CAP 15

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POV T/N

Un mes, no, más de un mes siendo ignorada por Inumaki, supuestamente hoy Maki, Panda y Yuta tenían una misión importante junto a Gojo por lo que yo e Inumaki nos encontrábamos solos en la academia, un día entero los dos solos.

Me levanté para beber algo de agua y para mí sorpresa Inumaki estaba allí comiendo algo mientras leía algún manga, me miró de reojo, yo me limité a apartar la mirada para coger el vaso con agua, beber  y salir de allí rápido.

"Hoy las barreras de protección están en mantenimiento, estate pendiente" por primera vez en tanto tiempo se ha dignado a decirme algo.

-Está bien saber qué hoy puedo morir- quité la nota de enfrente mía y la tiré a la basura, no soy orgullosa pero me fastidia que una persona lleve tanto tiempo ignorándome y ni si quiera me pida perdón. Me fui de allí para dirigirme a la habitación, vi de reojo como Inumaki me imitaba y se metía a la suya.

Me asomé por la ventana, aún hacia sol, ya calentaba bastante más que en invierno, cosa que agradecía bastante, los árboles bailaban con el viento y la maldición que había en mitad de la pista también, además los pajaritos se estaban empezando a ver, espera, ¿maldición?

No me dió tiempo a pensar mucho más, cuando me di cuenta la maldición estaba detrás mía.

-¿Qué mierda?- me dió un golpe y traspasé la pared llegando al cuarto de Inumaki -joder- miré al frente, había desaparecido -Inumaki cuidado- me puse de pie rápidamente ignorando el dolor que tenía por mí cuerpo

-Algas- el chico se puso a mi lado, ¿no había nada?

-Hay una maldición, creo que se teletransporta- en cuanto terminé de decir la frase sentí una ligera vibración, empujé a Inumaki rápidamente y la maldición atravesó el techo cayendo encima mía.

-SAL VOLANDO- la maldición traspasó la pared que estaba detrás suya cayendo en el campo. Hice una katana con la energía maldita y fui corriendo a ella -DETENTE- mi cuerpo se paralizó, vi como un rayo de energía pasó a milímetros de mi cara, si me hubiese dado podría haber muerto.

-Gracias- me giré a Inumaki, tenía un poco de sangre por los labios -no vuelvas a hacer eso, te vas a matar- no era por alardear pero mi energía era mucho mayor a la del peliblanco, no quiero que su técnica se vuelva a él.

-Salmón- volví a mí recorrido y logré hacerle algunos cortes en el combate cuerpo a cuerpo, iba a darle un golpe en la cabeza pero se transportó detrás mía y me mandó directa a un árbol que está al lado de Inumaki. Este intentó pelear, yo estaba sangrando, creo que estaba perdiendo la consciencia, veía como Inumaki intentaba golpear a la maldición pero está le esquivaba todo el rato. Me puse de pie, no podía dejar que Inumaki muriera en mis ojos.

-Oye tú- intenté llamar la atención de la maldición, giró para mirarme y la pude clavar varias flechas. Empecé a absorber de su energía maldita, al menos tratar de debilitarla algo.

-Atún- vi como Inumaki intentaba ponerse de pie, mi mente se estaba nublando poco a poco, mi cuerpo no iba a aguantar más energía. Escuché un grito de la maldición, no era tan fuerte como pensé, estaba agonizando -EXPLOTA- sentí como un líquido pegajoso caía en mi cara

-Inumaki- miré mis manos, veía doble, absorví demasiada energía, mi cabeza empezó a doler mucho.

-Mayones, Mostaza, algas, Atún- sentí como empezó a entrar en pánico, así no ayudaba, mis piernas estaban temblando, mi cuerpo se estaba destemplando y algo tibio recorría mi cara. Mis piernas dejaron de hacerme caso y sino fuese por Inumaki me habría estampado en el suelo.

-Mierda- Inumaki me tumbó en el suelo, yo respiraba muy rápido, necesito relajarme, tranquilizar mi interior, agarré la mano de Inumaki y usé la energía que me sobraba para curarnos a ambos, al menos así bajarían los niveles de esta.

-¿Mostaza?- suspiré pesadamente una vez me empecé a sentir mejor.

-Perdón- me intenté sentar pero me mareé un poco, Inumaki me sujetó para que no me cayese -a veces no controlo la energía y puedo colapsar- me he dado cuenta de que es la primera vez que volvemos a hablar. Giré mi cabeza al edificio, nuestras habitaciones estaban destrozadas -¿Qué hacemos?-

"Llama a Gojo" me hizo unas señas con las manos

-Inumaki mi móvil está debajo de esos escombros- señalé lo que quedaba de mi habitación -maldito bicho- mi compañero soltó una pequeña risa, echaba de menos pasarlo bien con él -¿Qué nos pasó?- la pregunta se me escapó sola, miré al chico a mi lado, se ha puesto pálido -¿Tan malo fue lo que hice?-

-atún- el chico negó con la cabeza

-Entonces por qué te alejaste de mí- sentí como una lágrima caía por mí mejilla, me iba encontrando un poco mejor así que traté de ponerme en pie pero tropecé en el intento, Inumaki logró cogerme antes de caer y todo se oscureció a mí alrededor.

POV INUMAKI

-Algas- logré cogerla después de quedar inconsiente

-Inumaki- por suerte Gojo acaba de regresar -me han dicho que ha habido una presencia de energía maldita desconocida ¿Qué ha pasado?- el albino llegó a mi lado observando el destrozo

-Algas- apoyé a T/N en mi espalda

-¿Se ha curado? ¿Tiene que ir con Shoko?- Gojo estaba muy preocupado

-Salmón atún- no sé muy bien cómo comunicarme en esta situación.

-Estará agotada entonces- ¿Me ha entendido? -los chicos se han quedado en un hotel de la zona, no los quise traer, han resultado bastante heridos y no quería ponerlos en peligro, en el bosque hay un pequeño edificio que antes se usaban de dormitorios, llévala allí para que descanse en lo que arreglan esto, cuídala por favor-

Asentí con la cabeza y Gojo me trasportó a una especie de cabaña grande, me adentré a esta y dejé a la chica recostada encima de una de las camas, la que más limpia estaba.

-Inumaki- me iba a ir de la habitación cuando escuché su voz débil llamarme -yo te necesito conmigo- me quedé en el marco de la puerta impresionado ¿Le importaba?

INUMAKI TOGE | El ruido de nuestro silencio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora