Omegacember Xicheng [FINALIZADA]

*Día 2*

Aroma

Semanas habían pasado desde que Lan Xicheng había escuchado la voz de Jiang WanYin, el líder del clan Lan, pensó que realmente había logrado salir de oscuro lugar en el que se encontraba, pero había vuelto a caer en ese abismo de tristeza y culpa de nuevo. 

Lan Xicheng, podía sentir todavía las lágrimas en su rostro, pese a haber dejado de llorar hace ya un tiempo, la culpa y el dolor no desaparecían de su ser y con cada pensamiento, con cada lagrima se estaba muriendo. 

-Líder de secta Lan, yo no puedo hacer lo que me pide. 

-Sāndú Shèngshǒu, usted es el único que puede, lo que hizo ayer en la reunión de líderes de secta fue impresionante. Usted es el único que puede salvar a mi sobrino.

-Yo no soy el heroe de nadie, salvenlo usted mismo. ¿Oh es que está tan viejo ya, que dejara morir a su sobrino?

-Sāndú Shèngshǒu, no me hable de ese modo que soy su...

-¿Mi qué? Usted hace mucho dejo de tener autoridad ante mí. Ahora quítese, ya vi, porque esta secta parece cementerio, seguramente usted ha estado sintiendo sentir mal a su sobrino. Como ya dije quitese, que aquí ya comenzó a estorbar. 

-Estas son mis tierras y no me iré de aquí. 

-No me haga usar a Zidian. 

-No se atrevería

-¿Eso es un reto Lan Qiren? No sé si sepa, pero me encanta probar a Zidian con aquellos que me retan. 

-Si va a hacer lo que dice, hágalo bien, de lo contrario Gusu Lan, ya no apoyará más su sobrino. 

-Está tomando un camino peligroso, pero acepto el reto. Ahora quítese, de verdad me está estorbando. 

Lan Xicheng, escuchó atentamente la conversación de su tío, con la voz de Jiang WanYin, aquella que por unos minutos le devolvió la vitalidad. Sin embargo esta vez no lo hizo. 

El Lan, se asustó al oír como abrían la puerta de su habitación sin siquiera pedir permiso, incluso se molesto un poco, iba a echar de enseguida a Sāndú Shèngshǒu, de ese lugar de no ser, porque un embriagador aroma a loto lo embriago y dejó en blanco por unos minutos. 

- Buenos días ZeWu-Jun, no soy un fantasma, vengo aquí a escucharlo, porque veo que aquí nadie se ha interesado en al menos intentarlo. Debe ser molesto siempre escuchar a otros pero nunca ser escuchado. -Lan Xicheng, estaba sorprendido, Jian WanYin lo llamaba por su titulo, aun tenía su título, Jiang WanYin, lo iba a escuchar.

-Sé que debe estar pensando, ¿Cómo puede alguien como Sāndú Shèngshǒu, me esta pidiendo que hable? Bueno le puedo decir, que está hablando con la voz de la experiencia. Así que tómese su tiempo en hablar, tengo todo el día para esperar que hable. 

Dicho eso, el silencio invadió la habitación y Jiang Cheng, pasó horas observando a Lan Xicheng, incluso empezó a liberar su aroma de forma inconsciente, el omega interior de Jiang Cheng le decía que eso ayudaría a calmar a Lan Xicheng y al parecer si estaba funcionando, Lan Xicheng, se comenzó a sentir más relajado con el olor del líder Jiang y de un momento a otro comenzó a hablar, asustando a Jiang Cheng. 

-Líder Jiang, perdone por no recibirlo como se debe

-No se disculpe Lan Xichen, siento haberlo que tenido que llamar por su título, si lo llamaba por su nombre de cortesía, estoy seguro que su tío, me hubiera desterrado de Gusu para siempre, a parte de que lo trate como alguien inferior así que seguro me mataba si no lo respetaba a usted. -Lan Xicheng, por unos pequeños minutos se permitió soltar una pequeña risa, las ocurrencias del joven líder de secta lo habían hecho sonreír así sea un poco. 

-Líder Jiang, aprecio el que haya venido a verme, pero, ¿Porque quiere escucharme?

-Todos necesitamos ser escuchados líder Lan

-Eso lo sé, pero porque yo

-Porque es ridículo que el hombre favorito de las mujeres, este encerrado por culpa de un pavo real, que ya está metros bajo tierra. Y antes de que me digas que le debo respeto a los muertos, no soy Wei Wuxian para respetar algo que ya no está vivo, es más ni a los vivos les tengo respeto.

—Líder Jiang, yo no sé si debería...

—Deje de ser tan correcto y simplemente hablé, lo que menos voy a hacer es juzgarlo.

Por primera vez en muchos años Lan Xicheng, volvió a sentir una inmensa alegría en su pecho, ya no era solo la voz del contrario, ahora era también su aroma y su sonrisa, le estaban devolviendo la vida.

Xicheng, paso horas contándole como sentía a Jiang Cheng, contándole desde aquella culpa que sentía, hasta ese soledad que estaba sintiendo al quedarse totalmente solo, ya no tenía hermanos jurados, ni familia a la cuál proteger.

Jiang Cheng, con veneno le contesto diciendo que era ridículo como Lan Qiren, lo obligaba a salir de su reclusión, para después calmarse y hablarle con una enorme sonrisa y ternura a Xicheng, que no estaba solo, el mismo sabía que era sentirse de ese modo, pero el no estaba solo, se tenía a el mismo y ahora tenía lo tenía a el.

Lan Xicheng, necesitaba se esa conversación, de esas palabras, el mayor de los jades de Gusu, no había pensado en eso, Jiang Cheng, el líder del clan Jiang lo había perdido todo y siguió adelante, se convirtió en el líder de secta más temido de todos mientras que el, se había convertido en la vergüenza del mundo de la cultivacion.

Cuando menos lo pensó las lágrimas empezaron a brotar de los ojos de Lan Xicheng y Jiang Cheng, empezó a entrar en pánico dejando salir su aroma de manera totalmente involuntaria.

—Xicheng, no llores, no me ponía de ejemplo para que te sintieras inferior, solo trataba de darte ánimos. Por, lo que sea que esté allá arriba, soy malo para esto. Y Lan Xicheng no llores. No lo hagas a menos que sea de placer.

—Jiang WanYin, que son esas palabras, aquí no puedes decir eso.

—No está el viejo Lan para decirme que hacer Xicheng. Pero ese aquí no es el caso, hice que dejaras de llorar no, eso lo importante.

—Ahora bien es momento de que vayas a dormir, tengo la sospecha de que no lo haz hecho y yo también tengo sueño, así que a dormir Xicheng, mañana será un buen día, incluso será el mejor día tu vida.

Con las palabras de Jiang Cheng, Xicheng sonrió inmensamente y una pequeña risita escapó de sus labios, tan bella fue esa risa que las mejillas de Jiang Cheng se tiñeron de un bonito color rojo, sorprendió así a Lan Xicheng, que había comenzado a prestar atención a todos los gestos de Jiang Cheng.

Con un poco de vergüenza, Jiang Cheng se quito parte de sus vestiduras, sorprendiendo así a Lan Xicheng. El silencio reinaba en el lugar, pero no era un silencio incómodo, al contrario era uno que necesitaban para contemplar y conocer más al otro.

Xicheng, al ver que Jiang Cheng, se estaba acostado en su cama en el rincón, el Lan acompañó al contrario en la cama y ambos se relajaron mutuamente con el aroma del otro, el aroma de ambos se empezó a sincronizar, el sándalo y la flor de loto, se mezclaron, creando así un hermoso aroma, que a los lobos de ambos emocionó y enamoró enseguida, todo gracias al poder del aroma de ambos y de la charla que previamente habían compartido.    

Gracias por leer este capítulo, intente hacerlo un poquito más largo que el anterior, los veré mañana con un nuevo capítulo, :3.