y el miedo igual, pero no ocurrió nada terrible.

Wooyoung no se separaba de San, sentía que si lo alejaban aunque sea 1 cm de él iba a pasar algo malo.

Entre Seonghwa y Yeosang la situación no era la mejor, el mayor estaba teniendo crisis bastante fuertes, haciendo sentir mal al menor, incluso diciéndole cosas feas.

— Te dije que me dejaras solo, no quiero hablar.

— Pero bebé...

— No me digas así, sale de aquí, ahora.

— Sé que estás mal pero no por eso me debes responder así.

Yeosang no pudo aguantar las lágrimas, lo que más necesitaba en esos momentos era a su mayor y éste solo lo rechazaba.

Seonghwa suspiró, se odiaba por ser así, trataba de no serlo pero su mente le jugaba en contra, si estaban en ese lugar porque hay gente que no acepta que dos hombres estén juntos, como rayos iba a seguir siendo cariñoso con uno.

— No... no llores Yeo, porfavor, lo siento, es que no puedo...

— Otra vez te está ganando el miedo, si siempre va a ser así mejor no seamos nada y...

No quería seguir escuchando, tomó del brazo al menor y lo tiró hacia él, abrazándolo fuerte.

— Te juro que hago todo lo posible para no tener ese jodido miedo... Pero no puedo, vas a terminar lastimado tu, si nos ven juntos... te harán daño... no quiero...

— Tu me estás haciendo más daño ahora, rechazándome Seonghwa.

— Perdóname...

Lágrimas salieron de los ojos del mayor, sabía que le hacía daño, pero no podía evitarlo, el miedo de que los vieran juntos era demasiado.

Yeosang suspiró, cerró los ojos y contó hasta diez, recordó la pelea de la otra vez, ¿Estaba siendo insensible? Pensó.

Sabía el miedo que tenía el mayor, y ahora con todo lo que está pasando, si debe estar peor, Maldita sea Yeosang, intenta entenderlo...

Se acercó al mayor y tomó sus mejillas, ambos lloraban, le dió un pequeño beso y luego lo abrazó.

— Perdóname tu a mi, yo igual estoy haciendo todo mal, no trato de entenderte... perdóname.

Había un chico en la cabaña que escuchaba y miraba toda la situación, San.

Debía hablar con el mayor, lo entendía perfectamente, el pelinegro pensó que podría ayudar al rubio si conversaban de lo que tanto tenían miedo.

🖤

Eran las 4 pm, Hongjoong, Yunho y Yeosang fueron a buscar comida para todos, era el momento para San de ir a hablar con el rubio.

Salió de la cabaña y encontró a Seonghwa sentado en una banca a un lado. Su momento ha llegado.

— Me di mi primer beso con Wooyoung, minutos antes de que nos enteraramos de todo esto, ¿Es triste no? No pudimos ni estar felices de eso.

San se sentó al lado del mayor y al ver su cara de sorprendido se rió.

— Me costó demasiado, ¿Sabes? Aceptar mis sentimientos por él, yo lo negaba todo, tenía mucho miedo de que me preguntara qué eramos porque yo no podía comprometerme, osea, eramos dos hombres, íbamos solo a pasarlo mal.

Seonghwa lo miraba fijamente, se sentía comprendido, cada palabra que decía San era lo que él sentía.

— Te veo muy feliz con él y sin miedo de mostrar su amor... ¿Qué cambió?.

El menor sonrió triunfante, estaba logrando que le prestara atención, respiró profundo, tenía que ser lo más sincero con lo que sentía.

— Me imaginé una vida sin el.

Con solo mencionarlo le dolía el pecho, una vida sin su pelirrojo...

— Una vida sin escucharlo reír, sin ver su carita, sin poder abrazarlo, ¿Te imaginas una vida sin poder abrazar a Yeosang? Sin poder tomarle la mano, sentirlo cerca. Me di cuenta que si el alejarme de él y no tener miedo, era perder al amor de mi vida, ¿No era perder la felicidad de la vida igual?.

Seonghwa escuchaba cada palabra que decía el pelinegro, cada vez que tenía miedo y alejaba a Yeosang, su pecho dolía, se sentía vacío, sentía que le faltaba su mitad, lloraba y lloraba y no paraba hasta que lo volvía a sentir, hasta que volvía a sentir su cariño.

Empezó a llorar y puso sus manos en su pecho, podría vivir una vida tranquila y sin miedo, pero no sería feliz, porque su felicidad era Yeosang.

— Es muy difícil...

— Claro que lo és, yo aún tengo miedo, la mierda que está pasando me tiene con mucho miedo Seonghwa, pensar si quiera que le llegaran a poner un dedo encima a Wooyoung me está matando por dentro.

— Yo lo quiero San, es primera vez que se lo digo a alguien, pero de verdad lo quiero mucho, no quiero perderlo, no quiero que le pase nada...

— ¿Te gusta? ¿Te gusta Yeosang?

El mayor suspiró, ya le habían hecho esa pregunta y no la pudo contestar, pero acaba de confesar que lo quería.

— Yo se que no podrás contestarlo Seonghwa, y lo entiendo, porque yo tampoco pude en su momento, pero me hicieron la pregunta que yo te hice, y creeme que no podría soportar una vida sin ese pelirrojo que me vuelve loco...

Seonghwa le sonrió, sentía envidia de San, de como decía tan fácil y libre lo que sentía por Wooyoung, el quería poder decir lo mismo de Yeosang...

— Gracias por esto, de verdad necesitaba a alguien que entendiera lo que estoy pasando, te ves tan feliz con Woo que jamás pensé habías pasado por lo mismo que yo...

— Para que veas que ese miedo se irá, ¿Va a costar? Claro que si, y mucho, pero cuando te des cuenta que tienes más que perder que de ganar con alejarte de Yeo, vas a perder ese jodido miedo y vas a poder amar como sé que quieres hacerlo.

— Mu... muchas gracias San... de verdad, me ayudaste a abrir los ojos y a entender muchas cosas... yo...

— Tiempo al tiempo amigo, sólo trata de no dañar más a Yeosang, le gustas demasiado, ese chico está pero enamorado de ti, es lo más lindo de la vida tener a alguien contigo, que te ame, que siempre quiera verte feliz, no lo desaproveches.

— No lo haré... lo dije mucho ya, pero de verdad, gracias.

Se dieron un fuerte abrazo, ambos necesitaban tener esa conversación, sentir que alguien los entendía, apoyarse mutuamente, los chicos ahora estaban más tranquilos... al menos por un tiempo.

𝚃𝚑𝚎 𝚛𝚒𝚜𝚔 𝚘𝚏 𝚕𝚘𝚟𝚎 | Woosan/SeongSangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora