Capitulo 19

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Frida

Roma/Italia

Los muchachos y yo vamos en camino a dónde Rexon, Ray me evita a toda costa y lo entiendo, él cree que todo esté tiempo he estado pensando en otro hombre para lograr tener sexo con él,pero no es así,puedo asegurarlo,con Ray estuve bien,pero Sam... él es ese verdugo del cuál no me podré librar jamás,está tatuado bajo mi piel con fuego,está en mi como una droga de la cual no me podré librar.

Regreso a la realidad cuando los chicos comienzas a abandonar el vehículo, los sigo y al ver la fortaleza que dice ser la casa de Rexon no pongo en duda mi vestimenta,ya que llevo unos pantalones elegantes a juego con una chaqueta color crema y blusa de satén color blanco,el cabello rubio cae por mi espalda dándome un aire juvenil que no deja de ser maduro a la vista.

Los escoltas del matón nos adentran en el lugar, exactamente la oficina de mi objetivo quien fuma un puro,y al parecer también bebía whisky,el vaso frente a él lo deja en evidencia.

Me detengo ante lo que veo, él... es muy lindo aunque más lindo sería perderme en el éxtasis de sus súplicas.

Me mira expectante a través de sus ojos verdes,el cabello rubio ahora más claro por la luz que se refleja en la ventana está desordenado,le da un aire despreocupado,y diría yo que seductor.

A pesar de lo que causó su hermosa presencia no voy a intimidarme y  menos abandonar mi objetivo.

—Marie—degusta mi nombre en su boca, lo saborea con un tinte psicótico que amo. Sus ojos me recorren,me examinan y se siente bien,se sentiría mejor si no fuese él, causante de mi pena.

—Rexon—seco y duro, intimidante.

—¿Dime qué puedo hacer por tí querida?.

—Por ahora,solo vamos a conversar,no estoy aquí con el fin de negociar contigo,me encuentro frente a ti en busca de información.—su gesto se confunde,pero aún así accede demostrándolo en un asentimiento de la cabeza.—pero tal cosa solo va a ser posible si entablamos una conversación en privado,ya sabes solo los dos—los hombres a cargo de su seguridad dudan.—Tranquilos vengo en son de paz,no estoy armaba, además me parece estúpido que logre vencer a Rexon.

Pero sé que lo haré, porque lo tengo todo planeado y empiezo a caminar como técnica de seducción logrando en un intento inocente y desapercibido apoyarme frente a él en su escritorio una vez que los escoltas salen.

—Bueno, te escucho linda—Rexon intrigado por la situación,me insta a continuar sin saber que está será su fin.

—Yo tengo conocimiento de tu sociedad con Sam,hace tres años el 11 de noviembre para ser exactos, él y tú se reunieron para llevar a cabo una nueva victima ¿Cierto?—asiente con duda,por dos razones,una ha hecho tantos negocio con Sam que de seguro no recuerda ese insignificante que forma la lista del montón, dos,no entiende que tengo que ver yo en esto.—Pues yo estaba ahí,de casualidad claro,pero presente,y esa chica era mi amiga,mi gran amiga de toda la vida, cuando tú y tus hombres se largaron le reclamé a Sam,quien en ese entonces era mi novio—sus ojos se abren con sorpresa, asimilando mis palabras.—lo amenacé con ir a la policía,y luego de esto eché andar,solo que no ande porque me dieron un golpe,que me dejó en total inconsciencia.

—¿Y porqué regresar después de tres años a reclamar?—confuso,esa palabra es la que describe,a Rexon.

—Porque ese golpe me dejó en un estado de amnesia disociativa,y hace unos meses recuperé la memoria,por supuesto no desperté dónde mismo estaba, llegué a las afueras de Inglaterra,y allí viví estos últimos tres años. La pregunta es ¿Tuvieron algo que ver en eso?—me acerco a sus labios.

—No sé Sam,pero yo no,ni siquiera sabía de eso,y entenderás que no puedo depender de los amigos o familias de mis víctimas, porque sino no tendría trabajo y lo sabes, Sam nunca comentó ese suceso,solo soy ignorante.

Sonrío, seductora y sensual,y finjo que me incomoda el sujetador,teniendo así más acceso al bolsillo interno de mi chaqueta. Dónde por supuesto guardo un pequeño revolver,uno que ama matar a quemarropa.

—Bien,creo que no hay más que hablar—y...lo beso,un beso con sabor a muerte,lo mejor de todo, él no pudo resistirse a mis encantos y lo siguió.

Logro con extremo disimulo sacar el arma y como dije,un tiro certero,su frente.

El arma es tan pequeña que no emite sonido.

Tres gotas manchan mi rostro y tomo una toalla absorvente,le doy un beso a Rexon en los labios y salgo del lugar. Por lo menos Marie puede descansar feliz.

Nota de la autora:

El cap fue cortito,espero y les guste la verdad, bueno si nada más que decir ...un beso

Amnesia: La otra cara de la lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora