Me Enamoré De Ti (JENLISA) (LISA G!P) 🔞

Capítulo 15

Lisa POV

¡COMETÍ UN GRAVE ERROR!

Apoyé mi cabeza en los azulejos de la ducha mientras el agua corría por mi cuerpo. Sigo reviviendo las últimas 24 horas desde la boda, hasta el aeropuerto y el hotel. Realmente creo que la cagué a lo grande. Pasé mi mano por mi cabello enjuagando el champú y luego al salir de la ducha observé mi reflejo. Tengo un aspecto de mierda y estoy muy disgustada conmigo misma. Sequé mi cuerpo con una toalla y me puse mis boxers ajustados. Le seguí con un sostén deportivo y unos pantalones deportivos negros con una camiseta blanca. Mi cabello todavía goteaba agua cuando salí del baño. Miro la cama donde mi esposa duerme tranquilamente. Doy unos pasos hacia la cama y me siento a los pies mirando por encima del hombro, observándola respirar constantemente. Me aproveché de Jennie. Ella solo quería el establecimiento de sus sueños y yo casi la obligué para casarse conmigo. Ella firmó el contrato, sí. Tampoco la había presionado para firmar. Pero de alguna manera, si lo hice. ¿No fui un poco manipuladora con ella?

No pensé muy bien en esto. ¡Pensé que todo sería negocios! Jennie viviría conmigo pero no tendríamos que convivir juntas, y sólo nos veríamos durante eventos o algunas citas casuales para los medios. Fingiríamos besos y cariño físico. Lo que no pensé que sucedería es que realmente me agradaría su compañía. Es una hermosa joven ambiciosa con un corazón de oro. Cada vez que miro sus ojos gatunos, mi corazón late un poco más rápido. Cada vez que mis labios rozan los suyos, casi me derrito. Amo la forma en que sus manos viajan por mi espalda y acarician mi cuello cada vez que nos besamos. Adoro la manera en que sus ojos brillan de felicidad cada vez que sonrió. Nunca pensé que mi sonrisa tendría algún efecto en alguna persona. Me encanta lo diferente que soy a su lado. Pero aun así, soy una persona jodida. Sé que nunca seré lo suficientemente buena para ella y con certeza sé que la terminaré lastimando. No quiero verla sufrir por mí. Me levanto y saqué la manta extra que había pedido cuando hice la reserva del hotel. Caminé hacia el sofá y me acosté tratando de dormir un poco. Ha sido un largo día. Sólo necesito tiempo para olvidarlo todo.

"Lisa," Abrí mis ojos al escuchar mi nombre. La habitación estaba a oscuras, todavía era muy tarde. Miro a Jennie que está arrodillada en el suelo justo al lado de mi cabeza. Levanté mi cuerpo con los codos y murmuré; "¿Está todo bien?" Negó con su cabeza. "Afuera está lloviendo y me desperté con el sonido de los truenos, no puedo dormir." Me senté pasando mi mano por el cabello, me aclaré la garganta tratando de registrar lo que dijo. Ahora escucho los truenos y las gotas de lluvia golpeando las ventanas con tanta fuerza y ​​claridad. Si no me equivoco, una de sus reglas es estar cerca de ella durante las tormentas. "Lamento mucho haberte despertado, pero ¿podrías acompañarme? No tienes que tomar mi mano ni nada, solo comparte la cama conmigo. Por favor." Comienzo a divagar claramente avergonzada mientras miraba hacia el suelo. Dejé que mi mano tocara su barbilla e incliné su rostro hacia arriba para encontrarme con sus hermosos ojos. "Cariño, deja de entrar en pánico. Yo estoy aquí. Vamos, vamos, te llevaré a la cama."

Mis manos recorren la suave piel de su cuello hasta la parte superior de su brazo. Puedo sentir que está temblando un poco y la ayudo a pararse conmigo. "¿Necesitas un té de manzanilla o algo así? El servicio del hotel está abierto las veinticuatro horas del día," le digo acariciando su piel con mi pulgar. "No, estoy bien," me responde y camina hacia la cama conmigo. "¿De qué lado prefieres?" Pregunta. "No tengo un lado preferido." Se sienta en la cama, luego gatea hacia el lado derecho y da unas palmaditas en la parte izquierda. Camino alrededor de la cama hacia el lado izquierdo y me siento en ella con la espalda en la cabecera con mis piernas estiradas. Se acuesta colocando una mano debajo de la almohada mientras mira hacia mi lado. "¿Cómo es que no tienes un lado preferido?" Pregunta mientras un bostezo sale de sus labios. "No sé." "¿No tienes una cama grande? No he visto tu habitación, ¿sabes?" "Bueno, si alguna vez sientes curiosidad cuando regresemos a casa, sabes dónde encontrar mi habitación y tengo una cama grande, en realidad es más grande que la tuya," respondo tapando su cuerpo tembloroso con las mantas.

Me pregunto cómo alguien puede tener tanto miedo a las tormentas. "¿Y de qué lado duermes?" "En el medio," le digo y ella se ríe un poco. Levanto las cejas, "¿algo gracioso?" "¿Dónde duermen tus citas contigo durmiendo en el medio?" "Bueno cariño, yo no duermo con mis citas. Solo las follo y nunca he llevado alguna a mi casa" "¿Cómo es eso? ¿Qué pasó con Somi?" "¿Que hay con ella?" "Saliste con ella durante mucho tiempo. ¿Ella nunca durmió contigo?" "No, ella respetó mi privacidad. De hecho, eres la primer mujer con quien dormiré en la misma cama." "Soy la-" Su voz desaparece cuando un trueno sacude toda la habitación. "Dame tu mano," le pido y extiende su brazo izquierdo y entrelazo mis dedos con los suyos. Me acuesto en la cama junto a ella mirándola con atención. Sus manos todavía están frías y temblorosas entre las mías. Acerco sus palmas a mi cara y le doy un beso. "Estás a salvo conmigo, no tengas miedo." Trato de consolarla un poco. Porque eso es lo que hacen las amigas, ¿verdad? No estoy cruzando la línea entre nosotras.

Pero ¿por qué siento que lo estoy haciendo? Los muros que he construido a lo largo de los años, se están empezando a derrumbar ladrillo a ladrillo. Jennie se acurruca cerca de mi cuerpo y su nariz roza la mía, y susurra contra mis labios, "bésame," gimo cerrando los ojos. "Quiero pero no puedo" le digo. "Por favor," su voz es tan suave que sus manos dejan las mías y ahora están detrás de mi cuello e intenta acercarme más an ella. Abriendo mis ojos le respondo; "Solo un beso y tienes que prometer que te quedarás en tu lado de la cama." "Tienes mi palabra, ahora bésame" exigió. Dudé un poco mientras acercaba su cuerpo al mío, dejando que mis labios rozaran suavemente los suyos. Nuestro beso me robó el aliento, mis manos se movieron hacia su espalda baja y acerqué su cuerpo más al mío. Ella se montó a horcajadas sobre mis caderas. ¡Maldita sea! ¿Qué está pasando? Joder, no voy a poder parar ¡No puedo! Jennie sabe exactamente lo que me está haciendo y también sabe cuánto la deseo. Ella seguía derribando mis muros, sabiendo muy bien que eso me llevaría a esto, y quería que lo hiciera.

En el fondo de mi mente y corazón, siempre supe que no podría no tenerla. Acaricie sus glúteos y luego les doy un apretón, nuestros labios nunca rompen el contacto. Amo sus labios sobre los míos, son cálidos y dulces. Me provocó con su lengua, moviéndose y rozándose de maneras que me vuelven loca. Muerdo su labio inferior entre besos y Dios, no puedo dejar de besarla, esto se siente tan bien. Es muy hermosa, su piel es suave como la seda, su largo cabello negro y el olor de su cuerpo me excitan demasiado. Estoy hambrienta por ella. Nos alejamos para recuperar el aliento. Le quito el cabello de la cara y sus labios están hinchados por nuestros besos. Jennie pasa su mano por mis brazos y nos miramos a los ojos. Los de ella dicen todo lo que siento y ambas estamos cayendo, estamos cayendo profundamente por la otra. Su pecho tiembla con una pequeña sonrisa, "bueno, a eso le llamo un beso de verdad." Dijo quitándose de mi regazo y regresó a su lado de la cama. Se acosto de espaldas frente a mí y apagó las luces de la mesa auxiliar y cubro nuestros cuerpos con las mantas. Se queda quieta y la miro con atención mientras coloco mi cabeza en la parte posterior de su almohada. Me inclino hacia adelante para oler el aroma de su cabello. Le doy un beso en la parte posterior de su cabeza y le susurro; "buenas noches, Jennie." "Buenas noches, Lili." Me respondió y sonreí ante el sobre nombre que usó para mí.

No tengo ni la menor idea de lo que estoy haciendo con mi vida en estos momentos, solo espero que algún día Jennie me acepte tal como soy.

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