Sofía Johnson siempre ha sido el alma libre que su madre deseaba que fuera. Sin embargo, una alocada jovencita creará caos en su vida al pedirle ayuda para huir; reencontrando, sin querer, a dos amantes perdidos.
[Basado En Enola Holmes]
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Sofía se recostó en el sofá en el que dormía, bastante cansada por aquel día tan ajetreado. Un día había pasado desde la visita de Enola Holmes, y no podía sentirse más removida interiormente debido a aquello.
Cerró sus ojos por un momento, bajo la luz de la vela que se encontraba en el pequeño mueblecito a lado de ella, suspirando profundamente para luego abrir sus ojos castaños y continuar con la lectura que llevaba hasta aquel día.
Su madre había sido fanática de la lectura en vida. Pero no con el tipo de libros sobre cómo conquistar hombres, bailes más populares, cómo hacer un buen bordado o cosas parecidas. A su madre le gustaban los libros prohibidos, aquellos que se habían tratado de silenciar sin mucho éxito y prometían ser una guía para una sociedad más justa, más inclusiva.
La biblioteca personal de Sofía y los libros dentro de la cafetería en la que trabajaba se encontraban repletos de aquellos libros tan tentadores.
Pasó la hoja en su libro, para luego darle un sorbo a su té, presa de su mente tratando de entender y procesar cada palabra en las hojas, sin querer perderse algún detalle, por más insignificante que fuese.
Hubo un silencio en ella, uno casi agradable que disfrutó por unos segundos, a punto de recostarse y dormir aquella noche con el frío de Londres. Pero entonces, lo inesperado sucedió cuando su puerta fue golpeada por un par de golpes.
Sofía abrió los ojos con confusión, presa del pánico sin saber qué esperar de aquellos toques que sonaban desesperados. Se abrazó a sí misma, levantándose de su cama para luego ir al pequeño camino que se dirigía a la puerta, dudando por unos momentos, antes de abrirla con cuidado, dando espacio para observar quién perturbaba su sueño.
Enola Holmes le sonrió, fingiendo ser un ángel, saludándola suavemente.
─Necesito tu ayuda─.
Solo deseaba que eso no se hiciera mucha costumbre.
⚘
La idea era una completa... Bueno, no sé atrevería a decirlo en voz alta. Pero era una idea muy mala que terminaría por meterla en problemas, de eso estaba muy segura. Resultaba un poco increíble el hecho de que estuviese vestida como una elegante esponja de maquillaje, muy refinada a decir verdad.
