17.

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La noche estaba en su mejor punto, Jimin y Jungkook luego de cenar fueron a Disney tal y como lo tenían planeado.

Jungkook estaba tan feliz y ni que decir de Jimin, sus vidas habían tomado una felicidad inigualable de la cual no querían que acabara nunca.

Justo ahora se encontraban haciendo fila para subirse a unas tazas rodantes que a Jimin le llamó la atención, Park estaba frente a Jungkook viendo asombrado todo el parque.

Jeon por su parte sólo lo observaba, lo lindo que se veía con sus ojitos brillando de emoción más ese gorro de Minnie Mouse Que le había regalado lo hacían ver tan tierno y a la vez el ser más hermoso del planeta.

Jimin veía todo tan absorto que se sobresaltó cuando sintió a Jungkook abrazarlo por la espalda, el de cabellos naranjas no pudo nada más que sonreír y recostar su cabeza en el.

— ¿Ya te dije lo hermoso que te miras hoy? — le susurró.

— Me lo has dicho todo el día, Jungkookie. — Jimin riendo respondió.

— Es que no puedo dejar de decírtelo, eres la persona más hermosa en este mundo. — Jungkook sonrió apretando su abrazo.

Jimin sólo río y empezó a caminar cuando la fila estaba avanzando.

Al llegar, juntos se sentaron en una de las tazas con sus manos entrelazadas mientras se sonreían enamorados.

Pero Jimin pudo notar algo en Jungkook, estaba asustado o más bien, nervioso, sus manos estaban sudando y tenía una mueca en su rostro mientras veía la seguridad de la taza.

— ¿Tienes miedo? — Jimin le pregunto.

Jungkook dirigió su mirada hacia el y sólo bufó.

— ¿Miedo? Pff claro que no, ¿Como crees? Esto no me asusta para nada, no, para nada. — Jungkook empezó a escupir palabras nerviosamente.

Entonces Jimin empezó a reírse y se acercó más a él sosteniendo su mano.

— No se preocupe señor Jeon, el día de hoy yo lo protegeré y tranquilo, las tazas no suben solo darán vueltas por lo que no pasará nada. — le dijo acariciando su mano.

Jungkook parpadeo tragando saliva y entonces el juego empezó, las tazas empezaron a dar vueltas haciendo que ambos se sintieran mareados.

Jimin sólo se dispuso a disfrutar y sonreír todo el rato mientras que Jungkook sólo rezaba por su vida y la de su novio.

Al terminar ambos bajaron felices aunque Jungkook tuvo que parar un rato ya que se habia mareado demasiado.

— ¿Vamos a la montaña rusa? ¡Vamos, Vamos! — Jimin emocionado exclamó.

— Nene, espera. — Jungkook lo detuvo mientras trataba de regular su respiración. — ¿Por que mejor no vamos a comer algo? Mira, por allá venden pretzels.

Jimin entrecerró sus ojos y se acercó a él para abrazarlo mientras se ponía de puntitas dejando un besito en sus labios.

— Mejor se honesto y dime que le tienes miedo a los juegos mecánicos, no te haré sentir mal, lo prometo.

— No es que me den miedo. — Jungkook respondió. — Es sólo que me mareo fácilmente.

— Bueno está bien, vamos por el pretzel y luego nos vamos a dormir, la verdad estoy cansado. — Jimin puchereo.

— Como usted guste, señor Park.

Ambos se sonrieron para después volver a fundirse en un cálido beso, fueron juntos a comprar los pretzels y así después ambos partieron hacia el hotel.

Al llegar el hotel les extraño que hubieran mil paparazzis afuera esperándolos, Jimin ya estaba listo para enfrentarlos pero en eso Jungkook hizo que Jimin frenara antes de llegar a la entrada.

— ¿Que ocurre? — Jimin cuestionó.

— Vamos por la parte trasera, será más seguro.

— No te preocupes Kook, solo son paparazzis nada que temer.

— Lo sé. — suspiró. — Pero no quiero lidiar con ellos ahora.

— Tranquilo, les daremos lo que quieren y listo. — Jimin le sonrió.

Jungkook sentía un mal presentimiento, no era normal que hubieran tantos paparazzis, peor a esa hora siendo casi las 2 de la mañana. Además, se había asegurado de que nadie supiera dónde se estaban quedando.

Sin embargo, Jimin no tenía sospechas de nada y sólo se dispuso a conducir, cuando llegaron a la entrada ambos bajaron y dejaron el auto estacionado frente al hotel.

Jungkook tomó la mano de Jimin y este sólo se sonrojó al sentir su tibia mano, inmediatamente, todos los paparazzis les cayeron haciéndoles preguntas y tomándoles fotos.

Los flash hacían que Jungkook bajara su mirada pero aún así sólo siguió caminando sin soltar la mano de Jimin.

La gente era mucha por lo que ambos iban como sardinas enlatadas pero de repente...

¡Poom! Un disparo se escuchó, Jungkook detuvo sus pasos y los paparazzis sólo se separaron un poco sin dejar de tomar fotos.

Jungkook con sus ojos abiertos se dio la vuelta sintiendo como la mano de Jimin lo soltaba, rápidamente el cuerpo de Park cayó en sus brazos llenándolo de la sangre que salía de su cuerpo.

Jimin había sido herido, alguien le había disparado.

Jungkook cayó al suelo con su chico entre sus brazos, las lágrimas no hicieron de esperarse.

— ¡Llamen una ambulancia! ¡El chico Park está muriendo! — Un paparazzi gritó.

El pelinegro sólo acariciaba el rostro de Jimin, sus ojos estaban cerrados y la sangre no dejaba de salir, los flash no paraban, todos tomándoles fotos sin cesar a tal escena.

Para muchos, una noticia de último momento pero para Jungkook era el momento más horrible de su vida.
















REGRESE!!!

𝗕𝗲𝗮𝘁 𝗼𝗳 𝗹𝗼𝘃𝗲 ✧ JK-PJ ೄDonde viven las historias. Descúbrelo ahora