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Shun se encontraba dormido en la cama, después de una noche larga de sexo y más aun siendo virgen, debe estar cansado, tanto que ya son las 4:30 pm y aún no quiere levantarse, pobre el trasero de Kaido.

Aren no podía estar mejor, estaba tan feliz cantando, riendo y bailando, pese a que no fuera su primera vez, se sentía radiante, cocinando o bueno, intentando cocinarle unos panqueques a Kaido. Unos minutos pasaron y ya estaban listos. Aren estaba tan tranquilo colocando miel de maple a los panqueques hasta que escucho un leve quejido de dolor, Kaido había despertado por lo que decidió entrar a su habitación.

-Hola Kaido -le sonrió y dejó el plasto en su mesita de noche-. ¿Te duele algo?

La respiración de Kaido estaba agitada y este trataba de estabilizarse a si mismo, intentando mantener la compostura.

-Aren... Aren Kuboyasu, ¿Q-qué hago en tu cama s-siin ropa? -el omega preguntó nervioso por la respuesta esperaba que le dijera otra cosa que no fuera la cruel realidad.

-Sobre eso -el rostro del alfa se sonrojó-. Ayer tu y yo...lo hicimos

Kaido al oír esa respuesta sintió como el mundo se le vino abajo, creía que era una pesadilla, un mal sueño, pero era la verdad. Shun se sentía mal, el quería que su primera vez fuese especial, y si, el omega ama al alfa, corrección su alfa, Kaido ama a Aren pero el no quería que su primera vez fuese así, y lo peor alguien en el que confió se aprovechó de la situación. Aren se acercó y le preguntó si se encontraba bien, pues claramente no, idiota.

-Aren vete, por favor -le trató de decir de la mejor manera posible, intentando no perder los papeles.

-Pero te hice panqueques, tus favoritos...

Aren dejó el plato en la mesita de noche, sin querer irse de la habitación. Kaido se tapó la parte inferior con las sábanas, se paró y con un brazo empujó a Kuboyasu.

-¡Vete Aren, vete! -le gritó y finalmente el alfa hizo caso, y salió del cuarto.

Kuboyasu pensó, "Ya se le va a pasar", error. Ya había pasado como 4 horas, eran las 8:30 pm y Kaido no salía, el alfa estaba harto, quería entrar a su propio cuarto, se acercó a la puerta de este.

-¡Shun!, abre la puerta...

Kaido no respondió, muy aparte que le dolía la puta cadera, no quería ver al chico que se aprovechó de la situación, aunque técnicamente quien se coló en la habitación de Aren fue otro.

-¡Kaido! ¡Ábreme la maldita puerta de una puta vez! -gritó.

P.O.V Shun

Escuchaba los gritos de Aren y no me importaba, no quería verlo, ¿Cómo fue capaz de hacerme eso?. Kuboyasu golpeaba y golpeaba la puerta esperando una respuesta. No quería verlo pero lo necesitaba, no sabía el porqué, fui al espejo para ver mi cuerpo y entendí porque anhelaba su presencia, había una maldita marca en mi cuello. Aren Kuboyasu eres un idiota de mierda, si seguía así oyendo la voz de Kuboyasu iba a caer ante la tentación, así que vi el cesto de ropa sucia, ropa llena de feromonas de Aren. Agarré una camisa, la misma que usaba para ir a la secundaria PK, y empecé a oler, cada centímetro de la prenda tenía su exquisito aroma.

Aren gritaba y pateaba la puerta para que Kaido la abriese, sin embargo este parecía estar en un trance oliendo la ropa de su alfa, el de hebras moradas se hartó y golpeó la puerta tan fuerte que la abrió de una patada, viendo la escena de su omega oliendo sus prendas, sobretodo su bóxer.

How to know if you're falling in love? [Kubokai] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora