* Día 16*

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Gruñido.

La Gran Sala de la Secta Gusu Lan estaba impregnada de solemnidad, con el aroma a incienso flotando en el aire mientras Lan Qiren y los sabios de la secta se reunían para discutir asuntos importantes

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La Gran Sala de la Secta Gusu Lan estaba impregnada de solemnidad, con el aroma a incienso flotando en el aire mientras Lan Qiren y los sabios de la secta se reunían para discutir asuntos importantes. Jiang Cheng y Lan Xicheng, de pie frente a ellos, compartían una mirada determinada. Habían decidido dar el siguiente paso en su relación y buscaban la bendición de los ancianos de Gusu Lan.

Lan Qiren, con su expresión imperturbable, observaba a la pareja con atención. —Han venido a nosotros en busca de nuestra bendición y orientación. Expliquen su propósito.

Lan Xicheng tomó la palabra con seriedad. —Sabios de la Secta Gusu Lan, Jiang Cheng y yo hemos decidido unir nuestras vidas. Venimos humildemente a pedir su bendición para formalizar nuestra unión y, si así lo permiten, casarnos y formar una familia.

Una ola de murmullos recorrió la sala, pero Lan Qiren, con su mano levantada, silenció cualquier comentario.

—Habla, Jiang Cheng. ¿Es esta tu decisión también?

Jiang Cheng asintió con firmeza. —Sí, es nuestra decisión conjunta. Amamos y respetamos profundamente a la Secta Gusu Lan, y buscamos su bendición para continuar nuestro camino juntos.

Lan Qiren, después de un breve silencio, asintió solemnemente. —La unión de almas es una cuestión seria. Sin embargo, la sinceridad de sus palabras no puede ser ignorada. Les doy mi bendición.

El gesto de Lan Qiren fue seguido por los demás sabios, que asintieron en aprobación. Jiang Cheng y Lan Xicheng se sintieron aliviados al recibir la bendición de la secta. Pero, justo cuando pensaban que la reunión llegaría a su fin, un estruendo resonó en la sala.

Un grupo de alfas sabios, descontentos con la decisión, se manifestó. Se lanzaron hacia Jiang Cheng con miradas hostiles y gruñidos amenazantes. El miedo paralizó momentáneamente a Jiang Cheng, sorprendido por la repentina agresión.

En un abrir y cerrar de ojos, Lan Xicheng, como un rayo, se interpuso entre Jiang Cheng y los atacantes. Su rostro expresaba furia, y sus ojos brillaban con un resplandor dorado mientras dejaba escapar un gruñido profundo, casi bestial.

—¡No permitiré que nadie le haga daño a Jiang Cheng! —exclamó Lan Xicheng, su voz resonando con autoridad.

La sala se sumió en un silencio tenso, y los alfas sabios retrocedieron, impresionados por la intensidad de Lan Xicheng. Jiang Cheng, aún sorprendido, miró a su pareja con una mezcla de gratitud y admiración.

Lan Qiren, con voz firme, reprendió a los alfas sabios y reafirmó su apoyo a la decisión de Jiang Cheng y Lan Xicheng. La situación se calmó, y la pareja recibió la bendición de la secta para su unión.

Justo cuando pensaban que la reunión llegaría a su fin, la puerta se abrió de golpe. Wei Wuxian, con una expresión arrepentida en su rostro, hizo su entrada.

—Lo siento por interrumpir, pero escuché lo sucedido. Jiang Cheng, Lan Xicheng, lamento profundamente cómo los traté en el pasado. Espero que puedan perdonarme.

Wei Wuxian, con sinceridad en sus palabras, se inclinó ante la pareja. Lan Wangji, siguiendo el ejemplo de su hermano, se unió a la disculpa.

—Aceptamos sus disculpas. Y les damos nuestra bendición para que encuentren la felicidad juntos —declaró Wei Wuxian, ofreciendo una sonrisa cálida.

Lan Xicheng y Jiang Cheng, con el corazón lleno de emociones encontradas, agradecieron las disculpas y la bendición de la Secta Gusu Lan y la reconciliación con Wei Wuxian. La reunión en la Gran Sala llegaba a su fin, pero antes de despedirse, Jiang Cheng tomó la palabra.

—Sabios de la Secta Gusu Lan, agradezco su bendición y aceptación. Lan Xicheng y yo hemos decidido dividir nuestro tiempo entre ambas sectas para fortalecer nuestra conexión con ambas comunidades.

Lan Xicheng asintió en acuerdo. —Durante todo el invierno, estaré en la Secta Yunmeng Jiang, y en el verano, regresaré a la Secta Gusu Lan. Así podremos honrar y mantener nuestras raíces y, al mismo tiempo, compartir nuestras vidas con ambas sectas.

Lan Qiren, aunque inicialmente sorprendido, asintió lentamente. —Es una decisión inusual, pero si esto refuerza los lazos entre nuestras sectas y promueve la comprensión, entonces lo aceptamos.

Jiang Cheng y Lan Xicheng se despidieron de la Gran Sala con una sonrisa compartida. Sabían que esta decisión no solo los unía a ellos dos, sino que también construía puentes entre dos sectas que alguna vez estuvieron divididas.

El amor entre ellos, respaldado por la bendición de la Secta Gusu Lan y la reconciliación con el pasado, florecía con fuerza renovada mientras se preparaban para embarcarse en el próximo capítulo de sus vidas.

 El amor entre ellos, respaldado por la bendición de la Secta Gusu Lan y la reconciliación con el pasado, florecía con fuerza renovada mientras se preparaban para embarcarse en el próximo capítulo de sus vidas

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Este capítulo lo ame y lo venía preparando desde ayer, ame la forma en la que describí la decisión de Lan Qiren de apoyarlos porque amo a Lan Qiren y amo que apoye mucho a Lan Xicheng y Jiang Cheng.

Espero que les haya gustado el capítulo y mañana nos veremos con lo divertido de este Omegacember, :3.

Omegacember Xicheng [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora