Semanas después
Sam
Llevo semanas viéndome a escondidas con Frida,y me he dado cuenta que no es nada de lo que aparenta ser,lo malo del asunto es que no he logrado descubrir el por qué de su comportamiento, porque ella es una coraza indestructible y dudo que se abra conmigo fácilmente. Por otra parte se está convirtiendo es una necesidad,a cada hora quiero tenerla y besarla,no sé pero es jodidamente adictiva. Voy saliendo de la escuela,y voy huyendo ya que Nila se la pasa detrás de mí todo el tiempo,no es una mala chica y hasta puedo decir que la paso bien con ella,pero no cuando mi único objetivo está a dos metros de mí, despidiéndose de Marie,me mira por encima del hombro y con eso basta para que la siga,y ella me conoce,y se escabulle hasta llegar al lugar de siempre dónde le enseño que yo y solo yo,soy el único hombre que la va hacer feliz.
—Ahora te da por espiar,que lindo Sam—da un paso atrás deshaciéndose de la blusa y yo acorto el espacio que nos separa y la beso,la beso como la primera vez,como ese beso robado, que me quitaron sus labios y como esos besos que faltan por venir, porque somos un caos,pero no podemos negar que amamos las tormentas.
Le lleno la cara de besos y la embisto,con fuerza y pasión, preguntándome si algún día me cansaré de ella,de lo perfecto que se ve su rostro a pesar de que está en medio de un orgasmo,de la facilidad que tiene para manipularme y ella lo sabe,sabe que como ella ninguna y le gusta abusar de los privilegios que le doy. Me acuesto y por primera vez, Frida se acurruca a mi lado como una minina.
Y no sé porqué siento la absurda necesidad de conocerla más,de ser parte de su ser, sabiendo que Frida solo se ama a su misma y me ha quedado demostrado.
—Linda,¿Alguna vez has matado a alguien?—me arrepiento de haber hecho la pregunta.
«Siempre la fastidias Sam»
—Claro—responde tan seria y serena que creo que me está tomando el pelo — Al padre de Carlos y Clara,ellos son mis mejores amigos, diría que mi familia,los conozco hace cuatro años y era conciente de los maltratos y torturas que sufrían. Juan su padre era alcohólico y los golpeaba, también abusaba de su madre,y yo acabe con su vida. Carlos tenía mucho miedo y no sabía de qué manera hacerlo,pero por mi parte sí,solo fue hacer uso de un buen somnífero y una jeringa de aire, logrado así un colapso cardíaco—Una persona normal,se asustaría,y huiría,al contrario yo solo estoy asombrado y admirando a Frida por los cojones que se carga.
—Sam.
—Dime linda.—me mira y me pierdo en el éxtasis que me brindan sus ojos esperando a que diga las palabras que tanto quiero escuchar pero que su naturaleza no le permite decir.
—Una palabra de esto a alguien y vas a conocer a Juan—me ha quedado muy claro la amenaza y se que ella es capaz como tampoco voy a traicionar su confianza.
La beso y se posa sobre mis caderas como Dios la trajo al mundo,la miro y detallo pensando en qué ella no puede ser real,que no existe nadie con su perfecta imperfección.
—¿Frida?—sujeto su cara entre mis manos y la miro a los ojos,si no será ella seré yo.
—Te amo—digo y me vuelve a besar dejándome claro que ella también lo hace,ella también me ama.
Frida
El sol se esconde y el bosque tiene un tono naranja que amo, arreglo mi ropa y Sam hace lo mismo tomando mi mochila. Por un momento me permito pensar en cómo sería nosotros de novios,de esos novios cursis,que se dicen te amo cada dos palabras,y se dan las manos. Recuerdo sus palabras y siento que por una vez alguien me quiere por el monstruo que soy y no por lo que finjo ser,su "te amo" fue después de contarle como maté a Juan,y no se fue,no mostró miedo,ni asco,lo amenacé y recibí un te amo. Yo adoro pasar tiempo con él, porque él me venera, no me trata como princesa,no, soy la reina del mal. Esto está mal,muy mal,pero ya no importa,han Sido semanas en las que hemos visto el atardecer juntos,me ha contado cosas de su familia y su infancia,que por cierto no fue muy bonita, pero yo no puedo, tengo miedo a mostrarme como soy y que sea en vano.
—¿Lista?—me dice sonriendo y me detengo a observar a mi chico, porque sí,es mío,no es de Nila ni de ninguna otra es mío.
Sin mediar palabra lo tomo de la mano y dejo sacar a mi lado humano que me pedía a gritos que lo dejara salir a tomar el aire. Sam me cuenta como le va en los apuntes,y yo le digo que lo ayudaría en todo menos matemáticas. He aprendido mucho sobre él,le gusta el helado de vainilla mezclado con Nutella,le gusta ir al psicólogo para sacar de quicio al que lo atiende, poniéndolo a dudar de su título como profesional de salud mental.
Llegamos a dónde siempre nos separamos y tomo una bocanada de aire haciéndole frente a lo que se avecina. Entrelazo mis dedos en su pelo lo beso ,respiro su aroma y le suelto sin darle tanta importancia a esas tres palabras.
—Te amo Sam—me besa con hambre,se sacia de mí como siempre,como si me necesitara.
Separa nuestros labios y sonríe.
—Yo también linda.
Se da la vuelta y yo también lo hago, encaminandome a casa.
Nota de la autora:
Aw! Es un capítulo de amor,es muy pinki,y esto no estaba en los planes de Frida,ni menos los de Sam,pero y qué???
bueno chau plasticines.
un beso Lorena—que ama los momentos Fridam— Menéndez ❤️
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Amnesia: La otra cara de la luna
Mystery / Thriller«Él y solo él es el culpable» Esas palabras se repiten en la cabeza de Frida mientras empaca sus cosas porque se va de viaje a recuperar lo perdido,a reclamar su vida y lo harían saciando esas ganas que tiene de matar. Frida de 17 años vivía con su...