Capítulo 8: Buen siervo fiel

307 51 10
                                    

Estando limpio de todo líquido que antes invadió sus manos y ropa. Yoongi lo llevo de vuelta a su castillo dejándolo en su habitación se encargó de cambiarlo y limpiar sus manos en un acto que hizo a Jimin mirarlo con atención.

No sabía que era eso que sentía cada que Yoongi lo tomaba con delicadeza o cuidaba de él pero era una sensación agradable. Algo que surgia desde dentro de su pecho y lo cubría con calidez por completo.

– Yoongi. – llamó Jimin en un susurró cuando fue sentado en la cama por él pálido. Solo recibió un asentimiento de su parte pasando a sentarse a lado de él –¿Puedo saber que paso entre Namjoon y tú? Solo quiero saber qué pasó realmente.

– No puedo decir algo como eso a cualquiera. Así que deja de decir tonterías.

– ¿No confías en mí? – Jimin se acercó lo suficiente hasta pasar sus piernas a cada lado de los muslos de Yoongi. – Soy la única alma que en tan poco tiempo a demostrado lealtad a ti, siendo obediente y acatando todo lo que me dices. Yoongi, toda mi existencia gira en torno a ti y ¿aún así no quieres contarme?

En un puchero Jimin supo que era el momento de contar cómo se sentía, de arriesgarse y ser sincero. Porque a pesar de todas las cosas que decían de Yoongi, el le dió toda su confianza.

Viendo el rostro sin expresión del pálido acunó en sus manos sus mejillas haciendo que la conexión en sus miradas no se perdiera.

– No sé que me sucede pero en las últimas semanas me he sentido extraño. Por alguna razón no he parado de pensar en tí preguntándome porqué siempre pareces apurado y estresado. No entiendo porqué me empeñe en qué toda mi atención solo se centrara en tí aún sabiendo que podrías lastimarme, solo se que cubrí toda inseguridad y solo decidí seguirte. Decidí quedarme contigo pase lo que pase y es raro porque todo mi ser parece solo quererte a ti. – exponiendo todo Jimin sintió sus mejillas sonrojar al solo escuchar el silencio, probablemente había empeorado las cosas pero no sé arrepentía.

No cuando él quería seguir con Yoongi.

– ¿Y porqué sentirías algo como eso por un demonio como yo? Solo sé lastimar, hacer llorar a los demás y matar por venganza. La mitad de mi vida he sido malo con todos y no me arrepiento, he matado almas, personas y tengo la intención de matar a mi propio hermano ¿Eso no es horrible?

Jimin solo le dedicó una floja sonrisa, acariciando la fría piel bajo la palma de su mano, miro con admiración cada facción del rostro de Yoongi.

– ¿Acaso me has hecho daño a mi? – preguntó con una sonrisa está vez acercándose un poco más a él. – Al comienzo también pensé que eras un ser  sin compasión, pero después descubrí que no matas sin una razón. Antes solía entusiasmarme la idea del sexo contigo, pero ahora solo puedo pensar en ese lado único que solo sacas cuando estás conmigo, ese lado que demuestra atención, preocupación y anhelo hacia mi. Hoy supe que no solo soy un juguete para tí, sé que soy más que eso. Si yo solo fuera un objeto en tú plan hubieras dejado que me violaran, pero fuiste por mi y me protegiste.

La duda en los ojos de Yoongi trajo ansiedad a Jimin quien solo quería demostrar la seguridad en sus palabras.

– Seamos un equipo juntos. Te ayudaré a encontrar la verdadera paz, lo prometo.

Nadie en toda la existencia de Yoongi le había pedido algo como eso. Nunca alguien había demostrado algún tipo de afecto o palabras que llegarán por completo a su ser. Sin embargo, ahora tenía a ese pelirrosa encima de él pidiéndole enlazarse mas allá de lo carnal. Sin quererlo, Yoongi tuvo miedo al saber que podría dañar a Jimin todos los escenarios lo llevaban a eso, pero decidió dejarlo de lado y solo confiar.

Sé mi dios [Background LMD]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora