Nancy estaba completamente atónita ante aquella escena. Se sentía ajena a la situación, como si su presencia sobrara por completo, como si ellos pidieran internamente que se fuera de allí.
Aquellos dos parecían tener una conversación por telepatía, se veía a simple vista que guardaban un gran secreto. El ambiente se llenaba de tensión y el pasillo era inundado por un súbito silencio, casi escalofriante. Se escuchaban voces lejanas y débiles, provenientes de las aulas de la segunda planta. La muchacha veía todo a cámara lenta.
Vio cómo la enojada expresión de Tae se iba tornando en una confiada, algo creída. Vio sus cejas alzarse y una pequeña sonrisa ladeada marcada en sus labios, con sus penetrantes ojos aún en el mayor.
¿Qué demonios?
La confundida chica giró su cabeza y observó esta vez a Kook.
Este estaba pálido, como un fantasma. Tragó saliva e hizo el amago de hablar, pero se quedó en silencio. Suspiró pesadamente y golpeó su lengua contra su mejilla izquierda, sus cejas fruncidas.
El azabache estaba desconcertado. Nunca se había planteado que el mismo Taehyung fuera el que sacara ese tema y mucho menos que lo hiciera delante de Nancy. Podría haber mentido y actuado como si no supiera de lo que habla. Pero le era imposible, lo tomó tan de sorpresa que lo había dejado sin palabras.
Por un momento, se preguntó si el rubio había pensado en aquello tanto como él lo había hecho estas últimas semanas.
No podía quitarse aquella imagen de su desordenada mente. Sí, la del chico sonrojado y su rosada lengua jugando con la punta de su polla. Tampoco la sensación que tuvo cuando estuvieron a punto de besarse, los nervios incontrolables que sintió. Quería olvidarlo con todas sus ganas, pero no podía. Hacer eso había sido un error, lo supo desde el principio.
Nancy estaba tan perpleja ante el silencio, que ni se había dado cuenta de que su boca estaba entreabierta, su garganta seca como lengua de loro.
Entonces fue, cuando las piezas habían comenzado a encajar en su cabeza y sus pensamientos azotaban su mente, esta vez a la velocidad de la luz. Las desapariciones de Jungkook en las fiestas, el porqué la ignoraba, porqué se veía tan ausente, sus sospechas de que le interesaba alguien... Lo que le habían dicho sus amigas.
Las veces que fue cariñoso con ella frente al callado chico... Pensaba que era solamente para molestarlo o incomodarlo, porque sus reacciones le resultaban divertidas.
También pensó en aquella vez que miró su celular y vio que había intercambiado fotos sin ropa y mensajes sexuales con una tal Kim. Ella le había preguntado quién era ella y él simplemente rió, respondiendo que era una amiga de la infancia y que ella la conocía. (También le dijo que no debería de revisar su teléfono si ni siquiera están saliendo)
Esa tal Kim era Kim Taehyung. El nerd de primero.
Su mente se negaba a creer lo que estaba sucediendo rotundamente. Era imposible que fuera verdad, no tenía sentido.
Repentinamente, Nancy caminó dando pistones, hasta donde se encontraba Taehyung y lo agarró del brazo brutamente. Este soltó un jadeo, sorprendido. No opuso resistencia, se dejó llevar por la pelinaranja hasta la esquina del pasillo, donde se encontraba el cuarto de baño de chicas. Entraron, mientras ella murmuraba.
—¿Eres "Kim", verdad? —Tae alzó sus cejas con fuerza, sorprendido por aquella pregunta. Negó con la cabeza.
—¿Pero qué haces, Nancy? —Kook alzó la voz, algo exaltado y siguió sus pasos hasta el interior del baño, dudando un poco antes de entrar. Abrió los ojos como platos al ver a Nancy besar los labios de Taehyung.— ¿Qué mierda?
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Solo 1 nude | kookv au
Fiksi PenggemarDonde Taehyung, un chico nerd y tímido, pierde una apuesta que hizo con su amigo Jimin y tiene que mandar una nude a una persona al azar de su lista de contactos. Lo que no esperaba era que quien recibiera la foto sea nada más y nada menos que Jeon...