Imagina a dos personas separadas por el mar, una en España y la otra en Marruecos. Así empieza mi historia: la de dos adolescentes unidos por un sentimiento, aunque haya kilómetros entre nosotros.
Yo, Zainab, con mis 15 años, vivo en España, mientra...
Después de pasar una tarde llena de alegría, nos fuimos a descansar temprano, ya que al día siguiente erala magnífica boda. Mi madre fue la primera en levantarse y nos despertó a mis hermanas y a mí. Bajé al piso inferior para utilizar el baño, ya que arriba solo había uno de esos baños típicos de Marruecos que no me gustan, JAJAJAJA.
Al entrar a la sala, me encontré con Hamza y su hermano. Tenía una cara de dormida, tonta, de todo, la verdad, JAJAJAJA! Les dije "sbah lkhir" (buenos días) mientras los miraba, y casi me caigo de cara porque tropecé con una piedra que ellos usan para sostener la puerta de la sala y mantenerla abierta.
Después de este pequeño percance, entré al baño, realicé el wudu, salí y evité mirar a los chicos. Subí, me vestí y luego bajé para ayudar a preparar el desayuno en la mesa. Una vez listo, todos nos sentamos y disfrutamos de la maravillosa comida que estaba deliciosa.
Después de comer, recogimos toda la casa y comenzamos a prepararnos para la boda. Primero, mi hermana empezó a maquillar a algunos invitados y a mí. El maquillaje era increíble. Yo llevaba una lebsa roja, muy roja, con perlas y una cinta dorada, y un velo blanco. Estaba súper guapa, mashallah, increíble. Mi prima llevaba una lebsa azul con perlas de un azul intenso y una cinta dorada.
Así nos veíamos:
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Después de completar todas las preparaciones, nos sentamos para hacer TikToks, tomar fotos de recuerdo y disfrutar del momento. Los chicos estaban allí f9a3a, colaborando como debían, ¡JAJAJAJAJA! Nosotras, junto con mi familia, éramos de los últimos en irnos, ya que la boda aún no había comenzado ni nada por el estilo.
Llegamos y nos sentamos en una mesa al fondo, junto a la ventana. Estuvimos charlando con toda la familia, y cada vez la 9a3a se llenaba más de personas. De repente, a mi prima y a mí se nos ocurrió una idea: ir a explorar lo que había alrededor de la 9a3a. Para nuestra sorpresa, encontramos una piscina gigante y nos sentamos en unas sillas alrededor, disfrutando de una agradable charla.
La entrada de la 9a3a:
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