Pétalo Morado.

Capitulo 8.

— ¿Si? — dijo Hye Kyo—.
— Quiero preguntar a usted ¿Cuál sería mi situación en un juicio por estafa?. Es por tres millones de dólares, estamos dispuestos a entregarlos — dijo segura— no fue algo planeado, surgieron problemas administrativos— justificó el problema—.
— No sería difícil resolverlo, entregaría el dinero que el demandante espera recibir. Hecho eso no existirá base de demanda—.
— Llegar a un tribunal solo es escandaloso — murmuró frustrada—.

Luana suspira— Pastillas, pastillas— murmuró teniendo en mano pastillas recetadas—. Luana se dirigía nuevamente a la empresa se veía desauciada iba arreglando sus mangas.
Bae Su-ji, Jun Soo-Yeong y Yu Miho venían saliendo y se encontraron, con empatía y alegres hablaron—.
— ¿Fue a almorzar señorita Luana? — preguntó Bae Su-ji—.
— No, no he almorzado—.
— Acompáñenos a almorzar— Jung Soo dijo —.
Ella se mostró conmocionada sonrió — Está bien iré con ustedes— murmuro—.
Nosotras tuvimos un almuerzo agradable, el pescado que llegó a mi boca sabía bien, no era proteína constante de mi alimentación pero, ahora sí lo será.

Papá llamo luego, se preguntaba cómo estoy. A él le preocupaba la demanda, pero le expliqué que consulte a un abogado, que seguro no será complicado, él estaba más tranquilo, volvía a decirle que lo resolvería.
Pase tiempo con la gerente, ella se había convertido en una guía y apoyo en lo laboral. Me mostró como hace su trabajo, tenía unas cosas que tratar de la parte verde que caracteriza a la empresa.
— ¿Sabe de los proyectos verdes que realiza la empresa?— preguntó senzata Bae, observando a Luana—.
Pensó Luana al respecto — Solo se que es para preservar el medio ambiente y áreas verdes en la ciudad— dijo insegura—. Bae Su-ji estaba abatida— Si— respondió y sonrió — Hemos logrado crear dos parques en áreas de menor implantación de árboles. Tenemos dos terrenos, ahí había dos edificios — informaba detallando concentrada en sus ideas—.
— ¿Hay algo pendiente allí ?— preguntó porque lo presentía —. Bae asintió con la cabeza aún pendiente de sus ideas — Yo he pensado que una cafetería junto a un restaurante estará bien manteniendo el ambiente natural, ¿Qué estaría bien?— preguntó a Luana—.
— Se me ocurre que un restaurante y en el otro un área para descansar con flores en las esquinas está bien—.
— ¿Enserio?— preguntó tranquila y expresiva mente sorprendida—.
— ¡Si!— respondió nerviosa—.

El señor Sunoo conduce el auto de Luana. En el camino se veía desanimada observando por la ventana, alzó la vista solo cuando pasaron cerca de la presencia policial en específico por un crimen de asesinato.
— <<El dinero no le importa tanto ahora para hacer algo así, cada persona que muere aumenta las personas que lo apoyan>>. Luana observa al lugar con odio en sentir.
— ¿Te encuentras bien Luana?— al verla triste pregunto—.
— Si, estoy bien, solo que aún lo recuerdo cómo si estuviera junto a él— murmuró triste—.
Luana llega a la empresa donde trabaja Dong-yul, observa el lugar.
Esta una chica sentada frente a la salida, Luana camina ahí para sentarse — Hola— sonríe, levemente Luana se inclina—.
— Hola— respondió respetuosa—.
Luana llama a Dong-yul— Dong-yul ya estoy aquí, baje pronto por favor—.
— Muy bien voy para ahí— respondió —.
La chica de nombre Chaeyeong observa a Luana, su primera percepción la lleva a pensar que puede ser amiga íntima de Dong-yul, pensarlo comprimia su pecho y entristecía sus ojos, pues de ser así, ella sería la única chica que más cerca sea encontrado de todas las confidentes y amoríos de su amigo Dong-yul.
Luana se pone en pie cuando Dong-yul llega, la vista a Chaeyeong no es muy despejada a Dong-yul porque Luana está enfrente, y su belleza y encantó es percibida desde el momento en que sus ojos se miraron. Dong-yul se acerca con una mano en la espalda pero Luana en secreto contempla su hermoso rostro que no lo nota al instante. Sin una halagadora sonrisa ella espera y él de igual forma se acerca.
Chaeyeong alterada y molesta se levanta reclamando a Dong-yul.
— ¡¿Esto era lo más importante que haría hoy?!— Luana se dio media vuelta y girando su cabeza los observa, Luana no lo conocía pero daba la impresión que era importante para Dong-yul.
— Chaeyeong, ¿Esta aquí?— pregunto confundido de lo que sucedía en su amiga al verla—.  Ella dirigiéndose a Luana dice — Yo aborrezco a personas como tú — habló con Sensatez y odio, fue y dio una fuerte cachetada a Luana y se fue de ahí—. Luana toca su mejilla desconsolada — Oye— dijo— ¿Esta loca?— le pregunto no enojada—.
Dejo sorprendido el acto de su amiga a Dong-yul — ¿Esta bien? — pregunto a Luana—.
— Si— murmuró suave—. Dong-yul extendió el brazo con una rosa morada en su mano. Luana la observo por unos segundos y la tomo, sonrió feliz mirando la rosa— Es hermosa muchas gracias— nerviosa estaba porque Dong-yul despertó su interés de manera significativa—.
— ¿Quiere escuchar lo que tengo por decir? —.
— Está bien — respondió resignada luego de ser golpeada y pasar todo por alto—. Dong-yul se veía un poco avergonzado pero animoso de manera forzada dice — Bueno, retirare la demanda — orgullosamente hablo—.
Luana sonrió mostrando su agrado y agradecimiento, pero de emoción no se invadió, su razonamiento le decía que era la acción correcta, y que sucediera debía de pasar.
— Que bueno que tomó la decisión correcta— exclamó prudente y sonrió brevemente— quiero invitarlo a comer para disculparme por la molestia causada — habló pacifica mente y se inclino como si fuera de menor superior que él—. La expresividad de Luana se veía como si el muro que sostiene sus emociones se derrumba, pero su expresividad se debe a dolencias de su enfermedad que provoca lágrimas en sus ojos.
— Acepto su invitación — dijo Dong-yul, sonrió levemente de lado— Pero ¿por qué se ve tan triste? no sabía que Chaeyeong golpeara fuerte —  dijo preocupado—.
— No es esa la razón — dijo, Luana se avergonzó por su situación en ese momento, limpio la lágrima que salió de su ojo de inmediato—.
Fueron y se subieron en el auto, al dentrar Luana cubrió su boca y Sunoo los llevo.

— ¿Cómo es que está aquí?— preguntó- una compañera de grupo a Camila con mucha arrogancia—.
Ella sonrió feliz porque estaba hablándole, sin notar su desprecio. — Yo vivo con mi mamá aquí, me apoyan mucho en esto — respondió—.
— Sabe, yo he pensado que un grupo de cinco sería mejor  —. — Entonces una de nosotras no estaría aquí — dijo nerviosa por la situación—.
— Asi es, una de nosotras no debería estar aquí — habló fuerte a Camí como si estuviera insultando—.
— ¿Quién debería ser? — pregunto prudente con expresión rígida —.
— Ya sabe — respondió como si no hiciera falta decirlo—.
— ¿Por qué? — preguntó Camí—.
— No veo el porque debería de ser de otra forma—.
Una de las demás se sentía incómoda observando el desprecio a su compañera.
— ¿Acaso están consientes de lo que dicen? — dijo a las dos chicas que comenzaron la discusión — Camí ayudo en la producción y composición del álbum The most — habló con mucha seriedad — soy más fan de nuestro grupo por lo bien que el concepto nos hace destacar. No presté atención a esas palabras — exclamó empática y alienta a Camí—.

Suave se siente la tención y impulsa a actitudes cariñosas. Desde el día de encuentro repentino, susurra su tierno amor para poder ser asistido.
Dong-yul y yo nos sentamos a una mesa, yo lo observaba para ver cómo estaba, fueron unos minutos para que la atención de sus ojos se posaran en mi y una sonrisa de contemplación. Llegó el mesero preguntando la orden, Dong-yul respondió rápido — Sopa de tofú y mariscos por favor —.
— Para mi un bibimbap de verduras y huevo frito y puede traerme un té de ginseng—.
— Una copa de vino dulce— dijo alzando su mano—.
Pasaron unos segundos y dije a Dong-yul — Conoce a la chica de antes ¿Quién es? — quería conocer la respuesta y saber más de él—.
— Chaeyeong es una amiga — responde amable y me miraba fijamente—.
— ¿Es de las leales y serviciales?— pregunto con emoción —. — Si— responde sensato—.
— Le debe explicar que usted y yo no somos tan cercanos como cree— discreta y rigurosa dijo a él—.
— ¿Cómo es que tiene tanto coraje para decir eso?— observa estimando a Luana—.
— Muchas veces me preguntó lo mismo — dijo sería de expresión—.
— Nos hemos vistos antes— pensando en ello— pero por él cortó tiempo, no he preguntado sobre la función que realiza en Side part a una edad tan corta — se observaba la duda y como esperaba la aclaración de ellas, esperaba con una sonrisa e intriga—.
— Todavía no tengo un lugar dentro de Side part— con veracidad dije, pensaba, sentía y creía en mis ambiguas palabras, porque Side part seguirá igual este o no en Corea— Pero, impulse a crear la empresa soy dueña de Side part, de todos modos mi padre se encarga de ella—. Pronto llegó la comida a nuestra mesa y se veía muy bien. Embobado Dong-yul decía — Quién podría decir que es la dueña—. Di un vistazo a su rostro pero no tenía interés en responder y solo empecé a comer.

Dong-yul observaba constantemente a Luana en especial al descubrir completamente su rostro despojando de su boca el cubre boca luego de ordenar su comida y luego continuo de esa forma.
La malicia de Dong-yul se dejó ver — ¿Desea comer algo más después?— pregunto con malicia—.
Con toda seguridad respondí — Conoce mi respuesta —.
— No quiere intentarlo conmigo — expreso ser una ofensa para él—.
— Sería una deshonra hacer eso, lo conozco desde hace tres días y, tengo pensado ser casta hasta casarme — murmuró suave con mucha Sensatez. Estaba sorprendido y se miraba como si no lo pudiera entender.
Caminamos luego cerca de el restaurante — Gracias por invitarme a Mingles — dijo, sin mostrar expresión—.
— Nunca había visto una rosa morada, gracias— dije sonriendo. En ese momento me tomo el brazo y caminamos muy cerca uno del otro. — Ya se oscureció, no quiero perderla de vista — instantáneamente sonrió — no parece alguien que pueda cuidarse sola, mira de que tamaño eres — observándome dijo—.
Sonreí alegre — me está discriminando, en realidad no tiene idea, se cuidarme — exprese que se cuidarme realmente, muy segura y moví de arriba a bajo mi cabeza—.