Jennie abrió la puerta de su casa con cuidado. Eran las 11:00 p.m. y tenía miedo de despertar a su madre, pues cuando lo hacía, esta se ponía de mal humor.
Lisa la acompañaba en ese momento. Ya había llamado a su padre diciéndole que se quedaría en casa de Jennie esa noche. Su padre solo le alegró de que al fin, su hija tuviera una amiga con la cual pasar el rato.
— No hagas mucho ruido ¿Sí? — Comentó Jennie a su acompañante, quién solo asintió.
Ambas chicas entraron a la casa con mucha cautela. Se dirigieron a la sala para poder llegar a las escaleras y así poder subir a la habitación de Jennie.
De inmediato se pudo ver una mujer dormida en el sillón de la sala, la televisión estaba encendida y había varias botellas de alcohol a su alrededor. La mujer sostenía una de tequila en su mano.— Buenas noches mamá, duerme bien — La chica le dió un beso en la frente a su madre, quitándole la botella de su mano y poniéndola en la mesita que estaba frente a ella.
Lisa vió toda la situación y no pudo evitar sentir una sensación extraña en su corazón muerto. Al parecer, Lisa no era la única que pasaba por momentos difíciles.
Cuando las chicas terminaron de subir las escaleras, Jennie guió a su acompañante hasta su habitación. Esta tenía unas letras en un cartel que decían: JENNIE'S ROOM.
"Lindo", Pensó Lisa.
Ambas chicas entraron a la habitación y suspiraron, pues ya podían hacer ruido y respirar con tranquilidad.
Lisa dió un pequeño vistazo a la habitación, era linda, el piso era de madera. La casa era algo vieja pero Jennie lograba mantener su escencia en su habitación.— Toma — Jennie sacó una pijama de patitos de su clóset — Puedes ponertela — Le sonrió.
— Amm, gracias Jennie, es linda. Me gusta mucho el color amarillo — Le devolvió la sonrisa.
— Bien, puedes cambiarte en mi baño, está ahí — Señaló la puerta entreabierta que había en la esquina de la habitación.
— Vale, ahora vuelvo — Se apresuró a decir.
....
— Lisa, mírame — Rogó el adolescente.
— ¿Qué? — Contestó irritada.
— Todo lo que estamos haciendo es por tu bien hermanita, por favor, no creas que te he dejado de querer — Trató de tocar su hombro pero esta se quitó.
— ¡Sí claro!, deshacerse de la hermana problemática metiéndola a un centro de rehabilitación para que las amigas de mamá no sospechen nada y que papá siga en su gran puesto en el gobierno y mantenga su reputación limpia — Suspiró — Y para que ¡Tú! — Se giró hacia su hermano apuntandolo con su dedo en el pecho — Vayas a la mejor universidad — Escupió con odio.
— ¡Lisa basta! — Gritó su madre desde el volante — ¡Tú sabes que no estás bien!, has estado consumiendo desde hace tiempo y cada vez empeoras más. Ayer sí Zack no hubiera estado a tiempo contigo. Hoy no estarías aquí — Su madre veía a su hija por el retrovisor.
— ¡No soy una drogadicta!, ¡Yo solo consumo de vez en cuando!... No lo entenderían porque son unos putos anticuados — Rodó los ojos, continuando viendo el paisaje por la ventana.
— Ésto lo hacemos por tú bien Lisa y si nos odiarás por eso, entonces adelante. No hacemos nada malo — Dijo su madre, le dolía ver a su hija así.
ESTÁS LEYENDO
night girl [JENLISA]
Science FictionLalisa Manoban es la hija de un loco científico. Un día, una serie de acontecimientos la volverán un chica con poderes inusuales, ¿que hará al respecto?. ADVERTENCIAS: Si no eres homosexual y te incómoda este tipo de contenido, evita leerlo.