Después de todo esto, pasaron 4 años y meses sin tener noticias suyas. Aunque bajábamos a Marruecos, no visitábamos el lugar donde él vivía, y eso era una verdadera lástima para mi.
Hasta el invierno del 2023, cuando finalmente recibí noticias suyas y de su familia. Nos invitaron a la boda de su hermana, Marwa. Fue la mejor noticia que escuché en mucho tiempo; esas palabras iluminaron mi invierno y resonaron en mi corazón hasta la llegada del verano. En ese invierno mágico del 2023, las noticias de su familia y la invitación a la boda de Marwa trajeron consigo una mezcla de alegría y anticipación. La perspectiva de encontrarnos de nuevo en Marruecos, cerca de donde él vivía, llenó mi corazón de emoción y esperanza.
A lo largo de la preparación para el viaje, mi corazón latía con una intensidad inusual, una mezcla de emociones y expectativas. Cada detalle planificado resonaba con la posibilidad de encuentros inesperados y respuestas que habían estado esperando pacientemente en las sombras del tiempo.
El día del viaje, el 6 de julio, llegó con una combinación de nerviosismo y entusiasmo. Cargamos nuestras maletas llenas de expectativas en el coche y nos embarcamos en la aventura hacia la ciudad donde estaba mi casa, pero él no vivía ahí, vivía más lejos.
El 7 de julio, finalmente llegamos a mi casa. Cada rincón parecía impregnado de la posibilidad de reencuentros, y mis pasos resonaban con la duda emocionante del destino.
La ciudad cobraba vida con la promesa de secretos compartidos y las calles parecían guardar historias que solo esperaban ser desveladas. El viaje no solo significaba moverse de un lugar a otro, sino adentrarse en los rincones escondidos del corazón, donde el pasado y el presente se entrelazaban en una danza intrigante.
La emoción crecía con cada hora que nos acercaba al momento de la verdad. ¿Cómo sería encontrarme de nuevo con él después de tantos años? ¿Qué inesperadas vueltas del destino nos reservaba, testigo silencioso de nuestras historias entrelazadas?
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A kilometros de ti
RomanceImagina a dos personas separadas por el mar: una en España y otra en Marruecos. Así comienza mi historia, la de dos adolescentes conectados por un sentimiento especial, a pesar de los kilómetros que nos separan. Soy Sara, tengo 15 años y vivo en Esp...
