CAP 16

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POV T/N

Me levanté con un dolor de cabeza terrible, no estaba en mi habitación, de hecho nunca había visto está habitación. Me levanté con cuidado pero mi cabeza dio muchas vueltas y me caí al suelo

-Mierda- intenté levantarme pero unas manos se posaron en mis hombros adelantándose.

-Mostaza- ¿Inumaki? Sorprendentemente me dió un abrazo ¿Qué había pasado?

-Inumaki, donde estamos- me separé del abrazo, noté un ligero rubor en él.

"Una cabaña en el bosque de la escuela, nos hospedaremos aquí hasta que arreglen las habitaciones, ¿Estás bien?" A pesar del dolor de cabeza pude entenderle bien.

-Me duele la cabeza, pero sí, gracias- me fui de la habitación, era incómodo estar con él en la misma sala, no quería, me había hecho daño. Me fui afuera de la casa o cabaña o lo que sea donde estuviésemos. Era un sitio bonito la verdad, no lo conocía ni sabía de su existencia.

Escuché como alguien corría por el interior de la casa, ¿Qué está haciendo ahora este chico? Fui a entrar dentro por si necesitaba ayuda pero al abrir la puerta él se me adelantó quedando cara a cara

-Salmón, atún, mayonesa, algas, abadejo- empezó a decir mucuhas palabras a la vez. Iba a preguntarle si estaba bien pero tendió un papel y volvió a entrar corriendo a la casa.

"No te puedo decir esto a la cara, porque sino exploraré la verdad. Me siento como un gran idiota al dejar de hablarte pero es que me sucedió algo y no sabía cómo mirarte a la cara de la vergüenza.

No te lo puedo explicar pero espero que entiendas un poco mis motivos y me puedas perdonar. Perder a alguien como tú sería terrible para mí, ayer casi mueres y no pude soportar la idea de que no estés bien.

Por favor, sé que mi explicación no es la más acertada ni la mejor pero te prometo que no volverá a pasar, por favor, perdóname"

Terminé de leer la carta un poco en shock ¿El problema no era mío? Una gran sensación de alivio invadió mi cuerpo y salí corriendo a buscarle, me le encontré dando vueltas en una de las habitaciones, cuando me vio se quedó de piedra

-¿Por esto estabas nervioso?- le señale la carta que me había dado, el asintió varias veces con la cabeza -tonto- fui tranquilamente hacia él y le dí un abrazo, lo necesitaba, hacia mucho que no tenía tacto con él, era tan tranquilo -no te voy a exigir explicaciones, pero si lo vuelves a hacer te quedas sin pelo-

-Salmón- dejé de abrazarle, miré su cara, estaba rojo.

-¿No es culpa mía, verdad?-

-Atún- negó con la cabeza muy rápido.

-¿Amigos entonces?- le miré fijamente esperando una respuesta.

-Salmón- él sonrió y volvió a darme un abrazo.

Me separé de él, me alegraba saber qué al menos estamos bien ahora.

-Ayer me salvaste- le miré a los ojos directamente -muchas gracias Inumaki- el chico sonrió y posó su mano sobre mi cabeza.

POV T/N

-Inumaki- me senté a su lado en el desayuno, después de dos días volvieron a construir el edificio y ya estaba listo para convivir.

-Salmón- el chico sonrió cuando llegué y me tendió una cereza que se estaba comiendo.

-Gracias- la cogí y me la comí. Maki y Yuta llegaron a donde nosotros y se sentaron enfrente nuestra

-¿Ya estáis bien?- Maki subió una ceja

-Sip- apoyé mi cabeza encima del hombro del chico, me separé de él y noté como sus orejas estaban tornándose a rojo.

Desayunamos los cuatro tranquilamente, hoy supuestamente era un día de descanso así que no tenía prisa para hacer nada.

Sentí como alguien dio dos toquecitos a mí hombro

"Te debo una salida, ¿Vamos al centro comercial?" Sonreí al entender su mensaje.

-Claro- me alegra saber que todo volvió a la normalidad.

-Encima venís con secretos eh- Maki se rió junto a Yuta -nosotros nos vamos a entrenar ahora, ¿Venís?-

-Tenemos planes pero gracias Maki- los dos chicos se levantaron de la mesa y nosotros hicimos lo mismo.

-Hojuelas de bonito- el chico empezó a andar y yo fui a su lado.

POV T/N

-Eres muy cruel Inumaki- suspiré mientras le miraba de reojo.

-Algas- dijo el chico riendo

-No niegues lo innegable, no hay quien te entienda, eres muy protector- inflé mis mofletes como si fuese una niña pequeña -yo quería ese algodón de azúcar-

"Te van a salir caries" me mostró su teléfono para enseñarme lo que quería decir

-¿Qué más da? Es mi boca no veo ningún problema- me crucé de brazos más indignada que antes.

"Entonces nadie querrá besarte, a mí no me gustan las bocas con caries" me volvió a mostrar su teléfono

-Pero es que tú no vas a besarme- me ruboricé ante la idea en mi cabeza ¿Cómo se sentiría? -a no ser que quieras besarme- miré al chico para notar como sus orejas se tornaban a un color rojo.

-Atún, atún- el chico negó rápidamente, aunque en el fondo me dolió solo me quedó seguir con la broma

-No soy tan mal sujeto- dije en voz alta notando como el chico se ruborizaba más -Inumaki a veces te ves adorable- empecé a reírme de mi compañero el cual se estaba tapando las orejas.

-Hojuelas de bonito- dijo el chico escondiendo su cara entre las piernas

-Oye no mientas, yo no soy cruel- me hice la ofendida.

Amaba estos momentos de paz con él, solo somos nosotros y nuestras burlas y risas, cada vez que le miro todos mis sentidos salen a la luz, y más aún si me expongo a esos ojos violetas que tanto me encantan.

-¿Mayonesa?- su voz me sacó de mis pensamientos.

-Si, perdón, solo pensaba- pensaba en lo lejano que se escuchaban nuestros latidos.

Sólo espero algún día poder decirle todo lo que siento, que aunque parezca mentira él y su silencio me han hecho sentir y escuchar mucho más que otras personas ruidosas.

-Algas- el chico señaló el baño

-Te espero no te preocupes- se adentró a estos mientras que yo le esperaba de pie en la puerta de estos.

-¿Y esta chica tan guapa?- un chico un poco más mayor que yo se acercó a mí -¿Cómo estás tan sola?-

-Esta chica guapa está esperando a su amigo-

-No me digas, ¿Quién te dejaría sola?- el chico me miraba con una sonrisa coqueta

-Alguien que se estaba meando- me crucé de brazos intentando ignorarle

-Que pena, eres muy guapa, ¿Tienes novio?- iba a contestar pero sentí como alguien me abrazaba por la espalda.

-¿Inumaki? Estás bien?- apoyó su barbilla sobre mi cabeza y asintió con esta -vámonos por favor- el chico se separó de mí y me agarró de la mano para salir de ahí.

INUMAKI TOGE | El ruido de nuestro silencio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora