¿Qué pasaría si conocieras a alguien con un desgarrador pasado? ¿Qué harías? ¿Cómo lo ayudarías? En esta cautivadora historia, acompaña a Max, un dedicado médico Pokémon, se embarca en un conmovedor viaje para acompañar a una Glaceon en su búsqueda...
Desde que decidí cuidar a Diamond, las cosas han ido relativamente bien. Oficialmente me convertí en su entrenador, pero ella vive con Joy. Creo que se ha acoplado bastante bien a su nuevo hogar. Como Gallade, el esposo de Mia, pasa todo el día cuidando a los Pokémon en la Guardería de La Tía Kuki, no convive mucho con Diamond. Solo espero que ella se recupere pronto, porque, si soy sincero, no me gusta ver sufrir a un Pokémon, especialmente a uno tan lindo como ella. Es doloroso verla en esa situación, pero confío en que pronto estará mejor.
Máx
Con un suspiro feliz, Max se preparó para enfrentar otro día de trabajo. Sabía que le esperaba una jornada ocupada, pero estaba listo para afrontar los desafíos que le deparaba la jornada laboral.
A pesar de las dificultades que enfrentaba con su pata lastimada, Diamond encontraba cierta paz en su nueva vida. Desde su llegada, había sido recibida cálidamente por todos en la casa. Aunque no se sentía del todo cómoda con la presencia de Gallade, Mia y su esposo, Gallede, se esforzaban por hacerla sentir bienvenida. ¿Cómo lograban llevarse bien con Gallade, siendo Diamond algo reacia hacia los machos? La respuesta residía en la organización de la casa: Joy y Gallade vivían separados en otra residencia, lo que permitía a Diamond quedarse con la Tía Kuki, una mujer amable que siempre tenía un plato de comida para ofrecer. Además, contaba con la compañía de Mint, una encantadora Sylveon que había pertenecido a la madre de Mia y a un pariente que vivía en Alola. Aunque Mint tenía una cicatriz en el pecho y lucía un moño falso, su dulce personalidad la convertía en una compañera reconfortante para Diamond.
(Un dibujo de Mint)
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La presencia de Diamond despertaba los instintos protectoros de la Tía Kuki, lo que daba lugar a situaciones interesantes. Durante el almuerzo, Mint expresó su preocupación por la cantidad de comida que Kuki le estaba sirviendo a Diamond.
