muchas historias pausadas, realmente tengo mucho Sukuita y Satosugu suelto en mis notas.
puedes venir y leerlo, intentaré escribir algunas conclusiones.
Realmente le era molesto que su hermano siempre trajera a colación a Megumi, desde que lo había conocido en la preparatoria el molesto mocoso sólo hablaba de este, Sukuna era paciente, en lo que podía ya que la apacibilidad no era una cualidad propia de Sukuna.
— Y dime Fushiguro te la mete tan bien como yo, mocoso.— Lanzo las palabras con saña, irritado ante el aparente enamoramiento infantil de su gemelo.
— Sukunii!!! — Yuuji lanzó un grito ahogado mientras se teñía de carmesí, hasta las orejas, Sukuna amaba ver a su hermano tan pasivo, la sumisión debajo de él, temblando y gimiendo, Sukuna chasqueó la lengua para regresar de la fantasía de poseer a Yuuji, su esposa.
— Si me enteró que haces algo con él créeme que lo mato. — Sentenció con desdén, colocando su mano sobre las mejillas de su hermano para dar un ligero tirón de mejillas, suaves y regordetas, como las de un infante, eso era lo que los diferenciaba, aunque eran gemelos idénticos Yuuji contenía facciones infantiles y redondas, pero no están feas, encantadoras diría cualquiera que lo viera, otorgandole un aspecto infantil y amable, ese era un problema ya que su apariencia y su actitud despreocupada era un imán para los imbéc!les como Fushiguro.
La discusión había sido en el desayuno pero Sukuna continuaba dándole vueltas en la cabeza, tal vez a Yuuji le era fascinante el cabello negro del bast4rdo ya que siempre hacia algún comentario sobre este, su mirada cambiaba de punto en la habitación, mirando las albas paredes de la sala, jugueteó con sus dedos, como si ellos tuvieran la respuesta de sus celos enfermizos que abarcaban la idea de Yuuji enamorado, aunque sabía que su hermano no lo dejaría, mataría a cualquiera antes de permitirlo, aún era intrigante el hecho.
— ¿Mamá puedo tomar tu tinte? — Gritó hacía la cocina, en la cual su madre finjia cocinar pero era más que obvio que se estaba emborrachando con algún vino barato que encontró en el super.
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