*Día 30*

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Impregnación de aroma.

En una apacible tarde en Gusu Lan, Jiang Cheng caminaba nervioso por los pasillos de la secta

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En una apacible tarde en Gusu Lan, Jiang Cheng caminaba nervioso por los pasillos de la secta. Su actitud inusual no había pasado desapercibida, y muchos en la secta murmuraban sobre el cambio repentino en el comportamiento del líder de Yunmeng Jiang.

Lan Xicheng, notando la tensión en su pareja, se acercó con preocupación. — A-Cheng, ¿qué sucede? Has estado inquieto todo el día.

Jiang Cheng se mordió el labio inferior, indeciso, antes de finalmente hablar. —Necesito que hagas algo por mí. Quiero que impregnes una prenda con tu aroma.

La solicitud desconcertó a Lan Xicheng, pero asintió con determinación. —Claro, lo haré. ¿Pero por qué necesitas eso?

Jiang Cheng se estremeció, sintiéndose incómodo por la respuesta que estaba por dar. —Estoy... estoy sintiendo una extraña necesidad de tener tu aroma cerca. No sé por qué, pero es abrumador.

Lan Xicheng asintió comprensivamente, sin hacer más preguntas. Se retiró para cumplir con el pedido de Jiang Cheng, dejando a su pareja sumido en sus pensamientos.

Mientras Lan Xicheng se ocupaba de impregnar la prenda, Wei Wuxian, siempre atento a los cambios en la energía espiritual, detectó algo fuera de lo común. Siguió su intuición hasta encontrarse con Jiang Cheng, quien aún parecía intranquilo.

—¿Ah, Jiang Cheng, qué está pasando contigo? ¿Por qué ese aire tan misterioso?

Jiang Cheng frunció el ceño, sin saber cómo explicar lo que estaba sintiendo. Wei Wuxian, con una mirada perspicaz, lo examinó más de cerca.

—¿Estás… embarazado?

La pregunta dejó a Jiang Cheng boquiabierto, sin saber cómo reaccionar. Wei Wuxian sonrió, encantado con la idea.

—¡Entonces es cierto! ¡Voy a ser tío! ¡Jiang Cheng, felicidades!

La sorpresa y la confusión se reflejaron en el rostro de Jiang Cheng mientras procesaba la revelación. Lan Xicheng, que regresaba con la prenda impregnada de aroma, se unió a la escena, desconcertado por la expresión de Jiang Cheng.

—¿Qué está sucediendo aquí?

Wei Wuxian, con una risa juguetona, señaló a Jiang Cheng. —¡Jiang Cheng está embarazado! ¡Vamos a tener un pequeño Jiang-Xicheng!

La noticia dejó a Lan Xicheng boquiabierto, y Jiang Cheng, abrumado por la mezcla de emociones, este último se desmayó en brazos de su pareja.

La noticia de la inesperada noticia de Jiang Cheng se extendió rápidamente por Gusu Lan, causando un revuelo. Los alfas y betas murmuraban entre ellos, sorprendidos por la revelación. Lan Qiren, al enterarse, observó la situación con su característica calma.

Wei Wuxian, disfrutando del caos que había desatado inadvertidamente, se acercó a Lan Xicheng. —¡Felicidades, Lan Xicheng! Tendrás un cachorro con Jiang Cheng.

Lan Xicheng, aún aturdido, asimiló la noticia y luego sonrió con ternura. —Gracias, Wei Wuxian. Esto es inesperado, pero estamos felices.

Con la ayuda de otros presentes, Jiang Cheng fue llevado a la habitación de Xicheng, que ahora sería la habitación de Xicheng y Jiang Cheng.

Lan Xicheng permaneció a su lado, sosteniendo su mano con afecto. Wei Wuxian, con su usual alegría, se despidió con una promesa de visitar frecuentemente y llevar regalos para el futuro bebé.

A medida que el caos se calmaba, Jiang Cheng recobró el conocimiento y se encontró con Lan Xicheng a su lado. La sorpresa del momento había dejado paso a una sensación de asombro y emoción por la nueva vida que crecía dentro de él.

—Parece que seremos padres, ¿eh? —dijo Jiang Cheng, mirando a Lan Xicheng con una sonrisa.

Lan Xicheng le devolvió la sonrisa y acarició suavemente su mejilla. —Sí, A-Cheng. Seremos padres, y haremos todo lo posible para darle al pequeño Jiang-Xicheng el amor y la felicidad que merece.

Juntos, Jiang Cheng y Lan Xicheng se embarcaron en un nuevo capítulo de sus vidas, enfrentando la inesperada pero bienvenida noticia con valentía y determinación. La revelación había cambiado sus vidas de una manera que nunca habían anticipado, pero estaban listos para enfrentar los desafíos y las alegrías que les deparaba el futuro.

Más tardecito les escribo el último capítulo, esto fue un poquito nostálgico de escribir, de paso les quiero mencionar que me dieron ganas de editar el capítulo del nudo, pero no sé si les haya gustado tal y como está, los estaré leyendo al respecto

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Más tardecito les escribo el último capítulo, esto fue un poquito nostálgico de escribir, de paso les quiero mencionar que me dieron ganas de editar el capítulo del nudo, pero no sé si les haya gustado tal y como está, los estaré leyendo al respecto.

Pd1:Y de paso alguien recuerda cuántos meses de embarazo tenía Wei Wuxian, no me acuerdo y los necesito para el último capítulo, :c.

Pd2: Más tardecito nos vemos con el capítulo de esta historia, muchas gracias por leer y hasta un próximo capítulo, :3

Omegacember Xicheng [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora