cap.13

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Han pasado los días exactos dónde silver ya debe ser un conejo, y así paso... Un día estábamos dentro de una cueva ya que las nubes oscurecian el cielo y no quería que los niños no se enfermen y tengan fiebre, obviamente revisamos hasta el fondo de esta cueva por si acaso de que no hubiera un oso o algo peor que eso.
Silver con sus alas de metal cazo algunos animales para poder cenar antes de que empiece la lluvia, mientras que los niños me ayudaban con la fogata acomodando las ramas y rocas alrededor de esta. Mientras cocinaba la carne de mapache el sonido de los truenos nos dió el aviso de que la tormenta llegó así que hice un escudo protector con mi magia contra cualquier otra criatura para poder dormir en paz toda la noche.

Cenamos y acosté a los niños sobre mi capa para luego cantarles su canción favorita hasta que quedaron profundamente dormidos, Silver por otro lado estaba apoyado en una pared con los brazos cruzados como si meditara pero sabía que estaba durmiend...

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Cenamos y acosté a los niños sobre mi capa para luego cantarles su canción favorita hasta que quedaron profundamente dormidos, Silver por otro lado estaba apoyado en una pared con los brazos cruzados como si meditara pero sabía que estaba durmiendo ya que roncando como jabalí. Mientras ellos dormían saque los tres trozos de papel que había logrado encontrar de mi libro perdido en todo este tiempo, los miraba con tristeza porque estaban siendo arrancadas hoja por hoja y usadas como simples papel de hechizos y venderlas en los mercados. Osea era lo que pensaba o quizás sea mentira toda mi suposición pero se notaba que fueron usados por varias personas ya que tenían muchos olores diferentes impregnadas en ellas.
Lo malo de todo es que el trozo de papel que me muestra el hechizo de encontrar personas y cosas no me ayudaba para nada en encontrar mi libro, no servía de nada este papel aparte de tener mi poder impregnado en ellas...
Suspire decepcionada de mi misma y volví a guardarlo en mi bolsillo trasero e iba a acostarme cerca de los niños pero.... Silver se levantó de un salto con una de sus manos en su boca y con la otra se sostenía el estómago, corrio hacia el bosque sin decir una palabra, así que lo seguí detrás de él, no me importaba mojarme porque sabía lo que pasaba en ese entonces. Lo perseguí hasta un pequeño arrollo donde callo de rodillas y empezó a regurgitar como si quería vomitar algo, me acerque para sobar su espalda mientras preparaba el frasco que me dió Athenea.

Silver: amo... -eructa- ¿Qué me pasa...?

T/N: tranquilo amigo, debe ser el mal clima y la comida... Vomita tranquilo...

Silver respiro ondo y empezó a vomitar varias veces... Ocho veces para ser preciso, vómito precisamente las ocho galleta que comió en el pueblo y la corriente se las llevo, luego de que vómito esas galletas acerque el frasquito a su boca diciéndole que la beba con cuidado, él bebió todo su contenido hasta la última gota. Después me arrodille a su lado y él se desplomó pero lo sostuve contra mi cuerpo acariciando su cabeza, poco a poco su cuerpo empezó a largar un vapor extraño que era llevado por el viento, su tamaño empezó a encogerse, sus alas están desapareciendo, su cabello se despejaba de su cabeza y una cola empezó a crecer hasta que por fin era el mismo conejo de antes.

T/N: jeje, bienvenido devuelvo amigo mío. -dije en un susurro-

Ese día lo lleve hasta la cueva para secarlo con un trapo y lo mantuve cerca de la fogata para que esté calentito, luego de eso lo acurruque con los niños y me acomode con ellos para poder dormir mientras la lluvia seguía dándole esa armonía en el bosque.
Al día siguiente mientras las gotas de lluvia caían entre las hojas de los árboles el grito de Silver despertó a medio bosque gritando y girando en el aire diciendo "alfin soy un conejo!!!" "He vuelto a brillar malditos malas sangres!!!" Mahoro con el pelo desordenado volvió a quedarse dormida en un segundo y Katsuma hablaba somnoliento.

Mis Dos Destinados y La Leyenda Del Dragón Elemental (PT2) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora