~𝑯𝒂𝒔𝒕𝒂 𝒍𝒂 𝒑𝒓𝒐́𝒙𝒊𝒎𝒂 𝒗𝒊𝒅𝒂, 𝒎𝒐𝒏 𝒂𝒎𝒐𝒖𝒓~ (Camus x Milo)

~Recuerdos~

Camus: ¿Y qué me querías contar?

Milo: Ah, olvida eso, no es nada importante

Camus: No lo creo

Milo: Bueno... Es que ví algo

Camus: ¿Qué viste?

Milo: Y-yo...

Camus: ¿Milo?

Milo: ─ tratando de recordar ─ hablé con ella...

Camus: ¿Ella?

Milo: No se muy bien quién era, no pude reconocerla...

Camus: ¿De qué hablaron?

Milo: Hmm...

Milo estaba a punto de responder, pero en eso sintió una muy fuerte punzada en su cabeza, acompañada de algunas visiones, o más bien, recuerdos, la mayoría eran sobre traiciones de... Camus

Camus: ¿Milo qué tienes?

Milo: Yo... Yo... Iré al baño ─ dijo saliendo de su habitación, para después dirigirse al baño

Camus: ¿Eh...?

~Mientras tanto~

~En algún lugar~

X: Muy bien, poco a poco está recuperando sus recuerdos, y muy pronto se separará del idiota de Camus... ─ dijo aquel ser viendo desde una esfera de cristal

X: Oye... ¿Es necesario hacer ésto? ─ preguntó confundido

X: Oh, pero claro que lo es ─ respondió

X: ¿Por qué lo haces?

X: Ah... Una larga historia

X: Entiendo... ¿Pero cómo por qué motivo lo harías?

X: Necesito que se separen para poder romper ese maldito lazo de Afrodita de una vez por todas...

X: Ya veo...

~De vuelta con Milo~

Milo estaba muy confundido, preguntándose que es lo que estaba pasando, mientras se miraba al espejo del baño

Milo: Maldición... ¿Qué me pasa? ¿Por qué está sucediendo todo ésto? ─ preguntó confundido, en eso sintió una punzada más fuerte y las visiones aumentaron ─ ¡Ahhg! Me duele...

Camus escuchó el grito desde la habitación, así que salió corriendo en dirección al baño, cuando entró y abrió la puerta de este, pudo ver a Milo quejándose del dolor

Camus: ¿¡Milo qué tienes!?

Milo: M-me duele... Mi cabeza

Camus: Oh no... ─ se intentó acercar a Milo pero éste lo esquivo, se veía un poco ¿enojado?

Milo: ¡Aléjate!

Camus: ¿Qué? ¿Por qué?

Milo: No... ¡Ahg! Camus...

Camus: ¿Quieres que vayamos al médico?

Milo: No... Voy a estar bien, t-tranquilo

Camus: ¿Estás seguro? Te ves muy mal, es mejor que vayamos al hospital, Milo

Milo: No, yo sólo...

Camus: ¿Milo? ─ se acercó intentando ver qué le pasaba, pero él también sintió una punzada, y al igual que Milo, con visiones ─ ¡Ahgg! Mierda...