Enamorado de un latino

Capitulo 18

En la cafetería.

Habían llegado a aquella cafetería famosa que todos hablan y que los precios cuestan un ojo de la cara, pero sin importar eso ambos países mirarían el menú que se encontraba viendo cada bebida y cual sería una buena opción.

Mesera: Hola, bienvenidos, ¿Qué desean ordenar?

Ucrania: Mm un Latte macchiato -Miraría con sus ojos azules aquella chica sin ninguna expresión en su rostro, lo único que quería es que tomara luego los pedidos para sacarle información al lagarto que tiene al lado suyo. -

Chile: Yo quiero un cookies & creme frappuccino y un muffin de arándanos, por favor.

Mesera: Ehh, si – Se había quedado estática hay sentir la fría y amenazadora mirada de aquel sujeto de ojos azules- seria XX, ¿crédito o efectivo?

Chile: Por mi parte efec...- Fue interrumpido por Ucrania, al mirarlo ve que este mostraba una tarjeta en su mano indicando que él iba a pagar la comida. -

Ucrania:  Crédito y sea rápida, no tengo todo el maldito día – Acercaría aquella tarjeta a la maquina para pagar de una buena vez. -

Mesera: - Ya estaba algo temblorosa por aquella aura que emanaba eso señor, este no era su día primero llega tarde porque no sonó la alarma y ahora este tipo de mala leche- N-necesito que m-me digan sus nombres, p-por f-favor.

Ucrania: Mmm Iván.

Chile: Julián – Mostraría una leve sonrisa para tranquilizar a la chica al verla tan asustadiza, luego que la ella anotara ambos se dirigen en busca de una mesa disponible en aquel lugar. -

Dos países, uno latino y el otro europeo sentado frente a frente sin decir ninguna palabra lo único que se escuchaba era el cuchicheo de las personas de las mesas cercanas, el clima estaba algo incomodo al no saber cómo iniciar la conversación o que cosa decir. Ucrania por un lado miraba la postura de la persona contraria simplemente analizándolo de pies a cabeza para guardar cada detalle en su mente, mientras que Chile sentía esa fría mirada sobre él, intentaba mirar las servilletas que se encontraban sobre la mesa para poder tranquilizarse e intentar ignorar la mirada que lo estaba aniquilando. Justo el ucraniano iba a emitir una palabra, pero una voz chillona llama la atención de ambos países.

Mesera 2: Un cookies & creme frappuccino y un muffin de arándanos para JULIO! ¡Y latte macchiatto para IAN! -Gritaría a todo pulmón para saber de quien era el pedido, por el simple hecho que su compañera de turno no quiso hacer el pedido por tenerle miedo al cliente. - Último llamado a JULIO E IAN!

Ucrania: Yo no dije ese nombre- Al hablar se podía notar que su lengua materna no era el español dando a entender que era un extranjero, este levantaría una ceja al escuchar como los llamaban, estaba seguro de que dijo a la chica Iván o no Ian. -

Chile: Pues así son aquí jsjsjsj, te cambian el nombre porque se le da la gana, yo voy por ellos- Se levantaría rápidamente solo como excusa para alejarse un poco de ese ambiente, mientras camina siente como su celular vibra, lo sacaría de su bolsillo para saber de quién trataba y sin pensarlo aparece en su rostro una pequeña sonrisa de enamorado.... Espera khe.. como enamorado, esa idea atravesó su mente y le provocaba un escalofrió en su espalda. -

Mesera: Señor, señor sus pedidos- Está la miraría con una ceja alzada esperando que el cliente tomara sus pedidos y se fuera. –

Chile: -Al oír eso guarda su celular en su bolsillo en su pantalón para tomar los pedidos sin olvidar decir gracias. -