Parte 5

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Después de la reunión en el club de ocultismo, los gemelos regresaron a su casa, cada uno se retiró a su propia habitación para reflexionar sobre lo que habían aprendido.

Solarius estaba sentado en su escritorio, su mente llena de pensamientos y preguntas. Recordó las palabras de Rías, las explicaciones que había dado, y trató de darles sentido. Aunque algunas cosas eran difíciles de creer, sabía que Rías no tenía razón para mentirles.

Por otro lado, Solei estaba acostada en su cama, mirando al techo. También estaba pensando en lo que Rías y los demás habían dicho, tratando de entender lo que significaba todo. Aunque estaba asustada, también sentía una extraña sensación de emoción. Después de todo, estaban entrando en un mundo completamente nuevo.

Rías les había contado a los gemelos sobre el mundo de los demonios, un mundo que era mucho más complejo y peligroso de lo que jamás podrían haber imaginado. Les había hablado de los ángeles y los ángeles caídos, los enemigos de los demonios, y de las tensiones y conflictos que existían entre ellos.

Les había explicado que los demonios, los ángeles y los ángeles caídos eran seres poderosos, cada uno con sus propias habilidades y debilidades. Les había hablado de las batallas que se libraban entre ellos, y de cómo estos conflictos a menudo se derramaban en el mundo humano.

Los gemelos escucharon atentamente, sus mentes llenas de preguntas y preocupaciones. Aunque estaban asustados, también estaban fascinados. Después de todo, estaban aprendiendo sobre un mundo completamente nuevo, un mundo que nunca antes habían imaginado.

Rías también les explicó a los gemelos sobre la chica que habían visto el día del incidente. Les reveló que la chica era en realidad un Ángel Caído, una criatura que una vez fue un ángel pero que había caído de la gracia.

Por supuesto, Rías también se había presentado como un demonio a los gemelos, al igual que los demás miembros del club de ocultismo. Les había explicado que, aunque parecían humanos, eran en realidad seres de otro mundo, cada uno con sus propias habilidades y poderes únicos.

Cuando Rías reveló que los gemelos también eran demonios, la reacción de ambos fue de asombro y confusión. Se miraron el uno al otro, sus ojos llenos de incredulidad.

Solarius fue el primero en reaccionar. Parpadeó, su expresión pasó de la sorpresa a la confusión y luego a la negación.

"¿Qué?" preguntó, su voz apenas un susurro.

"¿Nosotros, demonios?" Parecía que estaba luchando por entender lo que Rías acababa de decir.

Solei, por otro lado, se quedó en silencio. Su rostro se puso pálido y sus ojos se agrandaron con sorpresa. Luego, lentamente, comenzó a negar con la cabeza, como si rechazara la idea.

La sala del club de ocultismo, que antes estaba llena de conversaciones, ahora estaba en silencio. Los demás miembros del club observaban a los gemelos con expresiones de preocupación y simpatía, conscientes de que la revelación de Rías debía ser un shock para ellos.

Rías esperó pacientemente a que los gemelos se tranquilizaran, su expresión era de comprensión y paciencia. Una vez que vio que estaban un poco más calmados, comenzó a hablarles del héroe de los demonios, Naruto.

Naruto, explicó, era un demonio que había logrado grandes hazañas y se había ganado el respeto y la admiración de muchos. A pesar de las dificultades y desafíos que había enfrentado, nunca se había rendido y siempre había luchado por lo que creía.

Rías habló de Naruto con un tono de respeto y admiración, sus ojos brillaban con un brillo de orgullo. Aunque los gemelos todavía estaban lidiando con la revelación de que eran demonios, no pudieron evitar sentirse intrigados por la historia de Naruto.

Hijos del Sol, Naruto DxDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora