Mi pecado es amarte - Jenlisa

Capítulo 29: Dancing with a stranger

Penthouse de Lisa

Bienvenida Señorita - dijo Luis el mayordomo

Sana: Muchas gracias - sonrío - ¿Se encuentra Lisa?

Luis: Claro que si, se encuentra en su despacho - dijo sonriendo.

Sana: !!Perfecto !!

Luis: ¿Desea que la lleve hacia allí? - preguntó amablemente.

Sana: No te preocupes Luis, me se el camino, muchas gracias- dijo amablemente.

Lisa se encontraba, revisando unos informes de su empresa, pues poco a poco se fue poniendo al día con los asuntos e inversiones.

Sana: !! Lisa!! - gritó Sana asustando a Lisa.

Lisa: !! Sana !! - gritó Lisa también, imitando a Sana - ¿Qué te trae por aquí? - preguntó curiosa.

Sana: Pues venía a invitarte a una fiesta que dará una amiga - Se acercó rodeando el escritorio y abrazó a Lisa por los hombros - Y no quiero que digas que no - dijo firme.

Lisa: No lo sé, estoy algo ocupada - dijo viendo la pantalla de la computadora.

Sana: Vamos Lisa, te hará bien despejarte un poco - hizo un puchero y con cara de súplica - Vamos a divertirnos - insistía Sana.

Lisa: Ya que insistes tanto vamos a esa dichosa fiesta - rodo los ojos y Sana le dio un beso en la mejilla.

Sana: Entonces ve a vestirte, ¿no irás así en pijama verdad? - dijo Sana riéndose .

Lisa: Bueno, bueno - Lisa se dirigió a su habitación para tomar una ducha y vestirse.

Luego de unos minutos Lisa ya estaba lista, había elegido un traje elegante con ayuda de Sana, pues tenía un buen gusto y sabía lo que a Lisa le gustaba.

Sana: !!Estás espectacular!!- le guiño el ojo - Estoy segura que esta noche, todas la chicas querrán bailar contigo - sonrío.

Lisa: No entiendo tu insistencia para que vaya - dijo Lisa, rodando los ojos.

Sana: No seas aburrida - hizo un puchero - !!Será divertido!! - abrazo a Lisa.

Lisa: Bueno, vamos - dijo con una sonrisa en su rostro, pues sabía lo insistente que Sana podría llegar a ser cuando se lo proponía.

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Dancing with a stranger

Ambas se dirigieron al Club donde sería la fiesta de la amiga de Sana, el lugar era lujoso.

El ambiente del club nocturno era una experiencia sensorial única, donde cada elemento se combina para crear una atmósfera de escape y diversión. Al entrar, te envuelve una mezcla de luces estroboscópicas y neones que parpadean al ritmo de la música, creando un espectáculo visual hipnótico. Las sombras y siluetas de los asistentes se mueven en la penumbra, a veces iluminadas por un destello de luz que corta la oscuridad.

En el club, cada rincón ofrece una experiencia diferente, desde las zonas VIP con sofás de cuero y mesas exclusivas, hasta la pista de baile abarrotada donde todos son iguales al ritmo de la música. Es un lugar donde se pueden dejar atrás las preocupaciones diarias y sumergirse en un mundo de placer sensorial hasta que las primeras luces del amanecer señalan el fin de la aventura nocturna.

El olor a perfume y sudor se mezcla con el humo de las máquinas de niebla, creando un aroma distintivo que se asocia con las noches de fiesta. La barra del club está siempre llena de gente pidiendo cócteles coloridos y chupitos, donde las risas y las conversaciones se entremezclan con los brindis de desconocidos que se convierten en amigos por una noche.